Boda equivocada [YoonMin]

El dragón y el lobo blanco.

—¡¿Tú y Joonhyuck son hermanos?!—preguntaron todos (menos Yoongi) sorprendidos mientras momentáneamente reparaban en el parecido que ambos tenían.

—Sí, bueno, mi madre siempre tuvo una loca historia en su cabeza sobre el destino y decía que los antiguos humanos creían en esa profecía y esperaban vivir para poder verla cumplirse. No lo lograron y resulta que hace veinticinco años tuvo una visión del futuro y supo que la llegada de aquel gran rey del que tanto hablaban estaba cerca... al menos eso fue lo que me dijo.—seokjin se encogió de hombros mientras comía un pedazo del pan que había llevado consigo— Ahí fue cuando comenzó su plan, primero fue por mi padre... años después fue por el padre de Yoongi para concebir a Joonhyuck.

—¿No habían dicho que esa mujer huyó poco después de que Joonhyuck naciera?—cuestionó Jimin confundido.

—Sí, lo hizo, pero su linaje tiene el don de aparecer en los sueños de su misma raza y pueden hablar con ellos, así fue como Joonhyuck y yo nos conocimos por primera vez, después nos reunimos cuando el cumplió los ocho años.

—Todo está fríamente calculado—continuó Eunwoo apoyándose en Hatkog sin darle importancia al pequeño gruñido que emitió la criatura—. Desde que Hoseok recurriera a Yoongi por ayuda hasta la noche en la que Namjoon y Jungkook se conocieron. La bruja tenía razón, es una profecía.

—"Dos almas perdidas en la soledad y dolor comenzaron a brillar como nunca antes en el momento en que compartieron una sonrisa"—leyó Moonbin observando a Namjoon y Jungkook cuando terminó aquel párrafo de las viejas y arrugadas páginas de aquel libro que el cuartel les había proporcionado.

—"Cuando el dragón y el lobo blanco se conozcan, será el inicio de un nuevo mundo"—agregó Eunwoo observando a Jimin y a Yoongi, quienes se miraron mutuamente a la vez que entrelazaban sus dedos—. Por si no lo habían notado, habla de ustedes—les hizo saber sonriente para después de unos segundos, fruncir el entrecejo—, pero hay una frase que me preocupa... "el descenso de un alma llegará y depende de ella evitarlo" no sabemos a quien se refiere, pero protegeremos a todos. Por primera vez romperemos el código de Zegwö y no sólo protegernos a la realeza.

[...]

—Hyung...—llamó Jimin bajito para no llamar la atención de los demás.

—Uhm...—Yoongi giró su cabeza en dirección a Jimin y sonrió en cuanto sus ojos se conectaron—. ¿Qué necesita mi hermoso novio?

Jimin giró su cabeza en otra dirección cubriendo sus mejillas —que bien sabía estaban rojas— con sus manos. Jimin no podía dejar de sonreír y eso alegraba al príncipe de ojos bonitos. Yoongi lo ponía mal, en el buen sentido.

—Yoonie hyung—murmuró apenado aún sin mirarlo, el mayor soltó una risa cargada de ternura y se paró frente a Jimin para quitar de sus mejillas las pequeñas manos del príncipe de Arbogs.

—Jiminie—ahora las manos de Yoongi eran las que estaban sobre las mejillas del rubio, creando pequeños círculos invisibles con sus pulgares.— ¿Qué pasa?

—Quería saber... ¿A dónde iremos cuando todo esto acabe?

—A una bonita casa junto a la costa, hay muchas cosas que podríamos hacer juntos; como ver el atardecer juntos, practicar nuestros movimientos, yo podría escucharte cantar con el sonido de las olas de fondo o simplemente podríamos sentarnos en la arena y disfrutar de la compañía del otro... incluso podríamos llevar a los chicos.

—Eso suena muy bonito—pronunció Jimin con sus bonitos ojos emitiendo ese brillo de emoción que Yoongi tanto adoraba.—Los chicos estarán muy felices de saber que le agradan, hyung.