Pov Bárbara
¿Se acuerdan qué les comenté que les contaría sobre cómo era mi vida antes de su muerte? Espero que no, porqué eso tendrá que esperar, hoy es un increíble día y lo es porque llegará carne fresca al destacamento, eso significa que vendrán chicos de la academia y que estarán temblando del miedo. Así que mejor les iré contando de como va avanzando mi día y de como voy a divertirme hoy.
—Buenos días López— sonreí ampliamente al ver a mi hermana junto al teléfono, es a penas dos años menor que yo, aún sigue siendo mi hermanita pequeña. Sólo que ella es detective, es como poco más serio, pero menos riesgoso su trabajo y no sé que hace tan temprano en el destacamento— si, es lo que piensas. Hoy llegan los nuevos—.
Rodé los ojos mientras saludaba a los demás, no soy la jefa aquí pero si tengo cierta autoridad. Además de que nuestro padre si es el jefe y no se crean, no por eso he tenido las cosas muy fáciles. Al contrario, me ha tocado luchar muy duro para llegar a donde estoy.
Caminé hacia mi taquilla, buscando la pequeña llave para abrirla aún con mi hermana siguiendo mis pasos, hemos sido de las primeras en llegar. Aunque no tendría porque estar aquí, en fin. Después de abrir mi taquilla, saqué mi arma y mi placa para colocarla en su sitio, tomando dos cargadores, aunque presiento que hoy será un día tranquilo.
—Te encanta intimidar a los nuevos Isabela—le dije pensando en si colocarme o no el chaleco antibalas, hoy me toca estar en las calles; debo entrenar a uno de los nuevos y no sé lo que pueda pasar, así que es mejor si lo hago. Sólo quité los botones de mi camisa a regañadientes, eso me pasa por no tener todo esto en casa, pero es que está el hijo de Bela y joder. Dejé de hacerlo cuando encontré al pequeño con una navaja en las manos. No es que él e Isabela siempre estén en casa, porque ellos viven en un departamento con su esposo. Pero me dio un poco de miedo, lo peor es que no era mía, mi papá la había dejado tirada por ahí y si… mi papá vive conmigo, es que después de la muerte de mamá él se sintió muy sólo, a mi me encanta tenerlo en casa. Y yo también de vez en cuando me siento sola, a penas han pasado seis años de la muerte de mi chica, aún no lo supero del todo. He intentando buscarla en muchas personas y no lo he conseguido, busqué el sabor de sus labios en otras bocas, fue una búsqueda fallida. Porque jamás voy a encontrar a alguien como ella, y ese es el problema. No puedo seguir buscándola en cada persona, debo buscar algo nuevo o seguiré en lo mismo. Debo poner en práctica todo lo que me enseñó, mi rubia me dijo que el amor es pasajero, que me puedo enamorar cuantas veces quiera.
Pero es muy temprano para estar pensando en el amor, no todo gira alrededor de una persona o de los sentimientos. Hay cosas más importantes, como mi trabajo y procurar por la seguridad de mi país.
—Tierra llamando a Barbie— escuché que dijo Bela, sólo rodé los ojos terminando de colocarme el chaleco para luego colocar mi camisa— ¿Otra vez pensando en ella? — asentí con una sonrisa triste, no hay un solo día en el que no piense en ella— debes dejarla ir preciosa, se que duele pero debes hacerlo—
—No quiero dejarla ir, no puedo hacerlo Bela y por favor, sabes que no me gusta tocar este tema, así que no hablemos más de esto—sólo asintió volviendo a donde estaba cuando llegué, ya estaban llegando algunos policías y al parecer ya los nuevos también lo estaban haciendo, así que caminé rápidamente hacia el salón donde se les dará la bienvenida.
porque eso me tocará hacerlo a mí en conjunto con mi padre, cada dos años se integran nuevos policías o novatos que son enviados de la academia, de todos los que entran muy pocos quedan… no tienen idea de que esto es la vida real no entienden que ya no están en la academia y que aquí su vida está en juego, esto es un compromiso y ellos parecen no entenderlo o se hacen los estúpidos. Sólo espero que estos novatos no sean igual que los anteriores, tengo buenas vibras para este año.