Parker me colocó en sus brazos y yo lloraba en silencio. Tenía tantas ganas de gritar y golpear algo que difícilmente logré controlarme. Dirigía mi mirada hacia atrás, Erik trataba de seguirnos el paso con su bastón. Esto es el colmo... mamá se enterará donde me encuentro y estaré aún más jodida. Parker me bajó de sus brazos y abrió la puerta de adelante ayudándome entrar. Vi perfectamente como regresó rápidamente con Erik. Lo sostenía del brazo y ambos venían hacia el auto lo más rápido que podían. Al estar sola grité lo más fuerte que pude. Mi hermanastro subió en la parte trasera y debido al silencio, mis sollozos eran muy notorios.
- Shhh... Shhh... -susurró mientras me abrazaba fuerte-. Todo estará bien, ¿de acuerdo? Todo irá bien y te prometo que ese cabrón me las va a pagar.
-Me duele... -cerré mis ojos con fuerza y mis lágrimas caían a los costados de mis mejillas. Sostuve su brazo que rodeaba mi clavícula y lo apreté fuertemente, tratando de zacear mi dolor. Parker subió al auto y lo encendió en menos de cinco segundos. Ya nos encontrábamos a una velocidad considerada para una multa.
-No muevas la muñeca -ordenó Parker-. ¿Quién lo hizo, Dem? -me quedé en silencio y lo miré suplicándole que no me hiciera decir el nombre-. Tienes que decirnos.
-No sé cómo se llama... pero es alto y rubio. Su cabello casi le cubre un ojo y tiene un pirsin en la ceja -Erik apretó su brazo y ahí noté que él sabía perfectamente de quién hablaba-. Tuvimos problemas con él antes de que tocáramos.
- Ese cabrón... James me la va a pagar... -susurró-. Tranquila, todo irá bien, haremos que deje de doler y todo estará bien. ¿De acuerdo? -murmuró Erik-. ¿Sabes en qué lugar se está quedando James, Parker?
-Vive con su madre -contestó-. ¿Vas a ir justo ahora o...? -lo interrumpí lo más rápido que pude.
-No vayas... de verdad -susurré-. Mi muñeca sanará y haré como si nada hubiese pasado.
- Yo no soy como tú, Dem... -murmuró, estaba furioso, más que eso-. No voy a dejar que un cabrón se aproveche de ti y Parker tampoco. Estoy cansado de que ese idiota trate de dañarme y haciendo esto contigo... solo hará que yo lo elimine más rápido. NO iré ahora, pero no haremos como si nada pasara.No contesté y giré un poco mi rostro hacia mi izquierda. El rostro de Erik estaba tan cerca que no podía verlo, nunca había estado así de cerca. Dirigí mi mirada hacia el frente una vez más y cerré mis ojos mientras que mordía mi labio inferior para tratar de calmar lo que sentía en mi muñeca. Parker aparcó el coche y bajó casi corriendo del auto, ayudándome a bajar. Larga noche... una larga noche me esperaría.
(...)
Entré al cuarto de Parker y Erik y me ayudaron a llegar a la cama. Me recosté de lado sin aplastar el yeso que tenía en mi mano derecha y me acurruqué con mucho cuidado. Parker me acurrucó con una cobija y Erik besó mi frente-. Duerme, mañana será un largo día.
-Lo más probable es que me castiguen -reí bajito y suspiré. No tenía muchos deseos de llegar a casa, un gran sermón comenzaría en cuanto ponga un pie en la puerta-. Gracias... a ambos -susurré con una sonrisa a medias.
- No te castigarán -murmuró Erik muy seguro- de eso me encargaré yo. Solo duerme...Los miré a ambos por última vez y cerré los ojos. Realmente traté de procesar todo lo que había ocurrido el día de hoy. Canté frente a más de cincuenta personas, me fracturé por primera vez, le mentí a mamá sobre a donde iría... aunque pensándolo bien, no estaba mintiendo. Salí con Parker, pero Erik vive en el mismo lugar que él, no hay excusas.
Cuando desperté fue porque escuché la risa estruendosa de alguien. Miré a mí alrededor y noté a Parker reír frente a Erik quien trataba de guardar silencio-. Cállate, te dije que la vamos a despertar.-¿Nah? -les dije con mi voz algo ronca de recién levantada-. Hola -tallé mis ojos con mi mano sana y bostecé. Ambos parecían más tranquilos que la noche anterior y Parker me miraba con una sonrisa-. ¿Qué? ¿Tengo algo en la cara?
