-Capítulo 75-

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Y ahí estaba yo, sentada en un escalón del juzgado mientras me fumaba el 4 cigarro del día y lloraba cómo una niña pequeña. La gente que pasaba a mi lado me miraba apenada, pensaba que seguramente alguien había entrado a la cárcel. Que poco sabían... Seguro que ni siquiera sabían las ganas que tenía de que el mundo me tragara y desapareciera. Seguro que no se les pasaba por la cabeza lo que estaba viviendo, el daño que me hacía ir con mi exmarido a tomarme algo y el dolor que me daba pensar que no habrían más noches como la de ayer.

Seguro que no se les pasaba por la cabeza las ganas que tenía de morirme que si no fuera por mis hijos, me hubiera tirado debajo del autobús que pasaba en ese momento.

Sentí unas ganas incontrolables de tirarme y meter patadas al aire como un bebé... De darme de cabezazos contra una pared y al despertarme al día siguiente no recordar nada... Tenía ganas de despertar de esa estúpida pesadilla que me tenía atada de manos y piernas a un vaivén de dolor y pena.

Extrañé la posibilidad de haber cogido un tren hasta la casa de la madre de Mateo y hablar con el antes de que se le ocurriera pedirme el divorcio... Extrañé la opción de haber huido con mis hijos cuando tuve el momento.

Pero no, estaba sentada, llorando y pensando en fumarme 5 cigarros a la vez. Recordando lo bonito de un amor que no pudo ser, lo bonito de haber tenido a mi marido abrazándome por la noche y diciéndome te quiero al oído. Algo que siempre aprecié pero igualmente perdí. Lo amaba

Mateo: ¿Karen? ¿Estás bien? -Escuché la voz de Mateo, cuando me di la vuelta lo vi sujetando muchos papeles y con la cara húmeda de haber llorado. Negué con la cabeza y él descendió hasta sentarse a mi lado-

Monster -Mateo Palacios y Karen Watson (3ra temporada)- FanfictionWhere stories live. Discover now