Hola, me llamo Nayara, Nay para los amigos y tengo 16 años. Soy de Cádiz, Andalucía donde allí comienza mi historia.
Era 10 de Septiembre, y comenzaban las clases así que como todo día me dirigí hacia el colegio con mucha ilusión ya que volvería a ver a mis amigas otra vez. Al llegar, me dirigí hacia mi taquilla y allí estaba mi mejor amiga, Jessica, comenzamos a hablar de las vacaciones cuando un niño paso por al lado nuestra. No lo había visto en la vida, era rubio con unos preciosos ojos azules y alto, me miro y me sonrió, me sentí como la única niña de este mundo en ese momento, era algo mágico que sentía en mi estómago como mariposas revoloteando.
Me dirigí hacia Jessica y le dije:
- Jess, ¿Quien era ese? - le pregunte.
Ella se dirigió hacia mi y me dijo - Se llama Cristian, es nuevo en el colegio, acaba de llegar de Barcelona hace dos semanas y si, lose, es guapísimo.
- Ya te digo. - le respondí.
Estuve todo el día pensando en el, en que me había sonreído, en que puede que sienta algo por el a primera vista, pero me di cuenta de que eso era una tontería, no me puedo enamorar de alguien que solo vi una vez. Regrese a casa y como de costumbre hice los deberes y me fui a mi academia de baile. Por el camino iba mirando el WhatsApp cuando de repente choque con alguien
- Perdón, iba distraída. - dije toda colorada.
- No pasa nada, la culpa fue mía. - me contestaron.
Levanté la mirada y era ¡Cristian! Me quede paralizada por unos segundos y me dijo:
- Soy Cristian, ya me viste por la mañana.
- Si, yo soy Nayara, pero puedes llamarme Nay.
Me sonrió y me dijo.- Encantado de conocerte, bueno me voy que tengo que ir a fútbol , nos vemos mañana en el insti.
Estuve tod al clase de baile distraída pensando en el, no sabía que pensar, era guapísimo y eso hacia que cada vez pensar más en el. Puede que si exista el amor a primera vista, puede que si este enamorada de el.