El irritante sonido de la alarma de mi celular me hizo despertar bruscamente, me senté en el borde de la cama, mire mi habitación, observé la pila de papeles que había en el escritorio, me puse de pie y me vino a la mente el recuerdo de sus manos envolviendo mi cuerpo, entro al baño y veo que estoy sonrojado, me quitó la camisa y como todos los días me digo a mi mismo que mi cuerpo no está tan mal, me doy una ducha, me coloco unos jeans y una camisa a cuadros, bajo a la cocina donde nadie recordó mi existencia, mis padres se acabaron las tostadas y no había café, la desilusión diaria de esperar ver a mi familia sentada en la mesa desayunando me impide prepararme algo para comer, así que solo tomo mi mochila y me voy a la secundaria.
Decidí caminar por la calle donde se encuentra su casa, quizás podríamos coincidir, pero al pasar por enfrente y ver la ventana desde donde me había arrojado la piedrita cerrada, pensé que tal vez ya habría salido, seguí caminando, me detuve en una panadería para comprarme algo para desayunar y aproveché el lugar y compre un par de bocadillos para regalarselos.
En el patio de la escuela estaban los muchachos reunidos, me acerque a ellos, los saludé y me excuse diciendo que debía entregar una tarea, comencé a rondar por todo el edificio buscándola, pero no la encontré, di un par de vueltas en el patio trasero y tampoco estaba allí, espere a la hora de clasesz tampoco entro a clases, me intrigaba su ausencia, pero decidí prestar atención a lo que el profesor estaba diciendo.
Así pasaron tres días, repetía la misma rutina esas tres mañanas, revisaba el edificio, inspeccionaba el patio trasero y luego esperaba verla en clase, entonces la mañana, del jueves decidí pasar por su casa y preguntar si todo estaba bien.
Me encontraba a solo un par de pasos de su puerta cuando escuché la voz de un hombre, supuse que era su padre y como no tenía razones para estar ahí corrí rápidamente a la calle fingiendo que solo estaba de paso, disimuladamente volví mi mirada y quién estaba saliendo era Joshua, si, su novio, un centenar de pensamientos me acribillaron, y otro millar más me masacro al verla salir un poco las atrás tomando su mano, ella miró hacia donde yo estaba, por lo visto no se percató de mi presencia, mejor así ... Baje mi cabeza y seguí andando, lo más rápido que pude para evitar que me alcanzarán, al llegar entre directamente al baño, Evelyn trato de saludarme pero ni siquiera la miré, me moje la cara, mire el espejo, por alguna razón brotaban lágrimas de mis ojos ...
¿ Pero qué te pasa Steve? ¿ Qué esperabas ?
¿Es su novio no ? ¿ Realmente pensaste que habías ganado un lugar especial ? - me torturaba a mi mismo, me separé del espejo, lance varios golpes a la pared, estaba frustrado, respire hondo , volví a lavarme la cara, me seque y volví a salir, me disculpé con Evelyn y los chicos, evadi sus preguntas acerca de porque había entrado así diciendo que venía con una "emergencia", al salir de clases, invite a los muchachos a comer algo, solo pudo venir Tom, el pequeño carrito de comida rápida que siempre frecuentamos se encuentra en la parte norte de la plaza que queda cerca de la secundaria, una vez que Tom y yo ordenamos nos sentamos en una banqueta, charlabamos sobre cosas triviales, hasta que la ví llegar y ordenar también en el carrito, cuando se dió la vuelta me miró, y comenzó a acercarse.Aparentemente venía sola, y se notaba un poco triste, aunque quise evitar preocuparme diciéndome que ella tenía quien se preocupara por ella, a medida que se acercaba mi voluntad se iba quebrando, hasta el punto en que respondí su saludo con un gran carisma .
Tom, quien desconocía lo sucedido, dijo que debía irse, sin dar más explicaciones se retiró, dejándome a solas con Coraline.
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Puedo Alcanzar Las Estrellas
RomanceEl, Steve un chico de 18 años, alguien calmado, apacible e indeciso conoce a Caroline Smith, una chica rebelde, carismática y aún más indecisa. A simple vista no hay nada entre ellos pero en el fondo se aman mutuamente ...sin atreverse a contárselo...