Alex era un chica bastante normal, o al menos a primera vista.
La mente de Alex era una de las cosas más difíciles de descifrar, la única persona que de verdad la conocía y sabía lo que pasaba por su cabeza era Arantxa, la mejor amiga y amor platónico de Alex.
Arantxa era una persona dulce, amable y muy hermosa, era la cara opuesta de Alex, Alex era de todo un poco, era amable y borde, dulce y creída, amorosa y borde,... y todo eso al mismo tiempo.
La escuela en la que acudían estas dos chicas no era muy diferente a las demás, como siempre están las personas amables y las que no lo son tanto. La que sería la "bully" en ese colegio era Amanda, la más odiada entre mucha gente, Amanda se pasaba el día molestando a Arantxa por su tono de piel ya que era de un marrón oscuro, aunque Amanda quería ser amiga de Alex esta se negaba rotundamente, a lo cual Amanda se molestó y empezo a molestar a Alex.