The big bang || Larry Stylinson.

The big bang.

Eran las 23.00 pm, en New York donde hacía guardia en un estacionamiento más bien era el encargado de ese lugar. Era 1 de Febrero, se cumplían 6 meses de la muerte de mi novio, Harry. El murió en un accidente frente el estacionamiento, cuando el venia a buscarme para ir a nuestro apartamento. 

Estaba dibujando, me encanta hacerlo, mientras tanto recordaba momentos con mi novio. En ese momento dibujaba el rostro de Harry, el era y es -ya que para mi sigue vivo- hermoso. Mientras lo hacía, escuchaba voces conocidas, eran susurros con una voz grave y profunda, recuerdos vinieron en mi mente de Harry y yo en la playa. Cuando veo pasar un auto que por adentro manejaba Harry, esperen ¿Harry?. Quede estático, no me podía mover, los recuerdos me venían a la mente otra vez nosotros dos en la playa, el tocando mi pierna hasta poner sus manos en mi cuello y a punto de besarme. 

Volví a la realidad en ese momento cuando ese mismo auto cruzaba la calle, mire por la ventana y vi lo mismo que vi hace 6 meses, el auto chocando contra la misma camioneta que estrello en su auto. Grite desesperado y corrí hacia el auto, me fije por dentro pero no había nadie, solo vidrios rotos, sin rastros de sangre.

Mire hacia arriba y lo vi a él corriendo hacia una dirección, no entendía lo que estaba pasando pero lo seguí. Por un momento lo perdí de vista, pero cuando doble a la siguiente calle vi que la puerta se movía y deduje que >>Harry<< había entrado allí. Lo vi subiendo las escaleras que había detrás de esa puerta, lo seguí y me encontré con una multitud de personas. 

Era como una terraza -no muy alta- al final del edificio. Entre en el medio de las personas y lo encontré a el cara a cara, me miraba con sus ojos verdes, que estaban vacios no me trasmitían nada como alguna vez lo hizo.

Me vino el recuerdo de la playa, caminando, tomado de la mano y nos tomábamos una foto. Al momento de cuando me besaba, desperte del trance y todavía seguía en la multitud pero Harry ya no estaba. Salí de allí y lo vi caminando hacia otra dirección, cada vez que el caminaba miraba hacia atrás como si se preocupara de que yo lo estuviera siguiendo. De un momento a otro ya estaba cruzando la calle de abajo.

Lo seguí otra vez corriendo y llegue a la estación de tren, saltaba cada valla que veía en mi camino, baje lo más rápido posible las escaleras eléctricas y seguí corriendo. Lo perdí de vista y me subí al tren, trataba de recapacitar todo lo que estaba pasando, mi respiración era agitada, pensé que era solo una alucinación. Vi hacia la ventana del tren y ahí estaba el, salí de allí y tomo mi mano. Toque su mano y estaba fría, no lo sentía junto a mí. 

Subimos por las escaleras eléctricas hacia las calles de New york -todavía con las manos entrelazadas- yo lo miraba, tenía el cabello despeinado y la piel pálida y fría. Seguimos caminando por las avenidas hasta que paramos al frente de un edificio que se me hacia conocido, el edificio donde vivíamos antes que me mude después de la muerte de Harry. Lo tome del cuello y lo bese, lo extrañaba tanto, sus labios no estaban cálidos ni suaves como siempre, estaban fríos y ásperos, no sentía el sabor que siempre transmitían. 

Los recuerdos vinieron otra vez, todos los de la playa, los del accidente, lo que paso hace instantes, la multitud de gente y yo persiguiéndolo. Mire hacia la calle y vi el mismo auto de hoy, de un momento a otro ya no estaba besando a Harry, me fije en el auto y ahí estaba el conduciéndolo. 

Pero al final de todo, me di cuenta que todavía seguía para fuera de la cabina del estacionamiento mirando al mismo vehículo de recién siendo chocado por la camioneta, al igual de como murió Harry. Me acerque rápido al auto y tampoco había nadie dentro. Me quede parado viendo hacia todos lados confundido, todo había sido una maldita alucinación, Harry seguía muerto y yo no quería aceptarlo.