Te odio, odio todo de vos. Odio tu perfume, odio que seas como una enciclopedia. Odio que te hayas preocupado tanto por mi. Odio que me hayas cuidado. Odio la forma en la que me haces sentir. Odio que siempre aparezcas en mi mente, con cualquier cosa que digo o hago. Siempre estás ahí, en cada frase, cada movimiento, cada risa, llanto. Siempre estás. Odio que no pueda escuchar una canción sin relacionarla a vos. Odio que hables con tanto amor. Odio que seas tan caballero. Odio que seas tan lindo y tierno. Odio tu naricita colorada cada vez que te agarra una alergia. Odio la forma en la que te distraes y viajas a otro mundo al lado mío. Odio tu tacto. Odio como me podes. Odio tus malditas frases. Odio tus putos "jaja". Odio que siempre me quieras contar la historia del mundo y odio que me hagas querer escucharte hasta el fin de mis dias. Odio la manera en la que siempre estás parado, odio como me hablas. Odio tu risa vaga. Odio la posición en la que te sentas, porque abris tus piernas exagerdamente, ya que no entras porque son muy largas. Odio que cuando, ni siquiera te equivocas, te acerques a mi y susurras en mi oido una frase: "Vi, me perdonas?", tan tan cerca que siento que mi mundo se cae de a poco. Odio que sepas tanto. Odio como me corregis cuando digo algo mal. Odio como me sonrojo cada vez que estamos cerca y solos. Odio como siempre querias sentarte conmigo ida y vuelta. Odio como pronunciabas mi nombre, como decís "Vi" en cada santa oración refiriendote a mi, odio que sepas como odio que me digan de otras formas. Odio que me conozcas al punto de descifrarme y describirme cada vez que estoy enojada, o triste. Odio tu boca, tus cejas, tu voz. Odio tu maldita sonrisita compradora. Odio como siempre querias responder cuestionarios acerca de mis gustos. Odio la forma en la que siempre estás preocupado por todos. Odio tu inseguridad, odio como ocultas todo y a la vez sos totalmente legible. Odio.
Odio como cambiaste. Odio como me ignoraste. Odio como me tratas. Odio que no me hables. Que no te preocupes por mí. Odio que ya no intentaste, odio que por miedo a quedarte solo te acercaste a alguien, y ese alguien no fui yo. Odio, odio como te dejaste. Como la elegiste. Odio que no me mandes mensajes, que me ignores por completo, que me mires mal. Que me lastimes y pidas perdón cuando no te ven. Odio. Te odio. Pero lo que más odio de vos, es que me es imposible odiarte. Odio que no te odio, ni siquiera un poco. Odio, odio odiarme por no poder odiarte. Aún cuando peor me tratas, y no porque quieras hacerlo. Odio como no te la jugaste. Como no te importe lo suficiente. Odio como me hiciste sentir.