ᵂʰᵃᵗ ᵃᵇᵒᵘᵗ ᵐᵉˀ 🌻Kookmin🌻 #2 saga Lost Love

[4: Yoυɴɢѕoo]

— No contestes.

— Soo, si no contesto se volverá loco y lo creo capaz de regresarse.– Desliza el dedo por la pantalla — ¿Cielo? Hola. Oh, uhm, no estamos en casa salimos a dar un paseo, no, no, todo está bien. ¿Con Soo? claro.

Me pasa el teléfono.

—¿Hola?

—Hola algodón,

—Hola papá.

—¿Cómo va todo?

—Bien, ya sabes, solo ha pasado un día.— Susurro algo avergonzado, pero se siente bien oír su voz.

—Lo sé pero es que, en un día pueden pasar muchas cosas. ¡Cállate Namjoon! ¡me entenderás cuando tengas hijos!

Me río. —Tienes suerte, no ha pasado nada.

—Claro... Debo colgar ya pero llámame cualquier cosa.

—Lo sé, adiós.

—Si.

La línea sigue activa y puedo escuchar su respiración.

—Papá ¿por qué no cuelgas?— Lo escucho reírse.

—Lo siento Soonie, no estoy acostumbrado a estar lejos de ti.

—Es raro ¿cierto? — Me río junto con él.

Sé que papá puede parecer algo hostigante, pero los dos siempre hemos sido muy unidos. Todo es muy gracioso porque solo ha pasado un día.

Luego de algunos chistes por fin cuelga.

—Uff, pensé que nunca colgaría.— Digo con el corazón palpitándome rápido.

—Tu padre va a descubrirnos.

—Abuela, no digas esas cosas – La miro con reproche y alza una ceja.— Lo sé.

El taxi se detiene.

Al mirar por la ventana me encuentro con el edificio gigante con el nombre de Gold Lotto en letras brillantes.

De pronto, todo mi cuerpo se congela en el asiento. La abuela está hablándome pero no puedo moverme, ni siquiera entiendo qué está diciendo.

Mi mano sujeta con fuerza la manija, solo debo tirar de ella, abrir la puerta y bajar, así de sencillo, así de aterrador.

—Soo, cariño ¿está todo bien? — La abuela abre la puerta por mi.

No contesto, realmente estoy tratando de no desmayarme, tengo frío pero puedo sentir el sudor bajar por mi nuca.

—Niño, tengo trabajo.— Dice el señor.

La vergüenza me inunda, a pesar de sentir las piernas débiles me arrastro fuera del auto. Ni siquiera el viento gélido logra bajar mi temperatura.

Siento a mi abuela a mi lado y como con su brazo me rodea los hombros, su rostro sigue pálido, así que puedo intuir que mi actitud solo la inquieta más.

—Tranquilo Youngsoo, todo va a estar bien cariño.

Comenzamos a caminar gracias a ella, empuja ligeramente mi cuerpo para dar cada paso. La puerta está más cerca a cada segundo, y el saber que él está allí dentro me acelera el corazón.

Respiro profundo cuando pasamos la entrada, por un momento me aferro al brazo de mi abuela, la detengo y me concentro en tranquilizar mi respiración.

Tengo miedo.