tres. 🎭

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Con dolor de estómago y cabeza traté de levantarme, todo giraba, era una locura como me sentía tan de mal.

Aún con mis ojos cerrados, coloqué mis pantuflas. Soné mis huesos y me estiré, como siempre lo hacia antes de despertar.

"Que rico olor", era un olor amargo pero dulce al mismo tiempo, se sentía bien.

Abrí la puerta del baño para ducharme, todavía tenia mis ojos semicerrados. Me decidí a quitarme la ropa pero.. "¿olor a café?, pero si vivo sola".


--Joder, ¿no te han enseñado a tocar la puerta?. -bufo el chico.


Como nunca abrí mis ojos de par en par, con mi vista a un torso completamente desnudo y unos bóxers tapando lo intapable. Abrí la puerta rápidamente para huir y así poder llamar a la policía, pero error mio; Con su brazo izquierdo cerró de un golpe la puerta, dejándome anonadada.


--¿Quien eres y por qué estas en mi casa?. Que yo recuerde volví sola de aquella fiesta. -cerré los ojos y suspire. Puedes llevarte lo que quieras, pero dejame ir.


--¿Eres tonta a caso Kim?, anoche me pedías, bueno, suplicabas por que te folle y ahora ¿no me recuerdas?. -rió. Oye, si quieres lo podemos repetir, tal vez así lo recuerdes. ¿No crees?. -beso mi cuello.


--Dejame, hueles mal. -dije sin más.


--Eres una idiota, recién me he terminado de duchar. -suspiró. Vamos, gira.


--No lo haré. -su mano se hizo puño.


--Que gires. -soltó de nuevo. Joder, eres imbécil. -tomo de mis hombros y me giró rápidamente. Y bien, ¿ahora ya sabes quien soy?. -se cruzó de brazos.


--¿Tú?. -lo mire fijamente.


--Lo sé, sabia que recordarías todo, ¿ahora podemos repetir lo de anoche?. -se acercó más a mi.


--Perdona, pero en realidad no te recuerdo. Mejor me voy, así puedes cambiarte e irte. -abrí la puerta y salí de ahí.


--Anoche gritabas mi nombre y no recuerdas ¿quien soy?. -comenzo a cambiarse. La próxima, no me pidas que quieres follar si harás esto. -continúo con lo suyo.


--No es mi culpa, debí tomar mucho y por eso no lo recuerdo. -mire su espalda, estaba tonificada y con un pequeño tatuaje.


--Deja de mirarme. -sonó molesto. Eres hermosa, pero muy olvidadiza. -me entregó su número. Si alguna vez te sientes sola, ya sabés, puedes llamarme. -tomo su chaqueta. Mi nombre es Jungkook, hasta pronto.




Cuatro días después


--Empezó a decir cosas sin sentido. -tome un sorbo de mi jugo.


--Pero ¿estaba bueno?. -soltó mi amiga atenta a lo que le contaba. Yo pienso que lo tendrías que volver a ver, no es tan grande si es eso lo que te preocupa.


--Lurdes, no puedo salir con alguien que a penas he conocido. Aparté mi abuela se llega a enterar y seguro me mata. -suspire. Es muy grande para mi.


--Joder niña, que esta de chupete. -sonrió. Tendrá unos 24 años, ¿no creés?.


--Con más razón, yo apenas tengo 17, es una locura, si se entera que todavía estoy en la secundaria seguro que se burlará de mi. -mire hacia la ventana.


𝖉𝖊𝖒𝖔𝖓𝖎𝖔 𝖉𝖚𝖑𝖈𝖊 - jk [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora