>El Emperador Del Mal Y La Princesa Yasashi < {Freezer} (PAUSADA)

✅Capítulo 3

-Déjenme a solas con ella-Ordenó el emperador a lo que todos hicieron caso omiso a su orden.

Uzuri miraba a Frezzer con miedo, de verdad no podía creer que ese ser tan despiadado fuera quien ocupara su mente.

-Hace un año en el planeta Bijin no era consiente de tus habilidades.. Ahora lo entiendo perfectamente - Comento volteando a mirar su rostro.

-¿Por qué me dejo con vida aquella ocasión? - Cuestionó con seriedad, al recordar ese día.

-Es algo que debería olvidar, jamás he sentido compasión alguna por nadie, debe ser consciente de ello..-Comentó fríamente, con una sonrisa cínica, rodeando a Uzuri, inspeccionando cada parte de su ser.

~Perfecta~Pensó.

-Lo tengo comprobado perfectamente.. - Anunció Uzuri, rendida ante la idea de que fuera diferente.

-Es usted una mujer muy bella, princesa yasashi-comento freezer con esa voz dura, siempre escuchaba esas palabras.. Pero viniendo de él.. Lo hacia especial, además su sola presencia le provocaba escalofríos.

-Suplico me diga.. ¿Cual será mi labor aquí? - Pregunto Uzuri con seriedad mostrando firmeza.

-Por ahora solo seras mi acompañante, cuando sea necesario harás todo lo que yo diga, en caso de que desafie mis órdenes.. No tendré de otra alternativa que castigarla-Comento dando por evidente que si desobedecia, el planeta Shugo serían los que pagarían.

-Créame que no cuestionare ninguna orden suya.. Mientras este aquí-Comento con respeto.

-Eres muy comprensible, aunque me intriga.. Dice que mientras esté aquí.. Señorita quiero que quede claro, jamás la dejare-Anuncio, mientras con su cola, Alzaba el rostro de Uzuri para tener mejor visión de sus hermosos ojos.

Los segundos pasaron, tanto el uno como el otro, se miraron totalmente atraídos como dos imanes, como si su destino fuera estar juntos por siempre, el primero en reaccionar fue el emperador quien la soltó y camino hacia la gran ventana para mirar el oscuro espacio.

-Puede retirarse, Berriblu tiene indicaciones claras de donde será su habitacion, descansé por ahora-Hablo esta vez sin mirarla.

-Con su permiso.. mi señor-Respondió Uzuri siendo completamente respetuosa ante su ahora Emperador.

~Pasaban los días con tranquilidad, sus tareas eran triviales, una de ellas permanecer siempre a lado de Freezer, por lo que su habitación estaba su lado, otra servirle vino cada que él lo deseara, una cosa que ya se había hecho costumbre, era que Frezzer siempre tocara su cabellera con delicadeza, eso la traquilizaba siempre, aun que esto último era muy extraño, la confundía respecto a él.

Frezzer se encontraba en su máquina voladora mirando el espacio oscuro que era iluminado por la brillantes extrellas, eso lo hacía recordar, aquella vez en el planeta Shugou. Cuando Uzuri demostró su habilidad, sin duda alguna había sido una hermosa escena.

Él era el causante de atraer la muerte, y ella era la vida poseedora de revivir, dos almas completamente distintas.

-¿Que sucede señor frezzer? Últimamente se ve afligido-Pregunto Berriblu curiosa.

-No, pasa nada-Respondió simplemente, sin dar más detalles al asunto-¿En donde está ella? - Pregunto mirando a su guarda.

-Me parece que esta desayunando en el comedor-Informó con la misma seriedad.

-Ya veo.. - Respondió simplemente, para bajarse de su maquina y caminar a la salida, mientras Berriblu sonreí con picardia, era evidente a donde iría.