2 llamadas eran de mi madre y la restante de Andrea, para ver donde estaba, supongo.
Entré en WhatsApp.
La mayoría eran de grupos, menos 3, que eran de Jesús y Andrea diciendome que fuese a casa con Dani, que era tarde y que ibamos a cenar.
Abrí el que me quedaba.
Teresa.
"Como me olvidas, eh, desde que conociste a Dani es como que pasas de mi."
No sabía como tomarmelo. Es cierto que ya no hablabamos tanto como antes, ni quedabamos tanto ya que antes soliamos estar juntas todas las tardes, pero Dani no tiene la culpa y me ha dado la impresión de que se la hecha.
Decidí contestar.
"Dani no tiene nada que ver, nos podemos ver cuando tu quieras y no te he olvidado y mucho menos paso de ti, pero piensa lo que quieras."
Estaba metida en mis pensamientos cuando Dani los interrumpió.
+Eo, Dani llamando a Paula, existo.- Deslizó una mano por delante de mi cara, llamándome mientras reía.
Solté una carcajada.
-¿Qué pasa?
+Nada, te has quedado embobada.
-Estaba pensando.
+¿En qué si se puede saber?
-En Teresa.
+¿Qué pasa con ella?
-Que me ha hablado diciendome que desde que te conozco paso de ella.
Dani puso una cara rara, a lo que reí.
+Claro, si ahora será culpa mía.- Puso cara triste.
Ay que mono, le como.
Sin pensarmelo dos veces, le cojí la cara y le acaricié mientras él sonreia.
Nos ibamos acercando, mientras su respiración aceleró al igual que la mía.
Apenas a centímetros de mi boca , susurró "Te quiero".
No me pude contener más y nos fundimos en un largo beso.
Narra Jesús:
Seguía en la casa de Andrea.
En su habitación.
Tenía su cabeza echada sobre mi pecho, estaba casi dormida.
-Andrea.
+Mmmmmmmm.
-No me ignores.
+No te estoy ignorando, imbécil.
Sonreí.
-¿Quieres salir a dar una vuelta?
+Ay, que pereza.- Puso cara triste.-Mejor nos quedamos aquí, eh.
Solté una carcajada.
-Floja.
+Idiota.
-Idiota pero el más guapo.
+Creido.
-Me quieres.
+Mentira.
-Pues me voy.
+Te quiero.
Juntó sus labios con los mios.
Encajaban a la perfección, como dos piezas de puzle.
