Al final, El amor siempre gana (Ragoney)

CAPÍTULO 12: Vuelta a casa

Holaa!!!
Aquí tenéis el capítulo 12 de la historia, tengo que decir que por la mitad más o menos hay una escena con un poco de susto pero tranquilxs que no pasa nada, solo os informo.

Gracias por seguir leyendo y apoyando la historia las personas que la leen.

El capítulo tiene alrededor de 6.6k palabras, espero que os guste dentro de lo que cabe.

Lxs quiero, nos leemos pronto😘

Me pueden dejar lo que quieran abajo ☺

Raoul llevaba ya tres meses viviendo con Ricky en ese nuevo lugar. Lo llevaba medianente bien. Había conocido a Alfred que también era un gran músico y congeniaron muy bien desde el principio. Raoul veía a Alfred un hombre muy risueño, tenía cara de hombre bueno, y lo era, lo ayudaba en todo lo que podía desde que se enteró de la situación en la que estaban.
De hecho, le propuso trabajar como actor pero para eso tenían que volver, ya que en el pueblo en el que estaban, no había las instalaciones y las cosas necesarias. Le dijo que le diera un tiempo que se lo iba a pensar.

Por las noches, era el peor momento para Raoul, Agoney seguía mandándole todas las noches un mensaje por lo que por mucho que intentaba olvidarlo, todas las noches lo tenía presente.

El mensaje siempre era el mismo o muy parecido, no faltaba el te quiero mucho, te amo, perdóname, lo estoy pasando fatal... hasta que una noche no recibió ninguno.
Raoul pensó que quizás por fin se había cansado e iba a dejarlo tranquilo porque había entendido que ya no quería nada con él pero sentía que algo pasaba. Raoul tuvo un presentimiento de que algo malo estaba pasando. Había tenido pesadillas raras noches atrás.

También le enviaban mensajes anónimos diciendo que Agoney había vuelto con su marido, que hacían las cosas que hacen las parejas normales, que incluso se acostaban, mensajes que a Raoul le dolían muchísimo pero bueno era normal, era su verdadero marido, al que Agoney había querido mucho y mucho tiempo antes que a él.
Los leía para martirizarse y luego los borraba. No sabía quién se los enviaba pero tampoco le importaba. Tampoco sabía si era verdad o mentira pero quiso creer que eran verdad.

Raoul todas las noches mientras dormía a su bebé pensaba en su situación con Agoney. Unas veces lloraba porque se acordaba de todo lo bueno que habían vivido juntos, de lo que se querían, otras veces pensaba en perdonarlo, porque para qué mentir lo seguía queriendo y tener un niño con él no ayudaba mucho a olvidarlo.
Sin embargo, otras veces pensaba en todo el daño que le había hecho, en cómo pudo haberle engañado así y dejar que llegaran a esa situación.
A veces ganaba el odio, el rencor, los reproches y otras veces ganaba lo mucho que lo amaba, que lo seguía amando y las ganas que le entraban de ir a buscarlo y hablar con él. Tenía demasiados sentimientos encontrados, una lucha interna constante.

Ricky lo ayudaba casi todas las noches teniendo una charla con él para ver cómo estaba y cómo lo llevaba.

Ricky había ido a hablar con Agoney unos días atrás. No le quiso contar la conversación pero lo que le contó, Raoul estaba de acuerdo, también era su amigo y eso era problema de ellos, aunque él sabía que Ricky siempre le iba a defender a él, se lo había demostrado ya muchas veces.

Conversación Ricky y Agoney

Ricky tocó la puerta de Agoney sin avisarle siquiera de que iba a verlo.

-¿Ricky? -le dijo cuando abrió la puerta-

Estaba sorprendido, no se esperaba esa visita precisamente.

-¿Podemos hablar?- preguntó serio mirándolo a los ojos-

-Si, claro, pasa. Supongo que no lo sabes pero Carlos regresó