La vida de Veronika 2C

La vida de Veronika

          Veronika era una joven de último año de preparatoria. Ella estaba aburrida y cansada del curso que estaba teniendo su vida. Todos sus días se trataban de constantes inseguridades y tristeza gracias al rechazo que ha sentido desde siempre, ya que a pesar de que es muy bonita, parecía que nadie la veía y Veronika solo pensaba que era insuficiente para las demás personas.

          Desde muy pequeña comenzó a sentir inseguridad de ella misma y tener una baja autoestima por culpa de sus padres, ya que eran muy estrictos con ella, eran muy cerrados de mente y solo pensaban en que su hija debería ser una chica perfecta y correcta aceptada por la sociedad, que debía sonreír siempre y tener un buen carácter, que debía aprender a ser el tipo de mujer que sería una esposa ideal y esto mayormente se debe a que su padre es muy machista.

          Al comienzo de su ultimo año de preparatoria sus padres tomaron la decisión de que ella debería empezar a construir su vida, su padre decía que debía prepararse y conseguirse un buen esposo el cual la pueda mantener y su madre le decía que ella puede tomar el camino de su vida a como ella quiera y que debe aprender a ser independiente y no tener a ningún hombre hasta que encuentre al ideal, obviamente esto se lo dijo lejos de su padre. Ella optó por escuchar a su madre porque no era muy fan de estar por debajo de un hombre machista.

          Veronika decidió irse de casa porque ya no aguantaba el carácter de su padre, sin embargo, aún no sabía a donde irse, sólo sabía que debía salir de casa y no se preocupó por lo demás. Ella tomo algunas cosas de su casa y se las llevó consigo misma en una maleta que tenía guardada en su habitación. La llenó y salió de casa, ahí inició el transcurso de su ida de casa.

           Camino a pedir ayuda a algún conocido o encontrar un departamento, conoció a una chica que pertenecía a un convento de monjas, a la del convento le llamo la atención la actitud de Veronika que se encontraba en un estado de "tristeza en su aura "por lo que le hablo y casualmente estaban buscando a alguien que ocupe el lugar de ahí y entonces le sugiere albergarse ahí con la condición de seguir las creencias religiosas y ella acepta porque no tenía otra opción si no encontraba otro lugar donde vivir pronto.

           Llegando al convento, le presentan a las otras monjas, le dan un tour por todo el lugar y le entregan la habitación en la que estaría viviendo. Al ir conociendo el lugar sentía que no era lo indicado para ella ya que tenía otra forma de pensar, y no era muy congruente tener pensamientos suicidas y destructivos en un lugar que debía ser puro y honorable, lleno de buenos pensamientos.

           Luego de irse de casa y encontrar el convento sintió una carga enorme de las responsabilidades que le esperaban siendo aún menor de edad y sabiendo que no podría mantenerse muy bien estando sola. Sabía y era consiente que debía terminar la preparatoria y no podía recurrir a sus padres, sin embargo, su madre extrañaba la ausencia de su hija y en determinado tiempo le mandaba dinero ya que sólo su madre sabía dónde se encontraba y se interesaba por ella.

         Continuó su preparatoria a pesar de que era difícil, ya que era maltratada y burlada por sus compañeros, era ignorada hasta por los maestros y eso le afectó en gran medida y sumándole que ya nadie estaba para apoyarla y cuidarla.

          Posteriormente, consiguió trabajo como camarera en un restaurante; después de un tiempo se siente mal, siente estrés y un cansancio enorme tanto físico como mental y se entera que tiene depresión grave y comienza a tratarla a base de medicamentos los cuales eran diarios y un poco costosos para el dinero que apenas tenía.

          Al parecer su vida iba de mal en peor y no encontraba el motivo para seguir adelante por lo que deja de consumir sus pastillas y poco a poco se iba " debilitando". La razón por la que dejó de consumir sus pastillas era porque el dinero era insuficiente, gasta mucho en ellas y no le había alcanzado ni para comer bien más, sin embargo, sabía que no debía ir con sus padres a contarle lo que tenía y debía recurrir al convento.

