࿐𝐢𝐦𝐦𝐨𝐫𝐭𝐚𝐥s࿐ 𝐒𝐨𝐮𝐤𝐨𝐤𝐮/𝐒𝐡𝐢𝐧 𝐬𝐨𝐮𝐤𝐨𝐤𝐮 |𝐅𝐢𝐜𝐭𝐨𝐛𝐞𝐫2019

XIII. Ceniza

Las cenizas de un amor que nunca pudo ser posible, porque realmente nunca fueron el uno para el otro, realmente ninguno estaba listo para amar.

Simplemente fueron dos inadaptados que se aferraron al otro, creyendo que de esa forma, tal vez pudiesen conseguir cariño.

Chuuya confió en Dazai, Dazai confió en Chuuya, ambos creyeron que el otro les sacaría de la oscuridad de sus corazones.

Fue una lástima cuando se dieron cuenta de la realidad, que dos mafiosos no podían estar juntos, dos seres sumidos en la oscuridad nunca podrían ver la luz.

Así ambos decidieron dar por acabada una relación que nunca fue una como tal, y así, seguir por caminos separados.

Pero eso nunca evitó seguir encontrándose y ser obligados a trabajar juntos, a pesar de estar en organizaciones diferentes.

Tal vez, esa era la forma de la vida de mostrarles que aún quedaban cenizas de lo que alguna vez ambos construyeron.

-¡Desperdicio de vendajes! ¿¡me volviste a abandonar luego de usar corrupción!?

-¿cuál es el sentido de preguntar si después de todo, ya sabes la respuesta?

Ambos tenían una discusión por teléfono, pues, la noche anterior tuvieron una misión importante donde Chuuya debió usar corrupción, así mismo, cuando este despertó, se dio cuenta que no estaba en su cómoda cama, ni siquiera estaba en su casa, sino, que se encontraba en el lugar donde se concretó la misión.

-¿¡Acaso ni te importa que hubiese muerto!?

-No hubiese pasado, matamos a todos en el lugar, aparte, ¡agradece que te dejé en uno de los almacenes y no afuera para que te mueras de frío! ¡hasta una mantita y todo te puse!

Chuuya conocía muy bien a Dazai y por eso mismo le sacaba de quicio fácilmente, con sus constantes intentos de suicidio y su personalidad despreocupada que mostraba la mayoría del tiempo.

-¡Ojalá que en tu siguiente intento de suicidio de verdad te mueras!

-Oh, ¡Gracias Chuuya, nunca me habían dicho algo tan hermoso!

Si, Para Chuuya, Dazai era realmente un idiota.

Al día siguiente tendría otra misión con el desperdicio de vendajes, por lo que debía prepararse, mentalmente sobre todo.

Aunque igual le sacaba una sonrisa pensar que aún quedaban cenizas de esa relación que tuvieron hace años.