El Nuevo Compañero - Todomomo

Sorpresa

Su regreso a casa transcurrió en risas y bromas, pues aunque no lo pareciera Shoto podía ser muy gracioso de vez en cuando, o quizás sólo saca ese lado con Momo.

Ambos estaban contentos por pasar casi toda la tarde juntos, tanto que olvidaron por completo que Shomo podría correr peligro al cuidado de ese trío desastroso que se encargaba de su cuidado.

Al estar a unas cuantas cuadras de llegar, calmaron sus risas un poco, ya que si alguno de sus compañeros los veía así de melosos como venían, comenzaría a bombardearlos con preguntas incómodas y esas cosas; unos minutos pasaron rápidamente y ya estaban en la entrada de los dormitorios.

Momo: -Bueno, supongo que ya terminó nuestro día juntos, ¿no?

Shoto: -Puede que sí, puede que no.
Además aún no hemos decidido con quién dormirá Shomo esta noche.

Momo: -Tienes razón...

¡Shomo!

Sus "instintos maternales" le hicieron exaltarse y por mero impulso abrió la puerta de golpe, asustando a los que se encontraban cerca, incluyendo a su novio.

Toru: -¡Están de regreso!

Momo: -Sí, sí, eso lo podemos dejar para después, ¿en dónde está Shomo?

Al oír ese peculiar nombre, los tres chicos que estaban encargados de cuidarlo esa tarde, voltearon a verse mutuamente, para luego ver a la recién llegada pareja con preocupación.

Hanta: -Viejos... ¿Creen que debemos decirles... ?

Susurró para sus demás amigos, aunque fue inútil, pues los demás lo pudieron escuchar con toda claridad.

Shoto: -¿Decirnos qué cosa?

Momo: -¿¡Algo le pasó a nuestro bebé!?

Eijiro: -N-no... Tranquila...
Bueno, sí le pasó algo pero no sé si sea algo malo.

Denki: -¡Yo creo que hasta van a alegrarse!

Kyoka: -Por Dios, deja de ver las cosas de forma tan surrealista Kaminari.
Obviamente a nadie le gustaría saber que su gato desapareció nuevamente gracias a sus descuidos y que cuando lo encontraron gracias al aparato de su madre sobreprotectora se dieron cuenta de que Shomo nunca fue macho y además de eso tiene una camada de gatitos recién nacidos escondidos en algún lugar del parque, y que además de eso descubrieron que Iida tiene un romance secreto con la chica loca de la clase de apoyo.

Todo se quedó en silencio tras las palabras de la pelimorada, pues al parecer era la única fuera de esos tres que sabían de aquello y al decirlo tan despreocupada provocó que todos sus demás compañeros escucharan y por ende quedasen en shock.

Al notar el silencio tan incómodo que había provocado, la muchacha se sonrojó de la vergüenza y arremetió contra sus amigos, pues cuando le contaron jamás le dijeron que los demás no debían enterarse de todo.

Por otro lado teníamos a un muchacho de cabello bicolor con un tono de piel que casi asimilaba su cabello del lado derecho y a su novia que estaba a punto de desmayarse por la impresión de la noticia.
Sumándole a esto, teníamos a un delegado totalmente avergonzado y con la cara roja por haber sido descubierto por sus compañeros de clase en lo que él creía que estaba haciendo a escondidas de todos para evitar todo lo que nuestros protagonistas vivieron en el momento de anunciarles a todos su relación.
Pero al mismo tiempo estaba ofendido por la forma en la que Jiro se refirió a su actual pareja.

Tenya: -¡Mei no está loca!

Y con esta frase dicha, se desató toda la locura en la Sala de estar de los dormitorios de la clase 1-A.

Había claramente muchos despistados que no habían escuchado lo que ocasionó toda la conmoción, como Bakugo que siempre estaba en su mundo, o Izuku y Ochako, quienes estaban tranquilamente viendo la televisión, sin embargo los demás comenzaron a fomentar cosas respecto a lo que habían anunciado, y tal como el chico de lentes había temido, comenzaron a lloverle las preguntas que tanto temía de parte de sus amigos.

Por otra parte, los "padres" del gato estaban aún en shock, puesto que no se habían imaginado que algo así pudiese suceder.

Momo no pudo más y cayó desmayada, por fortuna su novio estaba ahí para ella y alcanzó a sostenerla antes de que alcanzara el suelo, pero tampoco estaba en el mejor estado posible, no sabía qué hacer o qué decir ahora; estaba congelado... literalmente, pues sin querer activó su mitad de hielo, haciendo que el suelo se congelara en una gran parte.

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¡Changos!

Esta vez sí que me desaparecí un buen rato, ¿no?

Bueno, pero al menos ya tenemos nuevo capítulo, tal vez no sea largo o quizás no era lo que esperaban, pero al menos no se quedaron con la duda de qué pasó xD

En fin, ojalá les haya gustado y espero pronto volver a inspirarme para seguirle a ésta y a las otras historias que tengo pendientes, sólo sean un poco más pacientes :'3

Bye bye (｡･ω ･｡)/