4. N á u s e a s

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La clase de deportes era la que más detestaba, no solo porque odiaba la actividades físicas, también influía el hecho de que su profesor parecía haber tomado las cosas personales con él.

YoonGi suspiró mientras caminaba al gimnasio, junto a él Tae y JungKook hablaban de un nuevo videojuego que había salido hace poco.

Entraron al lugar y los ojos de YoonGi recorrieron el establecimiento, suspirando de alivio al no ver a su profesor, no le duró mucho.

Del otro lado varios jóvenes estiraban y YoonGi reconocería esa espalda en cualquier lado, de pronto no se sentía tan bien.

Cuando vio a JiMin girar hacia ellos se escondió tras JungKook con cautela, esperando no ser visto con las mejillas rojas, no pasó mucho para que su amor platónico se acercara y escuchara su voz.

—Me dijeron que compartiríamos esta clase con otro grupo, no sabía que serían ustedes.

Estaba por dar un paso lejos cuando JungKook y TaeHyung se inclinaron hacia su mayor.

Oh claro, ahora se les daba por ser respetuosos, YoonGi puso los ojos en blanco y su atención recayó en JiMin, su mayor sonreía con amabilidad.

Hizo una pequeña inclinación hacia él antes de hablar.

—Buenos días hyung —murmuró y quiso creer que la sonrisa de su mayor se había ampliado, era lindo imaginar.

¿Por qué? ¿Por qué tenía que compartir deportes con él? Haría el ridículo si el profesor venía de mal humor y lo usaba como conejillo de indias.

No sabía si fue escuchado o no, su profesor era unos cinco años mayor que él, recién graduado y con la suerte de haber conseguido trabajo en uno de los mejores institutos de Seúl.

Jeong JinWoon era joven, guapo y parecía tener buen humor fuera de sus clases, lo había visto una que otra vez risueño con la profesora de Historia.

Tragó duro cuando los ojos de su profesor se posaron en él, no sabía en qué momento todos ya habían formado filas y esperaban las indicaciones.

"Por favor, por favor, ya no le haré bromas a Kook, le enseñaré más a Tae, ayudaré a Hobi en la florería a pesar de ser alérgico, solo que no diga mi..."

—Min —YoonGi cerró los ojos mientras detenía su rurgo y daba una paso al frente.

"Gracias, espero que estés feliz de hacerme pasar por esto y que quede claro, no haré nada de lo que dije"

—Ve por las colchonetas.

Bien, él entendía que su profesor tenía un problema con él, pero no hay que ser un genio para ver que él apenas podía cargar sus libros y ahora lo mandaba por colchonetas pesadas.

—Min, ya he hablado.

El pelinegro caminó hacia las puertas de metal que estaban juntos a los escalones, buscó con la mirada las colchonetas, las encontró en lo más alto de los estantes. Mierda.

A lo lejos escuchó la voz de su profesor dando indicaciones, buscó algo donde subir para alcanzar el lugar de las colchonetas, al final encontró un taburete lo suficientemente alto para él.

Subió en este y la mano en su cintura hizo que diera un brinco y no fue tan hábil para reaccionar, lo siguiente que sabía era que tenía bajo él a Park JiMin.

Quiso llorar ante la cercanía, YoonGi nunca se cansaría de ver lo lindo que era JiMin, sus ojos marrones, su nariz, sus mejillas que provocaban tocarlas, sus labios gruesos que... No, no, no, no debía pensar en eso, ya empezaba a sentir el cosquilleo de las mariposas en su estómago y el nudo en la garganta.

Oh, no eran los nervios de tener a JiMin tan cerca.

Moriría después de inclinarse a otro lado y devolver todo su desayuno, solo sintió la mano del mayor acariciando su cabello.

¿Por qué ahora?

¿Por qué ahora?

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Jelou

¿Me extrañan? Yo sé que no :c

Espero que estén muy bien, cuídense mucho, coman bien, descansen bien, no descuiden sus estudios o trabajos.

Gracias por todo, los amo 💜

Park effects ﻬ [ j i m s u ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora