El tren de las cinco

Tren

Personajes: Uchiha Sasuke (22), Uzumaki Naruto (22); Nara Shikamaru (23)

Advertencia: AU.

Disclaimer: Naruto y sus personajes son propiedad de Masaki Kishimoto, la historia es mía y la publico sin ánimos de lucro.

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Naruto ¿Estas bien?

Él no respondió, simplemente se quedó hipnotizado en la plataforma del tren. El tiempo se detuvo tan solo para él y es que en los últimos días el joven rubio se perdía en sus propios pensamientos. Pero esta vez era distinto, todo tenía una explicación, una razón por la cual Uzumaki Naruto se había quedado hipnotizado en ese momento, y esa razón tenía unos cabellos con ojos negros, piel pálida y su apellido era Uchiha.

Naruto es un joven de veintidós años, estudiante de dibujo artístico en el Conservatorio de Arte que se encuentra ubicado en el centro de la ciudad, su pasión siempre ha sido el retratar a las personas que transmiten sentimientos, para él es muy fácil identificarlas, como si solo con verlas pudiera sentir el aura que desprendían.

Naruto es bueno en lo que hace y muchos de sus compañeros apreciaban su arte y lo que representaba. Su rutina de todos los días para ir al conservatorio fue la misma, ya casi se cumplían cinco años en los cuales subía y bajaba del tren.

Pero él odiaba el tren, de todo el día, los treinta minutos que pasaba encerrado en esa "chatarra" era un infierno, lo aborrecía, lo odiaba, lo hacía sentir atrapado, lo hacía sentir solo... Porque mientras todos entraban en grupos de dos o más personas, él se quedaba solo.

"A veces uno no se da cuenta de lo que tiene alrededor por prestarle atención a otras cosas"

Era la última frase que leyó Naruto del libro que tenía entre sus manos, lo había cerrado porque el tren estaba deteniéndose para que todos pudieran abordar. Maldijo en su mente una vez más y subió al vagón, pero no pudo dar un paso más, su respiración fue deteniendo junto con toda su mente y es que en unos de los asientos que estaban al frente de él se encontraba un joven, de unos veintiuno o veintidós años, era de piel pálida como la nieve que caía ese mismo día, con un cabello negro como una noche sin luna y estrellas.

Pudo seguir admirándolo todo el tiempo del mundo, pero fue despertado de su fantasía por un señor que le pidió moverse de la puerta, sonrojado y con la atención puesta en él, se quitó y se sentó rápidamente en el asiento que estaba frente al chico e inmediatamente saco su block de dibujo y su lápiz favorito y empezó a retratarlo.

Su retrato fue detenido al escuchar que llego a su parada, aun no lo terminaba estaba apenas en el 25% de su creación, así que decidió que al siguiente día cuando lo vea lo seguiría completando. Y el resto del día solo eso tenía en la cabeza, deseaba que él tiempo pasará más rápido para volver a subirse en aquel tren y encontrarlo.

– Creo que estoy enloqueciendo – se dijo asimismo antes de ir a descansar.

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Volvió a tomar aquel tren y volvió a ver al joven misterioso, a la misma hora, en el mismo vagón y en el mismo asiento, Naruto siguió el retrato donde se había quedado, hacia los detalles de los labios con tanta precisión, con tanta perfección, jamás se había demorado tanto con un retrato, pero quería que salga lo mejor posible.