»Rosa

394 44 16
                                    

Yoongi no recuerda la última vez que se sintió así. Ya sea porque hace mucho no lo hizo, o porque lo sintió tantas veces que quizá nunca dejó de sentirlo.

Vacío. Roto. Solo.

Toma del pico de su botella, sin tener idea de lo que está tomando, pero con la necesidad de más porque si intóxica su sistema puede que deje de sentir ese hueco en su corazón. La música a su alrededor es tan deprimente que le hace preguntarse si se están burlando de él, pero en realidad no tiene idea de lo que hablan esas letras porque no habla inglés, mucho menos borracho, por lo que no puede afirmar si es de esa manera. El bar está medio vacío, con personas hablando tranquilamente y platos sonando de fondo junto con zapatos resonando contra el suelo. Camareros buscando qué hacer y el barista limpiando vasos con un trato viejo. Se consoló al ver que fue lo suficientemente inteligente como para pedir una bebida cerrada y libre de gérmenes de quién sabe quién.

A la madrugada salen los peores moustros, despierto o no, inconsciente o demasiado consciente. En pesadillas. En un vaso de cerveza. En una pastilla. Yoongi recuerda sus demonios y los deja salir en suspiros pesados que le siguen a los sorbos de alcohol. La gente a su alrededor los escupe en palabras bruscas y risas fuertes. Comida en sus bocas y pisadas vacilantes.

De nuevo, Yoongi había fracasado. Su intento por seguir delante terminó en solo un intento. Puede culpar a la persona que está en la otra punta de la barra, pero él sabe que no puede hacer eso. No debería.

Es su culpa.

Por no tener interés. Por no ser capaz de sentir. Por haber gastado todo su corazón anteriormente con alguien más.

Pero también es culpa de él.

Quién es demasiado como para no darle el corazón entero. Quién es demasiado como para negarle algo. Quién es demasiado como para no gastar toda tu vida en él.

Seokjin lo nota, y se ve triste y avergonzado. Yoongi imita su mueca, haciéndole saber que él también está triste y humillado.

¿Sabían que la humillación es un sentimiento propio? Nadie puede hacerte sentir humillado. Solo tú eres capaz de sentirlo y provocarlo, por lo tanto nadie te puede humillar. Yoongi siempre se esfuerza por no humillarse. Pero, por situaciones como estás, es que siempre cuestionará el sentimiento de la humillación y vergüenza.

Seokjin se acerca, y se deja caer a su lado, soltando un suspiro largo y cansado.

"¿Cómo es que siempre terminamos así?"

Yoongi desearía saber.

Si lo supiera, lo evitaría. Porque Yoongi no es fanático del dolor, y Seokjin es solo eso. Más dolor para su hueco pecho. Toma de su botella

"Es el hilo que nos une. No es tan elástico como creímos, al parecer" se burla. Saben que es una broma. Porque ellos no están unidos nada más que por recuerdos.

Ni el destino, ni el universo, ni siquiera ellos mismos, los querían juntos. Así que no había hilo rojo. No eran almas gemelas. No eran polos opuestos. Solo dos desgraciados que tuvieron la mala decisión de juntarse cuando no sabían nada.

El primer amor es para siempre, dicen.

Yoongi esperaba que no.

Seokjin soltó una ligera risita.

"Ah, ¿de qué color crees que sea? Siempre pensé que nuestro color era el azul, ya sabes."

Se encogió de hombros.

"Mientras que no sea rosa..."

"Definitivamente no es rosa."

Yoongi lo sabía de todos modos. Les gustaba recordarse, por razones obvias, que no estaban destinados a estar juntos. Seokjin nunca creyó que eran rosa, y puede que ese haya sido el problema.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Sep 23, 2019 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

I.L.U. | [YoonJin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora