-Capítulo 74-

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Vi cómo Julen se acercaba decidido a Mateo, me asustaba pensar en la reacción que podría tener Mateo a ello.

Al principio aprecié su mirada amenazante, pero cuando Julen dijo algo, la cara de Mateo se tornó a apenada y no dudó en darme la espalda para seguir hablando con él. Deseaba saber el qué se decían, estuve 10 minutos sentada en un banco húmedo mientras ellos hablaban.

Me sorprendió que Mateo le chocara el puño antes de seguir adelante caminando y acercarse a mí.

Mateo: Tú café...-Susurró con voz quebrada-

Karen: Debe de estar más frío que la pierna de un muerto...-Susurré cogiéndolo- ¿Qué te ha dicho?

Mateo: Nada...

Karen: Llevó diez minutos sentada aquí y me vas a decir que no te dijo nada...- Dije alzando una ceja-

Mateo: Sólo que lo sentía... -Sabía que mentía, pero no le pregunté más. Miré el reloj-

Karen: ¿Vamos?

Mateo: Sí...

Empezamos a caminar de nuevo sin dirigirnos palabra. Cuando vi las enormes puertas de aquél juzgado el estrés me violó el culo... En el sentido metafórico de la palabra. Miré a Mateo quien se mantenía aún sin expresión y subió las escaleras enormes. Lo seguí lentamente pues los tacones luchaban por hacerme la vida imposible. Subió a un ascensor a mi lado, caminó por un enorme pasillo y, al final, una pequeña habitación donde estaba su abogado sentado con un tocho de papeles.

Abogado: Ya han llegado...-Susurró feliz- siéntense -Ocupamos las sillas delante suya- ¿No has traído abogado?

Karen: No...

Abogado: Bien, será más fácil... Antes de iniciar el tramite de divorcio tenemos que hablar sobre unas cosas. En primer lugar, Mateo quiere dejar la casa a tu nombre y desentenderse de ello. En segundo lugar, la custodia de sus hijos, son pequeños y necesitan más a la madre que al padre así que estarán los fines de semana con él y entré semana contigo. Mateo se verá obligado a pagar por mes $5.400 por hijo por la cuota alimentaria y tú podrás denunciarle en el caso en que no lo haga y llegará a ser penado con 3 años de cárcel si no paga lo que tiene que pagar...-Fue lo único que escuché, la respiración acelerada me impedía oír lo que me decía y el miedo me invadía. Mateo volvió a sujetarme la mano que colgaba temblorosa en un lado de la silla. Una lágrima rodó por mi mejilla y seguida de ella aparecieron muchas más- les toca firmar... ¿Señorita?

Miré a Mateo, era lo que él quería y no me iba a oponer a su voluntad. Atrapé el bolígrafo en mi mano y empecé a firmar más de 10 folios. Sollocé al firmar el último y Mateo hizo lo mismo, le pasé el bolígrafo.

Karen: Termina de firmar tú, te espero fuera...

Saqué una sonrisa fingida y me marché de allí... Estaba hecho, ya no éramos nada, sólo unos amigos con algo en común.

Monster -Mateo Palacios y Karen Watson (3ra temporada)- FanfictionWhere stories live. Discover now