La batalla contra el Rey estaba por empezar. La escuadra de Oscar aún necesitaba momentos para reaccionar a todo lo ocurrido hasta entonces; el hechicero tampoco lograba entender cómo entró Paulina al reino Ascendente y lograr utilizar su Invocatormentas del modo que lo presenció.
—Espectro —habló. Su acompañante salió a la vista—. Escanea la zona. Quiero saber si estamos solos o tenemos compañía
El espectro se expandió para escanear y sólo rastreó las señales de poseídos que aún rondaban cerca. —Nada interesante... Bueno, esa pequeña llama que está flotando al borde de la brecha. ¿Qué será?
—Vamos averiguarlo —todo el equipo se colocó de pie y avanzaron hasta la llama. Al acercarse demasiado, esta se esfumó—. Esto no me gusta...
La llama era la señal del Rey. Este emergió a la vista pero en un tamaño mucho más grande que cuando lo enfrentó Oscar, su tamaño aumentado era debido a que estaban en su Reino, dejando ver su verdadero tamaño. La vista hacia Saturno fue obstruida por Oryx a través de la brecha. Oryx solo dejaba ver desde su torso a la cabeza. El equipo tuvieron que alzar su vista para lograrlo verlo a los ojos.
—¿Cómo vamos a derrotar eso? Es imposible —habló Aveline quien permanecía herida.
—No es imposible —respondió Raquel—. Somos Luz. Oryx es Oscuridad —explicó—. La Luz debe erradicar a la oscuridad, o deberá sucumbir ante ella.
—Eso fue muy honorable —dijo Oscar—. Katia. Dime que aún recuerdas la forma de destruir a Oryx.
—Sí, pero debemos tomar cobertura —alertó sobre las brechas de poseídos arribando.
La reliquia que usaron anteriormente con las princesas debían ser usadas nuevamente para robar auras de protección pero esta vez los portadores de estas eran Caballeros Torturados. Los Elegidos de Oryx eran esos Caballeros y Ogros devoradores de Luz. Katia explicó que los ogros están conectados con la vitalidad de Oryx, pues si mueren dejarán orbes de oscuridad y un Guardián deberá erradicarla con su Luz, Oryx usa la Doxología para destruir y poseer a su antojo, pero esto lleva momentos y deja expuesto su fuente vital: su pecho.
—Pase lo que pase deben impedir que los Caballeros recuperen los orbes oscuros. Hay que matarlos como prioridad. Oryx necesita tiempo para intentar matarnos. Lo tendrá que hacer cuando vea que hemos matado a sus Ogros —Katia terminó de explicar. La Titán Aveline fue quien entró entre dimensiones y su deber sería trepar hasta la reliquia.
Cada Guardián se colocó en sus posiciones, mientras que Edward fue el que ayudó a despejar las zonas. Oryx centraba su ira en Aveline pues sabía que con ella muerta, no podrían seguir; el Rey lanzaba finos rayos de oscuridad desde su boca, los cuales algunos eran evadidos por la Titán y otros eran resistidos por ella.
Los Ogros empezaron a salir por el orden de las plataformas activadas. Edward ayudó a cada uno para eliminar a los cuatro Ogros, los cuales al caer dejaron las esferas oscuras que Katia mencionó anteriormente. Aveline era una resistente Guardiana pero su agilidad no era su fuerte: al llegar a la reliquia fue derribada por los ataques del Rey pero logró tomarla. Su caída la resistió sin problemas; ahora su objetivo era el Caballero portador del aura. —¿Chicos? El portador está rodeado de enemigos. Debemos despejar el camino a Aveline —habló Edward. El resto abandonó las plataformas para combatir a los enemigos; Oryx seguía atacando pero las armaduras resistían los ataques.
—¡Abran paso! —exclamó la hechicera al activar su tormenta. Los poseídos eran eliminados por los rayos eléctricos de Raquel—. Aveline. Es tu turno.
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Destiny: Guardianes.©
Ciencia FicciónAño 2550 Los humanos al llegar a Marte, lograron descubrir un ente misterioso, lo llamaron "El Viajero". Él ayudó muchísimo para avanzar tecnológicamente y prolongar la vida humana. Esa era le llamaron "La Edad de Oro". Máquinas creadas con el propó...