SECRETOS EN TACONES

Capitulo 20

- solo fue una ayuda, además que había una situación de emergencia y no estaba en condiciones

Iba a decir algo mas pero la rubia llego con nuestra comida y luego de desear nos buen provecho se alejó, imagine a mi jefe como un hombre mas de vinos pero ahora solo hay dos vasos de jugo de mora. El plato se ve delicioso y huele aun mejor pero es hasta ahora que me doy cuenta del hambre que debe tener mi bebe.

- imaginé que fuera un hombre mas de vinos - dije al picar una rebanada y llevarla a mi boca

- lo soy, me encanta el vino y el champán pero estas embarazada y es de mala educación tomar vino solo cuando tienes compañía.

No me atreví a decir nada en absoluto pero por mi cabeza rondaba una pregunta que quizás sea imprudente hacerla así que decido tampoco preguntar nada, solo me dedico a comer en silencio sintiendo de vez en cuando la mirada de maximilian en mi. Paso una hora desde que estamos aquí y al terminar de comer mi jefe volvió a pedir mas jugo de mora, debo admitir que aquí la comida es deliciosa y el jugo de mora en encanto quizás pidió mas al ver que quería otra ronda.

- gracias por la comida - dije después de tomar el ultimo sorbo de mi jugo - la comida de aquí es deliciosa

- es uno de los mejores restaurante de California

De eso no tengo duda y tampoco tengo duda que esa comida costará mi sueldo pero para el todopoderoso no creo que sea un problema, miro la hora de mi reloj y ya quedan cinco minutos para volver a mi trabajo.

- ya es horas de volver a trabajar - dije mirando aun mi reloj. Levante la mirada y el hombre frente a mi sacaba una tarjeta negra de su billetera, si fuera otro tipo de restaurante yo pagaría la mitad pero es un restaurante muy costoso y la mirad de esa comida me cuesta mi sueldo completo.

- no te apresures - dijo entregando la tarjeta a la mesera quien con su mirada añoraba un poco de atención - una mala digestión te puede enfermar y al bebé así que solo relajate que yo te llevare

Mis oídos al parecer están fallando aun no puedo creer el cambio tan radical y no creo que sea agradecimiento, una persona no es tan atenta solo por agradecimiento. Normalmente mi jefe le importaría muy poco mi embarazo y mi bienestar, el cambio de horario y reducción de horas extras fue por políticas de la empresa y por la leyes que exige el gobierno pero si fuera por el me explotaría lo mas que pueda. No se ha conocido a el señor Anderson como un hombre solidario al contrario es un explotador de primera y el ser mas despreciables y hiriente que he conocido.

Quisiera decir que estoy alagada pero mas bien estoy extrañada por su comportamiento

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El camino hacia la empresa fue muy silencioso e incomodo, ninguno de los dos quiso decir una palabra y de vez en cuando mi jefe me miraba aprovechando los semáforos en rojos. Al llegar al edificio todos rápidamente se dirigieron a sus puestos y oficinas, le temen mucho a el todopoderoso.

- ¿ quedaste satisfecha? - preguntó de repente sacando a mi mente del pequeño trance, gire mi cabeza para mirar a quien se encuentra a mi lado parado.

Me encuentro en el elevador completamente embelesada con su perfume

- así es señor Anderson - respondí casi de inmediato, el asintió y volvió su mirada al frente - pero aun me intriga el motivo de esa comida porque no creo que fuera por agradecimiento.

- en parte lo fue... Pero en realidad necesitaba compañía, la reserva era para dos y mi hermano ni Samanta pudieron venir. No quería desperdiciar la reserva.