*Kaoru y butch Mi ginecólogo* [Terminada]

Capitulo 92

*Kaoru*

-Mami por favor, te lo suplico ... si me dejas ir a casa de mi amiga a dormir??- me suplicó Buttercup.

-Está bien pero solo si terminas de comerte las verduras- le dije sonriendo.

-AAAGGHHH NO, las odio, yo no me las comeré- dijo cruzando los brazos.

-Bueno entonces no vas a la casa de tu amiga.

-No, mira ya me las como- dijo para después empezar a comerse las verduras con cara de asco, solté una carcajada al verla.

-Tú ganas, ya no te las comas y ve por tu mochila para que te lleve a la casa de tu amiga- apenas terminé de decir eso, soltó el tenedor en el plato y salió disparada para su habitación.- jajaja no tiene remedio.

-Listo mami ya vamos que se nos hace tarde- pero que rápida es, me empieza a jalar hacia la puerta.

-Ok, tranquila ya voy.

Nos subimos al carro y manejé aproximadamente unos 20 minutos. Y al fin llegamos a la casa de su amiga. Me baje con ella, tocó el timbre y esperamos. En cuanto la puerta se abre, Butter se pasó corriendo para abrazar a su amiga, las dos niñas se fueron corriendo muy contentas y yo me quedo a platicar con su mamá.

Una vez que llegué a mi casa de nuevo, me siento extraña, es la primera vez en cinco años que Buttercup no está en la casa. Aayyy mi niña, ya la extraño. Pues como tengo la casa para mi sola, no se que hacer. El timbre suena y caminé lentamente y al llegar abrí la puerta.

-Butch?? -dije en cuanto lo vi parado afuera de mi casa.

-El mismo sexy, guapo, bueno en la cama que tanto te gusta- me reí.

-Que modesto cielo- le digo y él solo sonríe- y bueno dime a que se debe tú "grandiosa" visita.

-Pues una pequeña princesa me dijo que viniera a cuidarte porque hoy te ibas a quedar sola y pues aquí estoy, en tu puerta con una botella de vino para pasar el rato- Buttercup, pienso y después veo que saca la botella de su espalda.- además de que me pidió que te convenciera de que le hagamos un hermanito.

-Jajajaja buen intento pero eso no pasará Butch- le digo y me hago a un lado para que pasara.

-Ya cenaste??- me preguntó y yo negué- que te parece si hacemos una rica cena.

-Me parece perfecto, vamos.

Nos pusimos a preparar la cena. Entre besos y risas terminamos de cocinar, para después pasarnos a la sala a cenar. Durante todo el rato nos la pasamos platicando de que cosas hicimos en el tiempo que nos separamos y en cuanto le empece a contar de mi embarazo y parte de la infancia de nuestra hija. Traje el álbum que tenia de ella. Se lo di a Butch y él solo se quedó ahí callado, escuchando la historia de cada foto que él veía.