Dia 1

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El viento soplaba de manera calmada esta mañana, los petaos de sakura se esparcían alrededor de el camino dando la vistosa señal que la primavera estaba de vuelta, mi hermana y yo mirábamos sorprendidos desde lo lejos lo grande que era el instituto Kimetsu No Yaiba ya que nosotros no estábamos acostumbrados aun a el ambiente de ciudad, nosotros veníamos de la zona rural de Japón vivíamos con nuestra madre y 4 hermanos más.

La vida era difícil ya que nuestros padres estaban separados, aunque no entiendo por qué mis padres estarían distanciados, pero eso no evitaba que nuestro padre estuviese a el tanto de nosotros, él nos ayudaba con comida, ropa y pagando el alquiler de la casa donde vivíamos. Desafortunadamente nuestra madre falleció hace medio año y nuestro padre nos acogió en su casa justo en la ciudad, aun no logramos adaptarnos lo suficiente ya que sin alguien en casa solo Nezuko y yo podemos hacernos responsables de los otros 4 pequeños mientras mi padre trabaja.
Este seria nuestro primer año de escuela en la ciudad Nezuko y yo estaríamos en el mismo instituto, pero yo en segundo año y mi hermana en primero aun no se como lidiaremos con este tipo de ambiente hay muchas personas en una escuela, en nuestro pueblo apenas y éramos unos 20 en 3 salones, me da mucho miedo y me pone la piel de gallina pero no debo acobardarme pues soy el hermano mayor y debo de poner el ejemplo a Nezuko de superar esta adversidad.

Después de darle muchas vueltas a toda la situación llegamos a la entrada del instituto Nezuko apretó mi mano en señal de nerviosismo.  –Tranquila Nezuko no tienes por que estar nerviosa o tener miedo, te prometo que si algo malo llega a pasar estaré ahí para cuidarte – le dije sonriendo a mi pequeña hermana, ella me correspondió con una noble y sincera sonrisa.
Ambos entramos a el colegio tomados de la mano mirando nuevamente anonadados el enorme jardín que este tenía de la puerta de entrada hasta el edificio eran cerca de 50 metros o mas sin contar la enorme fuente con forma de zorro que estaba justo en el centro del jardín.

–Ya no estamos en el campo. –  murmure débilmente mientras varios chicos entraban corriendo y haciendo gran alboroto en el jardín – Lo vez Nezuko hay muchas personas aquí y seguro podrás hacerte de muchos amigos – explique a mi pequeña hermana que estaba ahora miraba el lugar con un poco de emoción.

El timbre de entrada estaba sonando y Nezuko no soltaba mi mano que podría hacer yo ante esos ojos rosados y su mirada enternecedora.  – Vamos Nezuko debes entrar a clases prometo que en la hora de el almuerzo nos veremos de nuevo. – le dije acariciando su cabeza se que ella no estaba satisfecha de separarse de mi en un terreno desconocido, a mi también de alguna forma me preocupaba el no estar a su lado, pero en el fondo yo mismo se que Nezuko es fuerte y podrá adaptarse a esta nueva vida.

Busque el salón que me tocaba, según la documentación de ingreso debía estar en el salón “2-D” para alguien de nuevo ingreso como yo era algo completamente difícil así que solo tenía una opción preguntar a alguien más.

–Disculpe ¿usted sabe dónde se encuentra este salón? – le pregunte a un chico que por muy poco era más alto que yo, llevaba un pants y una chamarra azul, su peinado era bastante raro pues tenía cabello negro amarrado en una cola de caballo.

El chico me miro y me di cuenta que no era un chico mas de la escuela, era el profesor de Educación Física – ¡oh lo siento! – Exclamé apenado hice reverencia en señal de respeto y le mostré mi gafete señalándole el salón.

El me miro un poco indiferente después de leer mi gafete y tardando unos segundos en reaccionar miro su reloj y me dijo –¿Eres nuevo Tanjiro? ¿verdad? –
Le di como respuesta una sonrisa y una afirmación con la cabeza, sin mas charlas me hizo una señal de que lo siguiera y ambos caminamos por el pasillo del segundo piso del edificio, al caminar observaba desde las bardas el enorme campo de atletismo y Futbol que conformaban a dicha escuela.
–cielos el campo de futbol es tan grande como mi antigua escuela completa o tal vez más. – pensaba al mismo tiempo que caminaba a un lado de el profesor, de golpe de detuvo y toco la puerta

Kimetsu no Yaiba High School Donde viven las historias. Descúbrelo ahora