Love is... pain? | VAUSEMAN 🖤

CAPÍTULO 31

Alex

Un dolor intenso en el abdomen me despertó, creí que había sido un sueño de mal gusto y que despertaría con mi chica de cabello dorado al lado. Pero me sorprendí atada en una silla, sin poder mover mis extremidades y con la mirada pesada. Luchaba por alzar la cabeza con intentos fallidos, oí una puerta abrirse y no caía en cuenta qué estaba pasando. Logré subir la cabeza para mirar a mi novia a unos metros de mi igual de amordazada y atada que yo, su vestido rojo estaba arrugado y sucio, sus rodillas estaban rojas e hinchadas, su mirada desesperada buscaba contacto directo con la mía. Su hermoso maquillaje estaba corrido y su cabello estaba hecho ahora un enredo. Comprendí la situación en la que estábamos y quise poder desatarme para sacar a Piper de allí pero solo conseguía sentir más dolor y hacerme más débil.

Una mano se posó en mi cabello, el tacto reconociblemente masculino me causó repulsión cuando aquel hombre aspiraba mi cabello, las lágrimas me impedían ver con claridad, debía ser fuerte por Piper, en mi cabeza intentaba mantener la calma, intentaba pensar en alguien que nos hiciera esto, todo pasaba como ráfagas por mi cerebro. Entonces el hombre descendió a mi altura y me quito de un solo golpe la cinta adhesiva de mi boca, fue un dolor punzante, tres veces más fuerte que una depilación con cera, sentí la piel de mis labios rasgarse y pasé mi lengua sintiendo el sabor salado de mi sangre, pude entonces ver con claridad. Mi mente se intentaba convencer de que aquello no era cierto, que era una clase de muy mala pesadilla y que no había arrastrado conmigo a Piper a esta situación.

-Matt? Que mierda significa esto?- fue lo que pude decir.

-Es un placer verte de nuevo pequeña, tu piel sigue siendo igual de suave y tersa que hace mucho tiempo.

Fue entonces cuando me percaté que estaba en ropa interior, donde está mi vestido? Donde están mis lentes? Un sentimiento terrorífico y repugnante recorrió mi columna vertebral, mis sentidos dispararon sus alarmas y vi la venda en mi abdomen, recordé los disparos, recordé que intenté salir a máxima velocidad de aquel lugar, pero entonces todo se apagó de repente.

Miré a Piper, primero confundida y luego como si hubiese atado cabos; temía por su vida, la mía no me importaba ni un poco. No entendía por qué Matt hacía esto, yo había cumplido mi parte del trato, recordé que nunca me reuní con Kubra. Él no me haría esto... o sí? Miles de interrogantes se formularon en mi mente mientras que mi corazón parecía un caballo desbocado

-Por qué haces esto?- le pregunté con la rabia corriendo por mi torrente.

-Digamos que... después que te vi, luego de tanto tanto tiempo... la mujer perfecta había aparecido ante mí...- decía todo sin sentido alguno- Siempre atrajiste la mirada y deseo de todos Alex, robabas suspiros con tu andar sensual, con tus piernas largas y piel pálida. Nadie, hombre o mujer se resistían a tu encanto natural... Lo que más me gustaba, gusta- corrigió- de ti es la manera en la que te crees tan inalcanzable, como... te haces la difícil para cualquiera... fue así con tu chica?- me preguntó acercándose a Piper.

-No la toques!- le grité.

-Es una mujer hermosa, son dos clases distintas de belleza.- observaba como Piper lo miraba, se mostraba neutra pero sabía que estaba muerta de miedo.- Le contaste acerca de mí?

-No.- mentí

-Ohh... no le contaste cómo te hice mía? Fui el primero que estuvo dentro de ti.- el daba la vuelta posicionándose detrás de Piper y ella me miraba con los ojos muy abiertos diciéndome "mantén la calma"- Lo recuerdo como si hubiese sido ayer, seguro ella sabe cómo se siente tu suave piel...

-Detente.- le supliqué.

-Quizá la obligue a ver cómo te hago mía de nuevo.- Piper intentó gritar y las lágrimas salían de sus preciosos ojos azules.- Que dijiste? No puedo escucharte Piper.