Pájaros Muertos.

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Sin hacer ruido, Rubí perseguía el mapache sin que este se de cuenta. El mapache sabia que lo estaban persiguiendo, pero disimulaba para esperar el momento justo para correr.
Rubí agarro su mango envuelto en trapos e intento concentrarse para que su daga de rubí se genere a partir del mango. Ella tenia poca practica con invocar su arma, pero estaba convencida que sin ninguna distracción podría lograrlo.

El mapache preparo sus garras, dispuesto a defenderse. Rubí vio la oportunidad perfecta para atacar, pero de pronto, Jorge la sorprendió por detrás. Rubí exclamo sorpresa, distrayéndose y espantando al mapache.
 - ¿Que mierda te pasa? - Contesto Rubí empujando a Jorge.
- Tranquila, solo quería saludar. - Contestó Jorge, uno de los tres cerditos. - ¿Por que tanta agresividad chava? - 
- No vuelvas a aparecerte así, estaba cazando, no comemos hace tiempo con mi Abuela. - Le comentó Rubí poniéndose su Capucha roja. - De cualquier manera, ¿Que haces en el Bosque? 
- Pues nada, estoy por un "trabajito". - Contesto el mafioso. - Se supone que tengo un encuentro ahora mismo, no te recomendaría estar cerca, supongo que sabes que no es gente muy amigable. -
- Lo dices como si yo lo fuese - Ambos rieron.

- Jorge, hijo de cerda. - Lo llamó una voz que se acercaba por los arbustos. Rubí se escondió detrás de un árbol.
- Vamos, dame los materiales. -  Pidió Jorge, quien sonaba asustado y apurado.
 De pronto la figura alta y enmascarada de el elegante hombre apareció detrás del cerdo.
- No hay ningún apuro, ¿Cierto? - Le dijo el enmascarado agarrándole fuertemente el hombro.
 Moviendo los labios, Jorge le dijo a Rubí que corra, ella ni lo dudo. Una obscuridad surgió de la nada y un grito de Jorge se escucho a lo lejos mientras Rubí corría.

Rubí realmente se sentía asustada, pero no paro de correr hasta llegar a la pequeña cabaña en la que vivían ella y su abuela. Al llegar, su abuela estaba fumando en la mesa del comedor.

- Abuelita que ojos tan grandes tienes. - Dijo Rubí guardando su capucha en un perchero de madera que estaba al lado de la puerta.
- ¿Harás todos los días el mismo chiste? ¿Y la comida? - Preguntó ella parándose.
- No conseguí, estábamos a punto de cenar mapache cuando el idiota del cerdo mafioso se le ocurrió hacer un encuentro mafioso con vete tu a saber quien.
- Ah, un hijo de puta. Le hubieses avisado que ibas a cazar ahí. - Contesto ella burlándola
- Bueno, mañana saldré denuevo, si no consigo nada cenaremos cerdo. - Dijo Caperucita sentándose con los pies en cima de la mesa.
- Son chanchos. - Respondió la abuela nuevamente burlándose. - ¿En serio piensas que esperare hasta mañana? No me matara el lobo pero a lo mejor me mata el hambre.
- ¿Y por que no sales a cazar tu? - Burló Rubí.
- Prefiero esperar a que me mate el lobo. -
- El lobo es quien se encarga de matar a quienes matan, el sheriff. - 
- Pues que me mate y de paso se mete una bala en el cráneo el. - Dijo riendo. - Bueno, ve a robar unas manzanas. -
- ¿Que haga que? - Pregunto tragando saliva. - El lobo nos tiene en la mira, esta cabaña es robada, tu vendías droga hace nada y ahora quieres que robe. Esperaremos hasta mañana y cazare al mapache. -
- Ve al centro y roba unas manzanas, no insistiré mas, tengo hambre y se que tu también, debemos comer. - Exigió la abuela.
- La próxima sal tu, que a mi también me gustaría rascarme todo el día. - Dijo, agarrando su capucha y saliendo denuevo.

Rubí estaba con miedo de cruzarse a el enmascarado denuevo o de encontrar a Jorge muerto.
  Sin embargo ella se puso la Capucha y siguió adelante, con la misión de robar manzanas, ignorando completamente todo, con la normalidad que supone en el mundo que viven... Bueno, las muertes, mafias, asesinatos, eran comunes en ese pueblo devastado en el que vivían los personajes de cuentos, sin embargo lo que había visto Rubí era algo nuevo, pensando en esto comenzó a cantar de una manera calmada y suave para distraerse.

Rubí - Pájaros Muertos

El día se repite, es el de siempre
Sin preocupaciones, quizá robos y muertes
Un día normal, es siempre lo mismo
Lleno de pájaros muertos en el piso

Cuando salgo, siempre atenta
Quizá alguien me quiere matar
Quizá alguien que no aparenta
sed de sangre, gran maldad

Pero nada es sorprendente
es solo un día mas
nada me preocupa ya...
esta mierda es normal

El día se repite, es el de siempre
Sin preocupaciones, quizá robos y muertes
Un día normal, es siempre lo mismo
Lleno de pájaros muertos en el piso... 

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⏰ Last updated: Oct 23, 2019 ⏰

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RubíWhere stories live. Discover now