Ahora estoy en la tranquilidad de mi casa acostada en mi cama mirando hacia el techo intentando aclarar mi mente y analizando todo lo que ha pasado en mi vida últimamente; los mellizos, el reto de la psicóloga, el concierto en la playa, una persona que no puedo sacar de mis pensamientos y se ha alejado de mí, mi padre sugiriendo que no me acerque pero eso es demasiado difícil ¿por qué tengo que alejarme? no hemos hecho nada malo. Un sonido de notificación de mi teléfono me saca de mis pensamientos, me sorprende al ver que es Gabriel quien está escribiendo.
-¿Estas? -que forma tan peculiar de saludar-
-Al parecer si
-Me refiero a estar en tú casa
-Yo me refiero a lo mismo
-¿Quieres venir a mi casa? tengo una película nueva
-¿Por qué no vienes tú?
-Porque apoyo la equidad de género, la película es mía, quiero invitarte a mi casa ya que nunca lo he hecho y pues... quiero verte y no puedo salir... ¿vienes?
-¿Cómo es eso de que no puedes salir?
-Ven y te cuento ;)
-Ok
Ahora empieza el suplicio ¿y si está su familia? ¿si me tengo que encontrar con Alejandro? no quiero encontrarme con Alejandro, no, no, no ¿por qué acepte? aun puedo decir que no, agggg sería de muy mal gusto bueno yo también quiero verlo pero últimamente es extraño y me siento nerviosa cuando estoy con él. Salgo de mi cama, me pongo un suéter, agarro unas frituras y me lleno de valor -¡vamos Emma, no eres la primera chica que visita a un hombre en su casa! así que salgo de mi casa llena de valor y toco la puerta, mis manos tiemblan ¿quién irá a abrir? ¿será que conoceré a su madre? ¿y si es su padre?... al final es él quien abre la puerta con una gran sonrisa.
-Me alegra que vinieras -sonrió un poco más y sus ojos se hicieron más pequeños-
-Puesss... me gustan las películas y es nueva así que... pues me dije ¿por qué no?
-Pasa.
La casa de Gabriel es muy interesante, la arquitectura interna es bastante moderna como las casas de la ciudad, aunque es parecida a la estructura de mi casa, todo es bastante amplio y arreglado, hay adornos por todas partes ¿quién diría que en mi vecindario hay casas tan lujosas?
-¿Te gusta?
-Es muy bonita
-Mi madre la hizo remodelar antes de mudarnos aquí, todo esto que ves es su estilo.
-No conozco a tu madre pero debe ser una mujer muy elegante...
-Lo es -dijo mientras se dirigía a la cocina creo, igual lo seguí- ¿quieres algo de tomar?
-¿Tienes algo caliente? afuera hace frío -dije agarrándome los brazos como si me estuviera congelando, él sonrió y empezó a buscar algo en la alacena-
-Te prepararé el mejor chocolate que has probado en tu vida -sonreí y luego me senté en una de las bancas junto al mesón-
-Pues no requerirá de mucho esfuerzo, mi padre no sabe hacer chocolates y yo menos así que siempre tomamos instantáneos -dije encogiéndome de hombros- ¿quién te enseñó a hacer chocolate?
-Mí padre
-¿De verdad? creí que tu madre.
-Pues hay cosas que te enseña uno o el otro y así -debe ser bueno tener dos padres, pero aún tengo curiosidad por una cosa-

ESTÁS LEYENDO
Hasta que el amor termine
Teen FictionEmma es una joven con una vida aparentemente normal, que se dedica a sus estudios con devoción, de pocos casi ningún amigo, pero llegara alguien a su vida que descubrirá el secreto que esconde provocándole un sinfín de emociones.