NYX© (Luke Hemmings)

ocho🔪

si bien en la vida de Luke nada había sido sencillo, eso nunca lo había parado para sonreír, siempre fue un niño alegre con millones de cosas que le alegraban más la vida,hasta que cumplió los catorce y se dio cuenta de que las cosas cambian, desde aquel incidente que le hizo darse cuenta de que siempre vivió en una burbuja, el día en que se le rompió el sueño y se dio cuenta de la estúpida estructura social, y sobre todo de lo escoria que podemos llegar a ser algunos seres humanos.

no fue hasta que la conoció, con esos ojos que le volvieron a inyectar vida, a sus dieciséis años había conocido algo llamado amor, que lo hizo darse cuenta de que ella era lo único bueno en su vida, lástima que no la tenía, ¿o si?.

fue hasta septiembre en el que la bella chica le ayudó a cumplir uno de sus sueños, de esos que se habían podrido dentro de él y que volvían a renacer, es la magia del amor, o eso me dijeron, ella se había convertido en la nueva felicidad del joven, pero todo cambia y luke se estaba acostumbrando a eso.

Nyx solo durmió un poco pero fue un logro para ella, ¿como era posible que se recompuso en tan poco tiempo? yo en su lugar me hubiera dejado consumir por mis necesidades humanas, porque la tristeza me invadiría en cada poro, pero claramente Nyx era fuerte, terca y resistente podía soportar eso y mucho más, de eso estaba más que claro aunque con sinceridad eso era muy raro.

 se asomo por la ventana, aún era muy temprano para meterse a las duchas, su rutina estaba muy lejos de empezar.

todo era monótono en este lugar, pero era lo máximo que podía encontrar en un lugar como área de enfermos mentales o delincuentes juveniles, esto era una cárcel solo que llamada de otra manera.

no tenía permitido nada con punta o algo que pudiera atentar con su integridad física, horarios de visita y guardias que vigilaban su vida cotidiana pero su área tenía un poco de libertad y ella lo aceptaba de esa forma,hoy ella iniciaría sus clases. 

a las nueve en punto las duchas ya estaban a disposición, Nyx solo tomo sus cosas de ducha y su toalla, llegaría a su recamara a ponerse el uniforme blanco, el cual algunos días tenían permitido ponerse de colores oscuros ya que en sus periodos el uniforme común no era lo más apropiado.  se metió a las duchas, la mayoría ya estaban ocupadas menos una del rincón, ¿por qué nunca se llenaba esa ducha? era un misterio, pero ella lleno ese lugar, al entrar todas la miraron raro, no fue hasta que ya estaba completamente desnuda que se dio cuenta que el área de esa ducha era un gran ventanal que no dejaba mucho a la imaginación y es que por eso esa ducha estaba prohibida, fue un error de arquitectura,  se cubrió rápido y salio con las mejillas coloradas, quien diría eso.
lila la vio entre la multitud y la jalo a la ducha que era ocupada por ella, ni tiempo le dio de dar las gracias, se dio un corto baño insuficiente y salio, paseo con su toalla el pasillo, y llego a su habitación, se vistió a velocidad, el pequeño accidente le había quitado tiempo y tenia que llegar a tiempo a su terapia grupal,después a su clase de filosofía.

al entrar al salón en donde siempre se hacían las terapias, habitualmente siempre se encontraban solo cinco chicas que las escuchaba decir su historia para desahogarse, pero no, d
no había nadie y solo estaba el chico rubio que era un imbécil, planeo regresarse donde vino pero ella quería asistir a sus sesiones, quería curarse de ese trauma lo mas rápido posible,trago su orgullo y entro a ese salón,

Luke ni siquiera se percato de que ella estaba ahí, solo se dedico a leer el libro de portada roja que estaba en su asiento, ella lo miro de lejos, Lucía cansado como si no hubiera dormido en toda la noche, lo que pasa es que Luke si durmió, solo que algo en él le dice que estaba equivocado ¿ como su cuerpo podía ser tan contrario? Nyx se mordió la lengua para no hablar nada de lo que quería decirle, sabia que obtendría una mala contestación de parte del chico rubio, pero al final de cuentas ella habló.

- tu no estas en esta sesión- el levanto la vista de su interesante libro de Homero

- y nadie te ha preguntado si estoy o no estoy- quiso proceder en su lectura pero ella de nuevo volvió a interrumpirlo, tanto que llego a consumir completamente su paciencia, recogió sus cosas pero no se levanto, algo le pareció interesante en esa chica de ojos distintos- ¿que es lo que te atormenta, Nyx? 

lo miro ceñuda, eso no le interesaba a él, a ella le atormentaba todo y a la vez nada, era algo extraño que ni ella podía describir, pero lo sentía y se sentía tan mal por eso.

- no me atormenta nada,¿ porqué sería así?- el muchacho sonrió si gracia, esta chica si era de lo más predecible y patética, pero lo intrigaba, le hacia querer conocerla más a fondo y saber ¿por que estaba en ese lugar luciendo tan cuerda? Es que había robado algo, o cometió algún otro crimen, no se sabía- ¿ qué te tiene aquí, Luke?

se encogió de hombros restandole importancia, en el a su parecer nada tenía importancia más que cosas confusas que su cabeza le daba como recuerdos de algo que no tenia explicación, esa era la razón por la cual Luke estaba ahí metido o eso le hicieron creer, aunque a sus veintitrés, era justo que saliera de ese lugar pero ¿ Por qué no hacerlo? ¿Qué te detiene ahí pequeño Luke?.

- problemas mentales, ya sabes algunas cosas locas que te muestra tu cabeza al final todo es producto de mi mente tan descompuesta, pero no me has contestado Nyx, ¿qué te tiene aquí?-

 - esa no es la pregunta, Luke, no sabes nada - esas palabras finales les dio confusión y no solo a el rubio, de igual forma a la chica con heteromancia, ella alzo los hombros y decidió salir sin dar explicaciones, eso le intrigo a Luke, ¿que secretos guarda la chica com nombre de diosa griega?.

 por otra parte estaba él, contemplando el lindo rostro de su amada, estaba mas cerca de ella de lo que pudo estar antes, lastima que ni siquiera podía hablarle,  quería contemplar de cerca los ojos de colores distintos, quería tomar sus labios con libertad, sentía ese sentimiento enfermo que siempre siente cuando la ve, quería que le correspondiera a su tonta y torcida manera. Pero siempre nos quedamos queriendo algo.