          Así pasaron las semanas intentando poder seguir adelante con toda la responsabilidad que estaba cargando. Un día al salir del trabajo ya muy tarde, ella se encaminaba a su casa, pero de repente 5 muchachos aparecieron por su camino y la estaban siguiendo. Para su mala suerte llegaron a un callejón vacío y la acorralaron ahí, le quitaron todo su dinero pues ese mismo día ella había cobrado, después comenzaron a desvestirla y a decirle cosas muy obscenas y la violaron y la dejaron ahí tirada como una basura.

         Ellos se fueron y Veronika se desmayó, al día siguiente los señores que recogían basura la encontraron, llamaron a las autoridades y la llevaron al hospital. Y ya estando en el hospital le notificaron que sufrió un gran abuso y que parte de sus genitales se vieron muy dañados.

          Los doctores le hicieron estudios y descubrieron que se había contagiado de una enfermermedad de transmisión sexual, ella se recuperó hasta que pudo salir del hospital. Se fue al convento y se encerró en su cuarto por días sin comer, ella sentía aún el dolor correr por sus piernas, sentía un dolor en el alma que nadie podía reparar.

          Pasaron las semanas y ella seguía en una constante depresión que no le daban ganas de nada, se sentía más decaída al enterrarse de su nueva enfermedad y de que ella tenía que cargar con eso sin ser culpable de nada, Veronika se sentía tan culpable de ser mujer que solo pensaba en el suicidio.

           Llegó un día en el que se dio cuenta que estaba embarazada, se realizó una prueba de embarazo y de esa forma se dio cuenta, ella lloró mucho por varias noches, porque estaba sufriendo mucho sola y sabía que si les decía a las monjas del convento la echarían de ahí. Tampoco fue con sus padres, ni cuando supo de la enfermedad y tampoco cuando la violaron.

          Tomó la decisión de abortar clandestinamente y así lo hizo, pero solo recibió más daño interno. Estuvo en el hospital internada por más tiempo, debido a todo lo que estaba sufriendo, sus enfermedades desarrollaron y todo se le junto en un abrir y cerrar ojos.

          Los doctores sabían que no duraría tanto estando así y querían hablar a sus padres de Veronika pero ella no quería y fue hasta después cuando estaba tan mal que quería ver a sus padres por última vez.

           Veronika ya estaba decidida de que ese día iba a morir, ella lo sabía y tenía que hacerlo para dejar de sufrir. Pasó tantas cosas en su vida en tan poco tiempo su vida se iba en un abrir y cerrar de ojos. Todo iba tan lento, como en cámara lenta. Ella se encontraba en la camilla con los ojos llorosos y tristes esperando la llegada de sus padres. Esperaba poder decirles que a pesar de todo los amaba, pero pasó tan rápido, sentía tanta agonía de querer desaparecer, estaba ansiosa por dejar de sentir dolor

             No pudo esperar más, tomo un papel y una pluma y les escribió una carta expresando el dolor que le hicieron sentir, escribió que los ama a pesar de que sean los peores padres y salió a la luz todo lo que sufrió en la escuela. Terminó de escribir y esperaba pacientemente para fallecer; sabía que tardaría, por lo que casualmente frente a su camilla se encontraban utensilios de cirugía y agarro un bisturí muy filoso, cerró las ventanas de su habitación y decidida, cortó sus muñecas, haciendo cortadas profundas y rectas.

             A los minutos se desmayó, se desvaneció y por fin dejaría de sentir dolor. Los padres y doctores llegaron al último latido de su corazón y para ese momento fue demasiado tarde para poder salvarla pues ya había muerto, ya no sentía ni respiraba.

             Y al fin la vida de Veronika había terminado.