Me mira molesto dejando a un lado la rebanada de pizza, sabia que no seria tan fácil convencerlo. Luego del trabajo la secretaria de mi jefe me recordó el trato que hicimos así que decidí invitar a Connor a dormir en mi casa una vez le dije el trato que hice con la secretaria cambio su cara.
- Charly esa mujer esta loca - dice Connor mirándome - no puedo creer que hayas hecho una cita y no me preguntaste.
- ya te expliqué Connor, necesito que me ayudes con esto.
- esa mujer esta loca - volvio a decir esta vez su tono era demandante, su ceño aun fruncido - no quiero salir con ella.
Esto era muy frustrante, siento hablar con un niño y mi paciencia esta disminuyendo. A mi mente aparece un bebe y hasta ahora me cuestiono si seré una madre paciente
- Connor he salvado tu culo cantidades de veces, necesito tu ayuda con esto - respondí de la manera mas calmada que pude - no me puedes abandonar ahora.
Se que sueno muy dramática e incluso puedo simplemente ignorar el trato que hice con esa secretaria no perderé nada además, el señor Anderson no le interesa los chisme y mucho menos de la boca de ella. Pero soy mujer de palabra y hice un trato con esa arpía; por otro lado no puedo dejar que Maximilian Anderson se entere eso le daría la razón al decir que no sirve para este trabajo.
- Dios mio esa mujer es peor que tener un virus - dijo tocándose el puente de la nariz - De acuerdo, lo haré pero necesito que me ayudes a mi con alguien mas
Arrugo mi frente al no entender, no sabia de que habla pero aun así espere a que me explique.
- pues veras, estoy con nuevo proyecto con una chica y necesito tan solo tres días sin nada de trabajo y dedicarme a ella todo esos días.
- necesitas que yo le avise a el señor Anderson - confirme y en respuesta asintió con la cabeza - decirle algo así a don responsabilidad es como ocasionar la tercera guerra mundial, ese no puedo hacerlo rodará mi cabeza
- vamos Charly eres la única que lo soporta y ya te inventará algo - dice volviendo a tomar su rebanada de pizza - el embarazo te hace bien... Ya tu jefe sabe la verdad ¿cierto?
Aun no le decía lo que paso, no puedo creer que hable así de una mujer y mucho menos de mi que he sido fiel y en algunas ocasiones he sido su niñera.
- no le he dicho nada - dije antes de servir un vaso de coca - cola - y no pienso decirle nada, accidentalmente escuche una conversación que el explicaba que un hijo de una mujer como yo no le agrada mucho la idea.
- era de esperar - responde con la boca llena de comida y su mirada atenta a esa rebanada de pizza - la familia Anderson son gente de mucho dinero y mezclarse con alguien inferior a su clase social es un insulto. Según me dijo Samanta la familia tampoco permite un hijo fuera del matrimonio.
- ¿hablas con Samanta? - pregunte tomando una rebanada de pizza dejando que el queso derretido estirarse
- claro, he querido acostarme con ella desde que la vi es la única mujer ademas de danielle que me ha dicho que no
- es una buena mujer aunque un poco entrometida
Me mira atento mientras se termina de comer su rebanada; siempre tenemos estos tiempos para nosotros. Siempre he contado con el cuando mas lo necesito.- Samanta sabe de tu embarazo - dice derrepente y como si estuviera sorda abro mis ojos asustada como platos esperando a que lo que acabo de escuchar fuera de mi imaginación - solo sospechaba el hecho que estas embarazada pero le confirme que era un hecho
- estas loco - frunci el ceño un poco molesta dejando a un lado la bebida - esa mujer es la mano derecha de mi jefe y su amiga, obviamente le dirá la verdad al señor Anderson
- ¿piensas que nunca se va a enterar? - pregunta sin dejar de comer otra rebanada de pizza - la barriga te crecerá y ya empezaron las nauseas y mareos. El señor Anderson notará tu embarazo y necesito que no te alteres ni estreses
Hablaba sin dejar de comer ya era su cuarta rebanada de pizza y yo sin darme de cuenta ta esta ya era mi quinta rebanada, quizás sea el embarazo que no puedo dejar de comer.
- Maldición esta pizza es deliciosa - comenta luego de morder otra rebanada, su boca esta sucia - lo que quiero decir es que no importa quien lo sepa tu embarazo se te notará tarde o temprano
En eso tiene razón en cualquier momento mi bebe empezara a crecer, el solo hecho de pensarlo me asusta pero algo muy dentro de mi lo espera con ansias.
- esperemos que el todopoderoso no se entere de la verdad, no solo te ganaras su odio sino tambien la familia Anderson. Se dice que no aceptan un niño bastardo como lo llamarían ellos.
- cuida tu palabras - respondo molesta por su palabra, no quiero que nadie trate asi a mi hijo y mucho me menos delante de mi.
- sabes que no pie so eso de mi sobrino, al contrario creo que la maternidad te esta haciendo bien... Solo mira esas caderas y tus amigas estan un poco mas crecidas
+++++++++++
- maldición Charly vamos tarde y tal parece que el semáforo no quiere cambiar
Faltan cuatro semáforo aun antes de llegar a la empresa, justo cuando el semáforo cambia de color el hombre a mi lado empieza a sonar el claxon al auto de al frente. Maldiciendo un par de veces el auto avanza y con eso Connor también lo hace, pasamos los semáforo rápido teniendo en cuenta que mi amigo parece un desquiciado manejando. Una vez aparcado en el estacionamiento subimos en el ascensor y marcamos cada uno su piso. Llevamos 15 minutos tarde y eso es un peligro, no puedo dejar de maldecir y echarle la culpa al imbecil a mi lado; si el no me hubiera desvelado yo no estaría llegando tarde y además que por culpa de el no pude ni echarle comida a mi perro, me saco a la fuerza de mi casa. El hombre a mi lado mira el reloj y da un chasquido con su lengua, no puedo ni siquiera mirarlo con lastima no se la merece
Al fin las puertas se abren y para sorpresa de ambos nos encontramos con la persona que evitabamos a toda costa
- mierda - susurré por debajo evitando que se escuchara
ESTÁS LEYENDO
SECRETOS EN TACONES
RomanceCharlotte Humbolt una mujer responsable que ha salido sola adelante decide salir con sus amigas luego que encuentra a su prometido en su cama y con su hermanastra, sin pensar las consecuencia decide salirse de control. Lo que era una noche de chicas...