-Te estoy esperando, Walker -le dijo a Erik y fruncí el ceño confundida. Se levantó y estiró su mano para tomar su guitarra. ¿Va a cantarme? Oh, ¿mil maneras de morir quizá?
- Ya te lo dije, empieza ahora y te sigo la canción -murmuró el tranquilo.
-What day is it? And in what month? this clock never seemed so alive. I can't keep up and I can't back down, I've been losing so much time... -escuché la voz de Parker y realmente cantaba bien. Él tanto como Erik tenía un cierto tono de voz que hace que cualquier canción suene bien con sus voces. You and me... Lifehouse, recuerdo como la descubrí de repente por ocio. Erik respiró profundo y cantó, su mirada se dirigió hacia donde estaba y miré a Parker, el cual tenía una sonrisa, lo cual no es novedad... él siempre sonríe.
Tragué saliva mientras lo escuchaba cantar-. Cuz it's you and me and all of the people... with nothing to do... nothing to lose... -cantaba suavemente mientras yo les miraba. Me pregunté por qué mamá no intentó llamarme o buscarme o algo. Pero su voz me regresaba de nuevo a él.
Esto era como un mini concierto privado y vaya que me sentía afortunada por eso. No quería que terminara y traté de disfrutar la canción lo más que podía. Sabía que en mi rostro estaba esa sonrisa que dice: estás perdida, has caído. Y yo, sinceramente... trataba de alejarme de ese pensamiento. Sé que hoy regresaría a casa y deseé por un momento que no me buscaran. Erik terminó con la canción y golpeé mi pierna con la palma de mi mano para aplaudir.
- Gracias público querido, gracias -murmuró Erik y Parker rió-. ¿Qué tienes que hacer esta tarde Dem?
-¡Soy su fan número uno! -grité como aquellas fanáticas que ellos tenían. Luego, pensé en lo que haría esta tarde... vaya, ¿nada?-. ¿Ir a casa...? -dije dudosa-. Tengo que regresar o tendré problemas. ¿Por qué no me acompañan?
- Dejaré que vayas a casa solo para que te duches y te cambies de ropa, pasaré por ti a las cuatro porque tengo que mostrarte algo más -dijo Parker- Mañana es tu primer día y no queremos que vayas a casa toda triste hoy. Con tu madre arreglamos todo, les dije que habíamos tenido un accidente en los GoCars y terminamos en el hospital. Tu mamá se preocupó pero vino a verte Raven -la chica que era muy amiga de Erik- nos cubrió diciendo que este era su dormitorio y que te dejaría dormir aquí. Jess también ayudó.
-¿Todo eso ocurrió mientras dormía? -él asintió y yo reí-. ¿En serio tengo el sueño tan pesado?
-Cómo el de un oso invernando -me contestó y su sonrisa se presentó después-. ¿Te ayudo a pararte? -asentí y cuidadosamente me enderecé de la cama, tratando de no usar mi muñeca derecha. Siempre había querido experimentar que se sentía fracturarte algún hueso y ahora que ya lo sé, es una experiencia que no quiero volver a repetir nunca. Miré a Erik el cual estaba sentado en el borde de la cama y caminé hacia él, tomé su hombro por su espalda y me incliné un poco dándole un beso en su mejilla.
-Gracias por ayer y hoy -le dije-. Volveré a fastidiarte en un rato más.
- Siempre es un placer que seas un fastidio, ahora largo. Vuelve en un par de horas -dijo tirándose en la cama-. Agh, extraño mi cama.
-La tiraron hace unos días -se enderezó de golpe y yo salí casi corriendo por la puerta-. ¡Es broma no me odies! -no podía dejar de reír y cuando Parker y yo nos acercamos al auto, mi sonrisa se fue desvaneciendo. Le preguntaré lo que estaba pensando hace unos días y si todo resulta mal, es bueno para mí. Así tendré que meterme en la cabeza que no sucederá nunca. Parker abrió la puerta del coche y entré con cuidado. Pasaron segundos y también se encontraba dentro. Sentía la adrenalina correr dentro de mí y en el primer semáforo en color rojo tomé aire y fuerzas para preguntarle.
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Who's lovin' you? (Minna y Bere)
Teen FictionPor esas veces en las que amaste profundamente y no te arrepientes de nada.