El amor es verdaderamente extraño, se manifiesta de diversas formas, situaciones y aspectos. Las personas que han encontrado el verdadero amor pueden asegurar que es lo mas complicado y dichoso del mundo. Puede ser doloroso y agobiante, pero cuando...
Hola hermosos especímenes de lo que Dios puede hacer.
Ya he publicado el capítulo 8 de "Como pasaron las cosas".
No lo sé, algo me dice que soy algo fría en esta parte. Pero realmente lo hago corto para que no se aburran al leerlo, si es que lo hacen jajaja.
En fin, disfruten.
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Narración
Los rayos del sol lo hicieron despertar.
Se sentía sumamente cansado y con el cuerpo pesado, por lo que ni se inmutó en moverse o hacer ningún ruido. Sólo abrió sus ojos lentamente.
Su visión tardó un poco en enfocarse por completo, pero en cuanto lo hizo, se desconcertó al darse cuenta de que no estaba en su habitación.
Estaba desorientado y perplejo. Con cansancio giró su cabeza para poder ver más de aquel lugar en un intento de reconocer el sitio.
Siguió paseando su mirada hasta dió con su lado izquierdo y su respiración quedó atrapada en su garganta ante la vista.
Todoroki Shouto dormía sentado en un pequeño sillón al lado de la cama. Él estaba cubierto por un ligera manta.
El rostro del joven profesor se veía con tanta calma al dormir. Tenía la cabeza ligeramente ladeada hacia la derecha, haciendo que algunos mechones rojos le cubrieran su ojo izquierdo, tenía los labios ligeramente abiertos. Aquello hizo a Midoriya derretirse por dentro.
- "Es hermoso". - Fue lo que pasó por la mente del peliverde mientras una ligera presión se instalaba en su pecho.
Continúo contemplando al bicolor hasta que sintió algo resbalando por su frente. Movió con pereza su brazo izquierdo para tomar el objeto y vio que era un pañuelo húmedo.
Entonces las imágenes de lo que sucedió al salir del tren llegaron a él.
- "Ya veo. La fiebre aumentó y me desmayé". - Reflexionó mirando nuevamente Todoroki. - "Y Todoroki-kun cuido de mí". - Declaró al finalmente darse cuenta de que el lugar era la habitación del bicolor.
Ante esa revelación, Midoriya tenía varios sentimientos mezclados. Se sentía mal por haber hecho pasar problemas al de ojos heterocromáticos y a la vez se sentía feliz por recibir sus cuidados.
- ¿Y también le vas a mostrar que ya puedes hablar?
Recordó las palabras de su castaña amiga.
- "¿Estará bien que le hablé? ¿Que debería decirle primero?" - Esas y más preguntas comenzaron a atormentar la mente del peliverde. - "Mientras más lo pienso no sé que podría decirle. No puedo simplemente decirle cualquier cosa, no a Todoroki-kun. No pude cumplir mi deseo de cumpleaños de que fuera él el primero en escuchar mi voz, por lo que me rehuso a decirle algo simple".
