El silencio del dolor.

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Las nubes que rodean mi pequeña ciudad son pintadas de tonos rosas, naranjas y amarillos por un atardecer tan común como el viento. Una brisa fresca, un olor a humedad y miles de lágrimas, son los recuerdos de hace unosdías. Pasé mi día entero en el balcón de la casa esperando una llamada que me diera por primera vez en un largo tiempo, una buena noticia. Por desgracia no fue así. Fui despedido una vez más de mi trabajo por culpa de la carencia de habilidades. Pasaron las horas de nuevo, la televisión apagada casi desde que la compré, el único ruido que hay en este espacio es el del aire acondicionado. Por todos lados hay envoltorios y ropas que no han sido usados por siglos. Aún así la calma me acompaña en estos momentos cuando todo se derrumba lentamente, desde los pilares de mi vida, hasta los hilos que acompañan a toda persona a lo largo de su vida. La ayuda jamás llegó, tal como se miran en las novelas... El tiempo se acaba al igual que el cigarrillo que está en el cenicero. En la habitación principal cubierta por la oscuridad, apenas se puede ver la silueta de aquel hombre que siempre fue amable, leal y honesto. El que siempre recibía con una sonrisa a toda persona que le hablaba, aquel que fue corrompido por culpa de la traición, del rechazo y de una pérdida muy valiosa. Fueron los propios amigos, familiares y pareja quienes lo acorralaron a ver la imponente muerte como un descanso necesario para olvidar el dolor. El viento sopló mucho más fuerte levantando las cortinas y dejando el olor tan agradable gracias a la lluvia que ha estado por semanas. Los árboles fuera deeste lugar azotan con vigor. Si nos acercamos más al balcón encontraremos toneladas de envoltorios de medicamentos, inyecciones y frascos vacíos. Mirar el reloj y ver que ya va siendo hora en el que la noche y el frío aumentan hace que todo cambie de perspectiva. La ventana abierta todo el día generó un clima incómodo para una persona común. Mientras que él no sentía nada. Sus ojos dejaron de ver al horizonte, y su cuerpo perdió el color natural que tanto creía que era horrendo. Mientras el teléfono sonaba una y otra vez. Fuera del lugar las camionetas llegaban con mucha prisa. Una de las señoras bajó rompiendo en llanto antes de siquiera ver lo que hay dentro de aquella habitación. Oficiales y médicos suben las escaleras esperando rescatar una llama que se extinguió hace tiempo. Al abrir la puerta se encontraron con elcuerpo de un hombre cuyo único objetivo siempre fue, morir en calma viendo el horizonte.

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⏰ Last updated: Jun 09, 2021 ⏰

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Noche TranquilaWhere stories live. Discover now