❥Emma's prov.
La visita fue bastante divertida, pero había llegado a su fin. Realmente había pasado la gran mayoría del tiempo jugando a "las traes" aunque Norman aprovechó para darme unas cuantas clases de inglés, diciendo que en dicho idioma era "tag" o era "¿tag you're it?" realmente ya no soy capaz de recordarlo bien. Todos se preparaban para volver a la escuela y a sus casas después. Comencé a ayudar a subir el equipaje; bueno, solo las mochilas de los alumnos.
-¡Bien muchachos, todos al bus, es hora de volver!-
Se escuchó un "hooo" o "buu" de parte de los chicos; por mi parte, simplemente me mantenía callada y tranquila. Estaba ansiosa de volver a casa, estaba cansada, sin embargo, fue tan divertido que quería seguir allí, deseaba continuar saltando y jugando en un lugar tan espacioso. Quiero decir, nuestro hogar también tiene un patio bastante grande, pero no era lo mismo, el aire no era tan puro como aquí, al contrario, pues habían bastantes fábricas cerca y cosas por el estilo.
Muy aparte de todo eso, me sentía algo agitada, más que por correr, mi cabeza dolía regular y los ojos me ardían.
Subimos al autobus, y fuimos rumbo a casa; la gran mayoría de los alumnos se quedaron dorminos, excepto los mayores Yuugo, Lucas y yo. Habían dormido todo lo que fue estar en ese lugar, y por eso tenían energía para estar despiertos a la vuelta, no obstante, la razón por la que yo no tenía sueño era por el costante dolor en las partes laterales de mi cráneo, como si cables se encarnaran desde mi piel en ese lugar.Conseguí mantenerme tranquila, mas no logré librarme de las miradas maliciosas de los ojos de los otros dos. Estaba al lado de Violet, ella estaba profundamente dormida y no había razón para despertarla solo por mi temor. Aún así, sabía que lo que fuera que intentaran sería mal visto por los profesores ¿no? En un intento de relajarme aún más de lo que supuestamente ya estaba comencé a jugar con una cintilla que encontré en una de las casas de Goldy Pont, era verde olivo claro, con franjas amarillas y celestes. Estaba bastante bien cuidada para ser de más de 1000 años.
Enrollaba la cinta en mis dedos y luego la soltaba, haciendo que quedara rizada, la alisaba y lo repetía. Era entretenido, pero aún así no lograba calmarme del todo; pues podía sentir las miradas depredadoras.El bus seguía en movimiento, de algún modo me hacía sentir en paz casi al punto de quedar dormida, y volvía a despertar una y otra vez.
Fue entonces cuando una mano tocó mi hombro, era Ray.-No puedes mantenerte tranquila ¿verdad?-
-No-
Me tomó de la mano y me guió a su asiento junto a Norman, a este último lo movió con Violet. Ambos se encontraban dormidos, así que fue divertido verlos.
-Aquí-
Indicó con su dedo su hombro. No entendí a lo que se refería, sin embargo, con su mano, recostó mi cabeza allí.
Tan pronto como estaba algo más tranquila, comenzó a tararear; era una melodía dulce, en realidad se me hacía bastante conocida, era la que "Papá" le cantaba a Mamá siempre.-Hay un lugar donde estaré, y te esperaré...🎶-
No tardé en entrar en estado de relajación y entrecerrar mis hojos. Era cálido, su cuello era el cálido, bastante la verdad, era cómodo también, me sentía bastante a gusto, además, había cierto olor en él que contribuía a mi tranquilidad; como si fuese aroma a ¿margaritas? No podía identificarlo bien.
Tuve la impresión de que siguió tarareando, sin embargo, logré cerrar mis ojos por completo y al fin descansar.
Abrí los ojos cuando estabamos a unas 3 cuadras de llegar a la escuela. El resto de los alumnos se estaban despertando también.Fue extremadamente gracioso observar lo incómodos y sorprendidos que se veían Violet Y Norman, pues al ambos haberse quedado dormidos, uno había apoyado su cabeza en el hombro del otro, como Ray y yo, solo que ellos dos no tenían ningún tipo de relación, a penas y se conocian. Apenas nos dejaron bajar e ir a las respectivas aulas Norman comenzó a gritarle a Ray, mientras que este último se limitaba a sonreir de manera burlona.
Yo reía por igual, pero tapaba mi boca para que no se notara.
Anunciarían que nuestra movilidad había llegado minutos después. Fue cuando saliendo del salón yo la última como siempre, choque con alguien por segunda vez en el Día y con la misma persona.
No lo podía creer, dos veces seguidas, y con aquella persona que me hacía sentir nerviosa. Realmente no lo entendía, ¿Por qué pasaba eso? No lo conocía, era absurdo. Él me tendió la mano para ayudarme y la acepté, no obstante, vinieron a mi cabeza las palabras de Anna.
"—Él solo sigue las ordenes de los que te atormentan—"
No podía confiar.
—Disculpame, Es raro que esto nos vuelva a pasar. Soy Oliver Grand Valley, un gusto—
Dijo con una sonrisa. Ahora que lo observaba, era como una mezcla entre Norman y Ray, tenía esa expresión de estar despreocupado como el de negro y esa esencia de amabilidad del de blanco.
Me mantuve callada por unos segundos que se me hicieron infinitos. Cuando, de pronto, alguien más me tomo del brazo, más bien, de ambos. Fueron mis hermanos ya mencionados.
—Vamos Emm's, se nos hace tarde—
Dijo el azabache. Seguido por el albino, me llevaron a rastras hasta el otro bus para ir a casa.
❥Oliver's prov.
Se habían llevado a la chica, por más que les había tendido una trampa con Gillian sabiendo que a ella le gusta el mayor de los tres, ese Cíclope.
A fin de cuentas, fue como Yuugo y Lucas me habían dicho, esos dos la rondan como perros guardianes. Tenía que pensar otra manera de acorralarla y así, será toda nuestra.
El plan era básicamente enamorarla, pues sabía de una fuente confiable que ella gustaba de mi. Esos niños anormales deberían tener más cuidado con a quienes consideran sus hermanos. Era algo fácil, si lo que me dijeron era cierto, solo tenía Que ser yo mismo.
❥ ❥ ❥ ❥ ❥ ❥ ❥ ❥ ❥ ❥ ❥ ❥ ❥ ❥ ❥ ❥ ❥ ❥ ❥
Próximo capítulo:
"El topo en la ratonera"
❥Umita is gone for now.
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💞┇ʜᴏᴘᴇ ᴀɴᴅ ʟᴏᴠᴇ 🔹fαиfι¢🔹|ʙʏ: ᵘᵐⁱᵗᵃ
FanficEmma, una chica desafortunada que ha sido maltratada desde su niñez, ha sido encontrada y recogida por un par de niños que le darían la mejor vida del mundo en una nueva familia. Los Grace Fiel son esta familia con los padres del hogar Isabella y Le...