WOODEN FLOORBOARDS

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ᵐᵃʸᵇᵉ ᵒᵘʳ ˡᵒᵛᵉ ᶤˢ ʲᵘˢᵗ ˡᵃᶜᵉᵈ ʷᶤᵗʰ ˡˢᵈ, ᵇᵉᶜᵃᵘˢᵉ ᵈᵃʳˡᶤᶰᵍ, ᶤ'ᵐ ʰᶤᵍʰ ᵒᶰ ˡᶤᶠᵉ ᵃᶰᵈ ʸᵒᵘ'ʳᵉ ʲᵘˢᵗ ʰᶤᵍʰ ᵒᶰ ᵐᵉ


Llegué al velorio de Janeth, mi esposa, con Miriam, mi hija, en mis hombros. Cuando llegué, muchas miradas traspasaron el vacío entre ellos y yo, mirándome con desolación, dolor, pena, y más dolor del que nunca podré retratar en estas páginas. Me acerqué lentamente al centro del fetro de roble oscuro, ¿O era Caoba? No me acuerdo la verdad. Últimamente me acuerdo de pocas, pero si tengo algunos vívidos recuerdos de la persona que estaba ahí adentro del ataúd. Recuerdo cuando Janeth se despertó una mañana luego de hacer el amor, y gritó; "Tal vez nuestro amor solo está mezclado con LSD, porque querido, estoy sola en la vida y tú solo en la mía". 

La ceremonia comenzó, Miriam se quedó a cargo de su padrino, mientras yo me mantenía en el primer asiento sólo, sin nadie a mi lado. Cuando hubo terminado la ceremonia, todos comenzaron a acercarse al podio de la iglesia a recitar unas palabras. Siempre detesté expresar mis sentimientos a los demás, pero acá no tenía salida. Me llamaron a subir, y subí hasta al podio de roble oscuro, lleno de las marcas de las líneas de los dedos de otras personas. Todos me miraban, esperando una cuota de dolor en mi discurso. Pensé en leer el papel que tenía en mi mano desde la mañana, viendo si a lo mejor eso debería leer en vez de como me sentía realmente. Lo arrugué con la palma, y hablé por el micrófono.

- Tengo estas voces...- comencé a tomar aire -... en mi cerebro, yo las creé y las odio, pero les pediré un momento que se queden. Yo...tengo esta fijación en la muerte, esta fijación en el cambio, esta fijación que en tres años crecí del dolor que hoy a vuelto. Esta fijación en el sueño, esta fijación en ti y en mí, pero ¿Quién podría ser el siguiente? Pasé tres años escribiendo poemas sobre una fijación en el pasado, y ella me dijo que valía la pena, porque me dijo que durarían como el amor que sentía por mí.

Me salí del micrófono y me acerqué al cajón donde descansaba Janeth, en medio de la tienda blanca como las pequeñas gotas que caían en el gran y verde cementerio. 

- Voy a callarme mientras te abrazo, porque olvidar lo que crees que significa amor
es mi pastilla para dormir todas las noches. Y mientras hago todo lo posible para leer entre líneas, tus labios daban forma a las palabras que trato de interpretar como mentiras, solo para ver al demonio infiltrado detrás de los detalles. Cuando Lucifer regresó al comercio minorista, querida, nos vendió un producto que no queríamos comprar. Pero no estábamos tratando de ser originales, solo intentábamos sobrevivir.

Respiré un momento, comencé a sollozar y mi voz se empezó a quebrar.

- Las... voces en mi cerebro me dicen que todo está en mi cabeza. Que dormiré con un ojo abierto, pero no dormiré hasta que esté muerto. Porque una evaluación justa de mi existencia es una visión realista inconsistente de travesuras egoístas, reducidas a la supervivencia del más apt, que se ha definido por nuestra capacidad de evitar a aquellos que cuidan y sanan cualquier enfermedad. Y estos susurros en mi cabeza, se intensifican en gritos ásperos, que preguntan cuándo explotará mi cráneo para que puedan respirar. Saben que nadie tiene voz cuando nadie escucha, y el violento motín de permanecer en silencio, donde el silencio es una tortura para aquellos que necesitan escuchar algo. Y he llegado a creer, que la violencia tiene su propio tipo de belleza. Y tu eres mi belleza. Y tú eres mi sonrisa violenta. Tú eres mi oración violenta. Y tú no eres mi oxígeno, pero yo respiro tu aire.

Comencé a llorar, me sequé con la manga de mi traje. Seguí diciendo frente a ella y Dios, que estas voces en mi cerebro me recuerdan los errores del pasado, la belleza que encontré de poder decir: "Mira por lo que pasé, sobreviví".

¿Pero la supervivencia está viva, o la supervivencia es solo un marcador de posición para que una mente vacía, fuera de la amenaza de coincidir con el suelo, haga su sangre hervir? 

Porque mi mayor temor nunca fue enfrentar la muerte, o incluso enfrentar lo que sucede después. 

Mi mayor temor nunca fue enfrentar algo así. 

Mi mayor temor era despertar en ese ataúd con todas estas voces cantando un coro de remordimientos, un aborto forzado del curso que había elegido. Y ahora estoy tendido aquí, frente a tu cuerpo, con este miedo, mirando un cajón de madera pagado con nuestros ahorros,
ahora enterrados bajo la tierra que crecieron las malas hierbas que envenenaron
los pies de esta sociedad. 

¿Qué pasaría si ahora me despierto y camino regreso a casa como si nada hubiera pasado?

Saliste de nuestra vida de la manera en que la dejaste, simplemente quitamos las manchas de sangre de la alfombra, simplemente frotamos el barro que queda en tus bolsillos, simplemente doblamos las duras reclamaciones de tus sonetos. Porque los recuerdos han llegado con esto,
solo causan que todo lo demás duela en lo más profundo de este sentimiento rechazado que siento. 

Tal vez nunca me he enfrentado a la muerte, pero si me fuera...

¿Qué sería? 

Estas voces en mi cabeza...

¿Qué dirían y qué verían?

¿Sobreviví o estoy maldito?

¿Morí o aprendí?

¿Y si me despertara y no pasara nada?

¿Qué pasa si nunca me despierto?

Querida, ¿Cuál es mi propósito ahora que no estás?

¿Y si me despertara y no pasara nada?

Y querida,

¿y si te despertaras también?

【✓】【 ʜᴏᴛᴇʟ ʙᴏᴏᴋs 】Rυn wιld, yoυng вeaυтyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora