cap. 15 (maratón 4/4) final

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(Confederacion Argentina × Imperio Brazil)

- que haces acá? - dijo la Confederación.

En la oficina de la Confederación, que estaba rodeada de todas y flores, se encontraba su "enemigo" I.Brazil

Ambos Estaban en guerra por más territorio. Pero eso era fuera al lado de las armas de fuego y de cuerpo a cuerpo.

Dentro de aquella habitación eran mucho más que simples enemigos.

- sabes que si te ven te van a fusi... - fue callado por un beso del Imperio.

- no se tienen que enterar... - dijo con aires de lujuria.

La Confederación enarco una ceja mirando lo de la misma forma.

(...)

La Confederación se tapaba la boca para no dejar sonidos obsenos de su boca que querían salir por los atrevidos toque que le otorgaba aquel Imperio.

Odiaba ser tan sensible ante aquellos toques del de habla portuguesa sobre su cuerpo.

- déjame escucharte - murmuró contra la piel de su abdomen, mientras sus manos acariciaban y bajando con lentitud la prenda inferior.

La Confederación lo miro con cierta rabia, pero, acató las órdenes dadas. Sacó la mano de su boca y colocó manos sobre los hombros del contrario haciendo precion, siendo más conciente de lo que conciente de lo que estaban por hacer.

- si se enteran de los que hacemos nos fusi...

- Nadie se va a enterar, Confederación, tranquilo. - dijo en un susurro, con una sonrisa lalida que adornaba su arrogante expresión - es muerto pequeño secreto.

La Confederación asintió, tratando de convencerce por las palabras de el Imperio.

Confiava que ningún soldado ni mucho menos sus superiores se encontrarán en aquel edificio para escucharlos. Para escuchar como Imperio había subido con brusquedad a la Confederación sobre su escritorio, tirando todas las cosas al suelo, no habían escuchado como Confederación gritaba amenazando a Imperio, y el silencio siguiente debido a un beso que tenía como objetivo callarlo.

Además, en épocas de guerra años después de la independencia, era todo más complicado. Confederación era uno de los enemigos en aquel momento, pero para Imperio, era sólo un juguete con el cual desesperarse.

Entre silencio de las paredes, eran amantes; entre el polvo de las armas, eran enemigos.

Corrían el riesgo de incluso ser fusilados si los descubrían, pero el portugués confiaba que no sería así.

Era su pequeño secreto, uno culposo y lujurioso, porque aquellos encuentros solo se basaban en ese sentimiento banal e impuro, placer. Un secreto que los convertiría en pecadores, pero en esos momentos de lujuria y pura pasión, era lo que menos les importaba.

Las prendas inferiores de encontraban en el suelo, Confederación se estremeció al sentir el frío chocar contra sus pieles. Imperio de levantó del suelo, agarró con fuerza los muslos del habla espana en cuanto lo tuvo en frente, agarrandolos con tanta brutalidad que Confederación soltó un quejido de dolor.

- me vas a dejar marcas Gil. - dijo regañando al Imperio mientras fruncia el entre cejo - no deberías.

- oh, claro, como que si alguien te viera aparte de mi. Acaso dejas que alguien más te toque como para que te preocupes por las marcas que te dejo?

- no... Pero

- puedes taparlas fácilmente, además, me gusta marcar lo que es mío.

Confederación gruño cuando Imperio metió, con poco cuidado, dos dedos en su parte baja y al mismo tiempo, mordia la zona de su cuello. Su respiración de aceleraba con cada movimiento que se producía en su interior con el objetivo de dilatarlo, a pesar de haber tenido varios encuentros, Confederación le había pedido que siempre lo preparara antes.

- B-Brazil... - jadeo, sosteniendoce fuerte de los hombros contrarios, cerrando sus ojos, dejan doce apresar por el placer.

Imperio a menudo, preferido que lo llamarán de la manera ya dicha, pero si nombre verdadero en boca de su amante Era lo que más disfrutaba de sus encuentros.

- mirate, ¿quien diría que Confederación Argentina, el hijo de España, forminable comandante y soldado fuera tan sumiso ante el enemigo? - río Imperio con burla, aún moviendo con brusqueridad los dedos en su interior los cuales, ahora eran tres.

- cállate - murmuró apenas en respuesta, aún jadeando por lo que ocurria en su entrada.

- eres tan lindo confederacion, desearía que seas mío para siempre.

Sólo eran palabras sueltas de una nación arrogante y malevola, ¿verdad? Palabras que se las llevaría en viento y no tenían importancia alguna, palabras dichas gracias al placer y excitación del momento.

Nada que tuviera importancia, ni para Confederación no para Imperio. Pero, aún asi, al pasar los años, se dieron cuenta que era mucho más que simple placer.

Brazil deseaba que Argentina volviese a ser suyo y, Argentina le perteneció siempre.

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Corto lo se... Pero es trabajo honesto
Además que se que es un poco tarde por que en realidad ayer tendría que haberlo hecho y entregado.
No tenía ni la menor idea de que hacer y la inspiración se me cortó con este último chiques... Sorry
Bueno me despido por que si pos
Se los quiere personitas del otro lado de la pantalla
Justy-chan fuera!

12/10/2019

Sos un boludo, pero MI boludo (BraArg) OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora