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Estaba cansada, saturada de todos los problemas así que decidí irme de casa por un tiempo, no le dije a nadie, esto era una decisión desesperada pero necesaria. Ya en la carretera, lu...
Tenia las manos embarradas con salsa, le busque unas servilletas y sin preguntar le agarré la mano para ayudarle a limpiar, pero ella se sobresaltó y se puso ahora en vez de rosada, roja. Me di cuenta ya cuando le había terminado de limpiar, solté su mano rápidamente -Lo siento! no te avisé antes.- se veía adorable avergonzada....¿Que? me puse igual de roja que ella. -S-si, yo podía hacerlo sola, la verdad- se agarró la nuca como pose de vergüenza y se rió.
Al fin se le veía más relajada, como si se hubiera sacado un millón de kilos de estrés de su espalda, quería volver a probar los espaguetis ahora si con el tenedor, al parecer nunca usó uno, lo agarraba de manera torpe, pero hacia su mejor intento. Luego se llevó una montaña de espagueti a la boca y trato de masticar, con la boca abierta y luego intentó tragar de manera seca y de mala gana -Todo esto del combustible..Es una experiencia extraña.-
Después de comer y del día ajetreado, me bajó el sueño y con suerte podía mantener los ojos abiertos. -Bueno es hora de dormir, deja prepararé el sofá para mí, tu dormirás en mi cama y no te preocupes, eres la invitada.- me miró confusa, como siempre.- Pero las gemas no duermen.. yo estaré en el sofá, veré en que me entretengo...-La verdad se veía que no sabia que hacer, OH la tele!
-Bueno prenderé la tele para que veas algún programa, toma aquí está el control,- Le enseñé como se usaba, se veía interesada en el nuevo aparato, la deje investigar los canales y me fui a acostar.
Estaba tan cansada que quede profundamente dormida, lo único que me hizo despertarme fueron los rayos del sol y el aire fresco de mañana que se dejaba pasar en la ventana rota, el cartón que dejamos se había caído. A pesar del frío sentía un calor tibio en mi espalda, a medida que abrí mis ojos y despertaba mis sentidos me fui dando cuenta de algo que estaba envolviéndome del pecho hasta la cintura, trate de moverme, darme la vuelta y ver que es lo que era.
La invitada se hizo un espacio en mi cama y a pesar de lo que dijo, logró quedarse dormida, me la quede mirando un rato, su cara era muy diferente a lo que estaba el día anterior, todo mal que emanaba en su aura había desaparecido, parecía otra persona. Luego de un rato de mirarla, la gema que estaba en bolita lentamente abría los ojos, rápidamente cerré los míos y me hice la dormida.-Que estoy haciendo.- susurro apenada, sentí como me soltaba lentamente de sus brasos y se sentó en la cama. Se quedo en silencio un buen rato, yo para parecer más creíble abrí los ojos con cara de sueño y simule bostezar. La mire...acaso me estaba viendo en todo el rato que estuvo callada? y fingí asustarme un poco. -Buenos días?- Al reaccionar se puso rosada.
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