❤️(◍•ᴗ•◍)❤ Siwon X Zhoumi (◍•ᴗ•◍)❤(◍•ᴗ•◍)❤
Acariciaba sus largas piernas desnudas, lentamente, casi venerándolas, sintiendo su suavidad debajo de la yema de sus dedos. Suaves, tal y como había imaginado en un principio. Para Siwon esto parecía un sueño.
Y es que no se cansaba de pasarlos una y otra vez a lo largo de cada extremidad, admirando como se erizaba levemente la piel ante el contacto, descubriendo lugares que hacían suspirar a ZhouMi.
El chino sonreía con placidez, los ojos cerrados, sintiendo esas manos que tanto le gustaban recorrerlo lánguidamente desde la cadera hasta el tobillo y vuelta a empezar.
—Si les haces una foto, te durarán más, hasta la puedes mandar hacer en retrato familiar — susurró divertido. Siwon sonrió.
—Me gustan más al natural.-dijo el caballo de la misma manera.
Acariciaba con las manos y también con los labios, prodigando sutiles besos, y ZhouMi nunca se había sentido tan querido con un gesto tan simple.
—¿Te estás excitando? — preguntó, juguetón, mientras se colocaba encima del chino. Este bufó algo molesto.
—¿Cómo no hacerlo? Eres un Casanova — lo miró y se mordió el labio —. Siempre tan perfecto… — chasqueó la lengua y le acarició el pelo, despeinándolo un poco — Así mejor, pero aun así te ves asquerosamente perfecto — Siwon rió. ¿De verdad ese era Zhoumi? No podía creer que aquel lado del chino solo el pudiera ver.
—Hablando de perfección…
Y lo besó, alargando su brazo para alcanzar una de las piernas del chino y empezar a acariciarla de nuevo.
—A eso se le llama fetichismo — jadeó ZhouMi cuando Siwon comenzó a lamer su cuello.
—Crearé una religión dedicada a tus piernas, donde sea yo el que dirija claro solo yo podré tocarlas. — comentó entre la piel del chino.
—¿Eso no es una blasfemia?
—Tus piernas son un pecado, qué esperas, tu me estás haciendo pecar.
ZhouMi rió, empujó a Siwon y se puso encima de él, mordisqueándole los labios, el coreano intentando besarle, lo cual el chino no dejaba que lo hiciera.
Zhoumi se sentó a horcajadas en su regazo, pasando las manos por su pecho con lentitud. Siwon lo miraba desde abajo, recorriendo con sus ojos la anatomía del chino. Se relamió los labios.
—¿Te gusta lo que ves? — preguntó el chino en un tono muy coqueto.
—No me gusta; me encanta, me excita — dijo con la voz ronca por el deseo.
A ZhouMi se le erizó el vello. Se inclinó hacia delante y lo besó con pasión, colando su lengua, recorriendo la cavidad del coreano, el cual colocó sus manos en los muslos del chino, dando suaves apretones y caricias.
Zhoumi pasaba sus manos por los costados de Siwon mientras sus labios bajaban hasta su cuello, haciendo jadear al coreano. Mordió, lamió y succionó haciendo que Siwon terminara gimiendo.
—Vaya, te he hecho un chupetón… varios, en realidad — comentó sin darle importancia.
—Genial — dijo, sarcástico.
ZhouMi se reclinó de nuevo y lamió la oreja de Siwon, apretando entre sus dientes el lóbulo.
—¿No quieres que sepan que ya perteneces a alguien? — preguntó en chino. Siwon se estremeció.
—Ya lo saben — le puso una mano en la nuca y lo besó otra vez —. ¿Lo saben de ti? — ZhouMi sonrió de forma perversa.
—Creo que no.