Él Ángel Caído

capítulo 9 💜

Jungkook saco de su bolsillo una bolsa plástica y echo un vistazo a su reloj preguntandoce que era lo que estaba llevando tanto tiempo. La puerta se abrió de un chirrido y una bola de pelo corrió directo hacia el

Yeontan salto de arriba y hacia abajo con una pequeña lengua rosadita colgando de su boca

—¡Anda! Con que ya te alegra de verme, o te alegra de ver esto —Agito la bolsa de un lado hacia otro con salchichas

Unos días atrás Yeontan veía a jungkook y le tiraba a morderlo

Yeontan ladeó —Shhh... —Jungkook camino hacia la esquina de la casa para comprobar si alguien le había oído ladrar

Durante las últimas semanas se las había arreglado para pasar desapercibido mientras vigilaba a Jimin, no le había resultado muy difícil. La mayor parte del tiempo la pasaba en casa de welita y cuando no estaba allí estaba en su departamento o en su trabajo, el único momento que no podía supervisarlo era cuando salía a darse una vuelta en su moto por la noche

Al principio era fácil seguirle el ritmo, Ya que cuando paseaba de noche le resultaba fácil volar sin ser visto y además, el nunca se alejaba mucho de allí, sin embargo ese día el tuvo que regresar por qué no podía salir demasiado lejos por si después no era capaz de volver por sí mismo. Maldecir al estar limitado a la distancia que podía volar. ¿Por qué se molestaron en darle un encargo y no darle uno de sus dones?

Jungkook le lanzó una salchicha a Yeontan, jimin se estaba volviendo temerario últimamente, había empezado a conducir la moto a mayor velocidad y a él le preocupaba que pudiera ocurrir un accidente, era como si el esperaba que le sucediera algo

Yeontan devoró la salchicha de un solo bocado y luego lo miro esperando que le diera más. Le lanzó otra y se sentó en la hierva a contemplarlo mientras comía

cuando terminó se acurrucó en su regazo — supongo que ahora somos amigos — yeontan le lambio los dedos como respuesta

Jungkook se rió entre dientes. Durante todo el tiempo que estuvo observando a jimin, llegó a la conclusión de que debería encontrar una manera de tener al perro tranquilo y no había mejor manera de ganar el corazón de una persona - o el de un perro -  que con comida, Rasco a Yeontan detrás de las orejas, algo que había visto hacer a Jimin cuando iba a visitar.

Tras una de sus salidas, jimin se sentó en el balcón y miro a la nada, yeontan se sentó con una mirada triste, como si pudiera sentir el dolor de Jimin. El perro le lambio los dedos cuidadosamente hasta que jimin quitó la mano para colocarla en su regazo

Yeontan levanto las orejas — ¿tu también lo oyes venir?,  Eh — Yeontan meneo el rabo — Está bien vuelve a dentro ya, sabes cómo se vuelve después de sus salidas — yeontan le ladeó como respuesta y salió corriendo a la parte delantera del jardín

Jungkook se asomo sigilosamente por la esquina de la pared para observar. Una melena rojiza se vio cuando Jimin se quitó el casco sus ojos parecían hinchados y tenía la nariz roja, las lágrimas le habían manchado las mejillas. Jungkook negó con la cabeza y deseó poder hacer algo para calmar su dolor

Es que la verdad no lograba entender por qué el le importaba tanto, le habían asignado una gran cantidad de encargos que tenía que luchar contra su dolor. Pero había algo en jimin que lo conmovía, era como un pájaro salvaje, lleno de vida y dolor, al que le habían cortado las alas y no podía volver a volar. El chico que vio por primera vez ya no está

—Eh, Yeontan —Dijo jimin con tristeza mientras se agachaba para acariciarle la cabeza

La puerta del porche se abrió de repente y Tae apareció descalzo —Ya era hora de que volvieras, ¿Dónde estabas? —

—no es asunto tuyo — sacó la llave del contacto y bajo de la moto

—Welita está preocupada por qué has salido a montar en esta cosa—

—Ella siempre está preocupada —

—Esta vez es diferente. Una amiga suya te vio hacer un par de días en la moto, dijo que ibas a ochenta, o talvez a noventa—

— ¿Y? — jimin se cruzó de brazos

Tae frunció el seño — Pues que welita no quiere levantarse una mañana y darse cuenta de que tú cuerpo está tirado en la mitad de la carretera y yo tampoco quiero —

— no te preocupes se conducirla —jimin se dirigió a la puerta pero Tae lo bloqueó

—Dame las llaves —dijo extendiendo la mano

—¿Perdona? —

—Dame. las. llaves.

—Que te den! No te voy a dar nada, aparta de mi camino —dijo jimin mientras trataba de pasar

Jungkook apretaba los puños mientras que Tae agarraba a Jimin por el brazo. Nunca había visto a Tae maltratar a Jimin. Ya fuera un familiar o no, Jungkook estaba listo para hacerle daño si lo hiriera de alguna manera

—Dejalo Tae no voy a darte mi moto — envolvio las llaves en su mano y la puso detrás de su espalda

Tae agarro su mano e intento abrirsela — voy a cogerlas te guste o no, no quiero que welita se vuelva a preocupar  por qué montas está cosa —

Yeontan corria en círculos ladrando, mientras que jimin intentaba alejar la mano de Tae

—me estás haciendo daño en la mano — jimin le golpeó en el brazo

Jungkook estaba apunto de arriesgarse e ir tras de el, cuando yeontan mordió el dedo gordo del pie de Tae

—Maldita sea Yeontan, basta ya! —

Jungkook se echó a reír al ver a Tae saltar a la pata coja mientras intentaba agarrarse el dedo herido. La verdad es que ese perro le estaba comenzando a caer bien

Jimin echo la cabeza hacia atrás riéndose — ¿Estás bien? —

—te parese que estoy bien?—se sentó en las escaleras de la casa a examinarse el dedo — creo que me ha mallugado la piel—

Jimin se sentó a su lado y examinó su dedo —Eres un bebé grande, apenas y podía hacerte con todo esos callos —

Tae dejó caer el pie en el piso y su semblante de volvió serio —Mira Jimin estoy totalmente deacuerdo con que salgas a darte una vuelta en la moto, soy quien la arreglo para ti, pero estoy preocupado por Welita—

Jimin suspiro —Lose, solo que....—trago— Es lo único que me mantiene en pie —

—Por favor Jimin —Tae lo miro con tristeza — Hazlo por welita, dale paz mental, solo por unos dias—

Jimin miro con tristeza a su moto y a continuación miro a Tae — De acuerdo —Dijo mientras dejaba caer las llaves en su regazo

—¿no vienes a dentro ?—Dijo Tae al ver que jimin se alejaba de la casa

—voy a casa...—Dijo mientras recorrió la moto con una mano mientras pasaba por su lado

—espera, te llevo

—No te molestes, cogeré el autobús —

Tae corrió hacia el y le puso una mano en su hombro —Oye, ¿no estás enojado conmigo, no?

—No, no estoy enojado... Es solo que quiero estar solo—

—solo será por un par de días y luego te regresaré tu moto—le explico— te lo prometo

Jungkook vio su mirada cuando se dió la vuelta y bajo la calle  hacia la parada del autobús. Vislumbró su rostro al pasar por debajo de una farola y se sintió abrumado por la inquietud. La mayoría de las veces, el se iba a dondequiera que se estaba alojando  cuando Jimin se acomodaba en casa, sin embargo está vez tenía la sensación de que debía estar cerca de su apartamento...solo por si acaso.