I.

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-"Cuando lo veo todo negro, me quedo en blanco" -


La ciudad estaba totalmente a oscuras, eran pasadas las nueve de la noche. Se encontraba en una esquina, pegado a la chapa de un auto, tenía su típica capucha puesta, unos pantalones negros y esas botas tan suyas. En la mano izquierda tenía un cigarrillo y la otra estaba tapada en su totalidad por la campera. Hacía bastante frío, a pesar de que estamos en primavera.. - esperame en la esquina, no hace falta que te indique, ya sabes dónde..- finalizó la llamada.

La voz del rizado pasaba una y otra vez por su mente, así como una cinta. Cuando le mando mensaje, nunca se le cruzó por la cabeza, la propuesta tan rápida que aquel le ofreció. Había pasado tiempo, mucho tiempo de la última noche. Y de los pequeños detalles no se olvidaba. El enojo ya no lo tenía, la ¿angustia?..tampoco. acepto sin darle tanta vuelta a la situación. Por eso se encontraba acá, en la esquina de su departamento, esperando que aquel pibe, de ojos verdes y esos rulos que son su mayor perdición, lo busquen.

Casa Gabriel.

Estaba muy nervioso. Hace mucho tiempo no lo ve en persona, tiene ganas de bajar corriendo e irse, pero sabe que lo puede hacer. Sabe que tiene que meter excusas y mentiras, cómo lo venía haciendo hace un tiempo. Pasa que recibió ese mensaje, y lo descolocó todo. Sintió que tenía que actuar, que no se podía quedar de brazos cruzados, que capaz la vida le estaba queriendo decir algo. ¿Porque apareció otra vez? ¿Porque el otra vez? ¿Porque Renato quiere volver a su vida? ¿Porque?. Y si te dejas de hacer preguntas y activas... en todo ese quilombo, que resultaba ser el castaño, no se le ocurrió mejor idea que invitarlo a salir o mínimo a verlo una vez más...

De repente la puerta se abrió.

-Gabi, que haces así vestido?- pregunto Antonella.
A gabriel le transpiraban las manos..- Pasa..- se tocaba los rulos- quedé con unos amigos, para cenar..- tartamudeo.
-Ahh.. los de siempre?- movió las manos.
-Sisi, es tranqui igual, asado y para tomar un poco, nada más..- trato de sonar lo más seguro posible.
-bueno, avísame que onda después, así no me preocupo, yo estoy con la panza no doy más..- terminó.
- Después te mando un wsp, cualquier cosita- finalizó.

Una ves que lo dejo totalmente en silencio, respiró y ahora sí, estaba listo.

Cuando se dió cuenta que la mujer, se quedó totalmente dormida, abrió la puerta de la entrada y pidió el ascensor. Estaba muy nervioso.

El ascensor llegó y apretó el 0, así iría directamente a planta baja.

A medida que iba bajando el ascensor se preguntaba cómo lo saludaría, con un ¿beso?, no muy directo se dijo así mismo, con un ¿abrazo?, menos muy intenso, con un ¿apretón de manos? las peores ideas se te ocurren Gabriel por dios.

5 piso.

Y si se fue? miró su celular y se fijó, no la última conversación le contesto.. "- estoy acá, te espero.." y fue cuando sintió un calorcito en el cuerpo. ¿Esto está pasando de verdad?..

4 piso.

Sin darse cuenta estaba sonriendo. ¿hace cuanto que no te reís así? Se preguntaba así mismo. Las manos le temblaban y se miraba todo el tiempo en los espejos del ascensor.

3 piso.

Inhalar... y soltar el aire. Se lo había enseñado el. Otra vez vuelve el morocho a sus pensamientos. Suelta una risita, se acomoda, en su lugar y vuelve mirar el teléfono.

2 piso.

"- ya venís gabs? tengo frío :(.."  sonreía y cuánto lo había extrañado.

1 piso.

" Un piso más y ya te veo :) " envío.
" <3 :) " recibido.

Planta baja.

El ascensor se abre y da un paso hacia adelante. No hay vuelta atrás.

máscaras || quallicchio.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora