PROBLEMAS

5.6K 322 8
                                    

Romina POV

Llegue a Las Encinas y mire a Guzmán esperándome en el pasillo para entrar a nuestras clases, cuando miro a Ander ir hacia el furioso

-¿Se puede saber de qué coño vas? –Grito mirando a Guzmán. –

-Tranquilo

-No sabes en el lio en el que me has metido –Lo empujo, a lo que Guzmán solo negó con la cabeza mirándome para que no me acercara a ellos. –

-Estoy preocupado por ti, eres mi amigo

-Vale, pues lo hablas conmigo. No vas y te chivas

-¿Pero qué sucede? ¿Por qué estás tan molesto Ander? –Tome su mano tratando de tranquilizarlo, apartándolo de Guzmán. –

-Sucede que tu novio, se chivo con mis padres diciéndoles que me drogaba –murmuro mirándolo. –

-Ya sabes como soy yo con las drogas, joder, con todo lo que paso con mi hermana

-Guzmán, por favor, supera ya –se acercó a él. – supera lo que paso a tu hermana y deja de joder a los demás con eso.

Sin más que decir Ander se fue, mire a Guzmán molesta por cómo fue a decirle a sus padres sobre que se drogaba

-Sabes que lo has metido en problemas, ¿no? –Pregunte cruzándome de brazos. – le has dado un montón de problemas con sus padres

-Ro, yo solo quería ayudarlo –Trato de tomarme de las manos a lo que yo solo me hice más atrás. –

-Podrías solo hablar con él, no ir con sus padres

-Vamos nena, no te enfades

-Es que no estoy enfadada Guzmán, estoy furiosa

Sin más que decir fui directo al salón dejando en la mitad del pasillo a Guzmán, al entrar salude a todos y tome asiento a un lado de Ander

-¿Estas muy molesto? –pregunte mirándolo. –

-Solo un poco, no me gusto que Guzmán se chivara con mis padres

-Lo sé, a veces puede ser un dolor de cabeza

-¿Tu estas molesta con él?

-Claro que sí, esto te trajo problemas con tus padres y los dos sabemos cómo puede llegar a ser tu padre

Sin más, vimos a Guzmán entrar a la clase, al verme sentada aun lado de Ander solo camino hasta su asiento y nos miró a los dos

-Perdona al pobre, ¿no ves cómo te mira? –Me dijo Ander mirando a Guzmán. –

-Lo merece –Dije sin más. – ¿en todo caso, recuerdas nuestro lema?

-¿Si nos embriagamos, nos cuidamos? –Comento confundido. –

-No, tonto –Reí ante sus ocurrencias. – Amigos antes que novios

La clase paso bastante lenta para mi gusto, al terminar la clase me apresure a salir para no tener que hablar con Guzmán, pero no contaba con que el me estaría esperando fuera del aula

-Necesitamos hablar Romina –Tomo mi mano mirándome suplicante. –

-Está bien

Me condujo hacia los jardines, tomando asiento en una pequeña banca que se encontraba cerca del lago, lejos de quienes pudieran escuchar

-Necesito que me perdones, cariño... no soporto que estés molesta conmigo

-Guzmán, a quien necesitas pedirle disculpas es a Ander –lo mire seria. – le has ocasionado problemas, sabes cómo son sus padres

-Lo sé, eso es lo que hare apenas lo vea... pero de quien necesito el perdón en este momento, es el tuyo –Tomo mis manos y comenzó a darles besos, seguido de eso, tomo mis mejillas y repartió besos por todo mi rostro, causando que comenzara a sonreír. – vamos nena, dime que me perdonas

-Mi perdón te costara una noche de pijamada y estoy hablando de películas románticas, mascarillas y dejaras que te haga un facial –señale sonriéndole. –

-Está bien, es un precio que estoy dispuesto a pagar


...

-¿Tu dirías que Guzmán es violento?

-¿Sospechan de Guzmán? –Pregunte mirándola. – Él no le haría nada a su hermana, ni a nadie

-¿Qué me dices de tu relación con él, Romina? –La mire sin comprender. – Muchos estudiantes aseguran que tenían peleas muy seguidas

-No eran peleas, a veces solo discutíamos, como toda pareja normal, no todo puede ser color rosa

...


Poco después de nuestra reconciliación, Guzmán sugirió que fuéramos a su casa para poder terminar nuestro proyecto, entramos y mire a Samuel junto a Marina

-Hola, ¿Qué tal? –Pregunto Guzmán mirándolos serio a los dos. –

-¿Qué tal? ¿Qué hacéis aquí? –Nos preguntó Marina, sentada aun lado de Samu, quien al verme solo me dedico una sonrisa. – ¿Cómo te has dejado convencer por este palurdo?

-Después de que me rogara todo el día, acepte venir con el

-Viene a hacer el trabajo

-Samu también

-Bueno, nos vamos, no queremos molestar –Me toma de la cintura para conducirme al jardín. –

Llegamos al jardín, junto a su piscina donde tomamos asiento, Guzmán se regresó por algunos aperitivos para comer algo mientras terminábamos la tarea

-¿Por qué estas siendo tan halagador? –pregunte mirándolo con una sonrisa. – En verdad cariño, no estoy molesta por lo de Ander

-Pero si puedo ser halagador con mi novia, no solo cuando está molesta conmigo, te mereces el cielo

-Yo no merezco nada de eso –murmure mirándolo. – tan solo, no me gusta tratar mal a las personas por su clase social, soy buena con quienes son buenos conmigo, trato de ser buena persona, así de simple

-Pero si tú eres la persona más buena del bueno –comento quitándose la camisa y caminando hacia el borde de la piscina. – todos te queremos mucho, cariño, yo por ejemplo, muchas veces he utilizado mi cuerpo y encanto para conseguir lo que quiero

-Y según usted señor Guzmán, ¿Qué ha conseguido con ese cuerpo y encanto?

-A ti –contesto mirándome con una sonrisa. – y mira que contigo me he ganado la lotería, por tener a la niña más linda del mundo... supongo que no tenía la confianza suficiente en que te podía gustar solo por lo que pensaba o sentía

Me levante de donde estaba y camine directo hacia él, al estar frente a Guzmán, coloque mis brazos en su cuello mirándolo, admirando su rostro, cada facción, peca, su bella sonrisa. Guzmán frente a todos podía ser una persona fuerte, imponente, pero el chico que tengo frente a mí, me mostraba su lado más humano, lleno de inseguridades, una faceta que solo me mostraba a mí.

-Quiero que tengas una cosa muy clara, Guzmán...eres una persona maravillosa, que adora a su hermana y la protege mucho, te preocupas por tus amigos, que aunque quieras mostrar a una persona dura, estas lleno de temores e inseguridades como todos –El tan solo me miraba, a lo que tome su rostro con mis manos y comencé a repartir besos por todo su rostro. – tú me gustaste desde que éramos tan solo unos niños

La tarde se pasó entre risas y besos, parecíamos dos niños pequeños queriendo divertirse un poco, este era el Guzmán que yo amaba, el que no se preocupaba por el que dirán los demás.

INEFABLE/ ELITEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora