Personajes ambivalentes de mi diario andar

1) Personaje incomprendido (Dama de aprox. 40 años)

Cada día al visitar ese sitio de labores, ella tiene una particular gestualizacion de incomodidad y seriedad, a todo protesta, no espera mucho para contestar de forma brusca y menos si alguien intenta hacerla reír, no cambia su semblante bajo ningún motivo, durante toda su jornada ella se muestra de ese modo, aparentemente como un ser bastante fuerte, distante, sin necesidad de afecto y preparada siempre para dar la respuesta mas fría y menos amable.

Una cantidad considerable de personas, siempre emite comentarios sobre su forma de ser, mas de uno ha sido victima de su peculiar carácter, recuerdo que hace un año cuando la conocí, la primera vez que me contesto mal, no pude evitar sentir como mis ojos se empañaban, solo sonreí y fingí que no era incomodo o intimidante lo que decía, lo cierto es que luego de eso, en lugar de llenarme de rencor y quitarle toda muestra de amabilidad, tal como la mayoría hacia, yo decidí investigar las razones por las cuales actuaba de ese modo y vaya sorpresa...

Ene cantidad de problemas aquejaban a aquella persona, muchas de sus cargas personales eran transportadas hasta su sitio de labor y esto dificultaba mucho el que ella fuese amable, recuerdo que siempre le daba los buenos días, le preguntaba que por que no sonreía, a lo que ella con muy mal gesto me contestaba que su trabajo no era ese.

Hasta que un día, me obsequio media sonrisa y desde entonces comprendí que ya se había abierto una puerta, mi trabajo estaba dando frutos, esa constancia en amabilidad y saludo eran una labor tediosa debido al personaje, se preguntaran ¿Por que tanta insistencia? Les explico:

Las personas que se topan con nosotros, son regalos, que en ocasiones son presentes fabulosos y en otros son ira, lagrimas y estrés, ella vale la pena, poco a poco fue depositando confianza en mi, comencé a preguntar como era su vida, que hacia para distraerse, como eran sus días de descanso y que sentía, ella sin mucho titubeo compartió su historia conmigo y pude determinar, que el cariño, el abrazo, el buenos días, el como estas, son piezas sencillas que pueden desencadenar grandes cambios, ella sonríe cuando nos vemos, me saluda con un cálido abrazo y me da uno que otro halago, prepara café y comparte sin rechistar, todos observan atónitos cuando la hago reír y yo solo digo "Todos merecemos una oportunidad"

En ocasiones nosotros hacemos acto de presencia en la vida de una persona, para mejorar algo, para transmitir, para sembrar, para dar una pincelada de color a su realidad y lo hermoso de todo esto, es que dejamos una huella profunda en el matiz de esa alma.