pensando en el ayer

inicio de la desgracia

Me llamo Alan y les contaré la historia de cómo quedé en coma pero déjenme contarles lo que ocurrió antes.
Una semana antes de todo, estaba planeado ir con unos amigos acampar al bosque, en ese entonces tenía 15 años, todo iba perfecto, pero hubo un inconveniente, un amigo se lastimó el brazo, por lo que ya no pudo ir.
En total éramos ocho, claro, seríamos nueve, pero como ya les dije, uno de ellos no pudo ir.
Todo iba perfecto, estábamos a punto de irnos, pero Ada no llegaba, ella es mi amiga, pero tenía un sentimiento fuerte por ella, claro, no me atreví a decirle nada de lo que sentía, siempre pensaba en ella.
No tardó mucho en llegar, la ayude a subir sus cosas, sólo llevaba una maleta pequeña y su mochila.
La pasamos genial, incluso estuve apuntó de decirle que me gustaba, pero fui muy cobarde, quien lo diría.
Cuando terminó el fin de semana, teníamos que regresar, claro, no quería que acabará todavía, yo estaba dispuesto a decirle a Ada que me gustaba.
Subimos todo al maletero, e íbamos de regreso, en el camino estaba pensando hasta que vi otro auto acercándose a gran velocidad hacia nosotros.
Desperté y salimos del auto, vi a Marck que estaba sacando a alguien, todos lo rodearon por lo cual no pude ver de quién se trataba, después de un corto tiempo Ada corrió junto a un árbol, estaba llorando, no sabía que hacer así que me acerque a ella, le dije que todo estaba bien, que quien haya sido, estaría bien.
La abrase.
-!No puede ser¡
Grité, mis brazos la traspasaron, me acerque a ver quién estaba en el suelo.
- Ese soy yo.
El que estaba en el suelo era yo, como era posible.
Me estaba mareando, todo se ponía borroso, escuchaba una sirena de fondo, cuando me desmayé.

Desperté en un hospital, pero no podía moverme, mucho menos abrir mis ojos, pero si algo podía hacer, era escuchar lo que estaba a mi alrededor.
Escuché a alguien, por lo que decía supuse que era el doctor.
Doctor- El tuvo un fuerte golpe en la cabeza, por lo que será difícil ya que él está en coma.
- No era posible, yo estaba ahí, los estaba escuchando.
Después dijo que tenía que quedarme en el hospital por un tiempo, por si despertaba, pero claro, lo veían imposible.
El segundo día fue algo extraño, vinieron mis padres a visitarme pero claro, mi madre vino a la fuerza ya que no llevaba una buena relación con ella, no tenía ninguna relación con ella.
Mi padre me abrazo y susurro unas palabras a mi oído.
- al final aremos un viaje a las estrellas.
Esa frase me la decía cuando estaba enfermo, la última vez que la dijo, yo tenía ocho años, claro, nunca le encontré sentido pero me hacía sentir bien.
Mi padre salió del cuarto y sentí como mi madre se acercó y dijo.
- ¡que te pudras en el infierno!
Esa maldita, solo está con mi padre por el dinero, ¿Como lo sabía? Pues la escuché decirlo mientras jugaba póker con sus amigas, claro, ellas no son distintas a mí maldita madre.
Se estaba acabando el día, lo sé por qué cada seis horas una enfermera viene a moverme de un lado a otro y esto por que el doctor dijo que se tenía que hacer para que la sangre de mi cuerpo circulará o algo parecido, ya era la tercera vez que me movía la enfermera y mientras lo hace, me plática un poco sobre su vida, es muy entretenida la verdad.

                          Tercer día
Todo esto está muy extraño, me empiezo a imaginar un poco el lugar y las personas que están aquí, es demasiado raro pero por lo menos siento que es divertido.
Esta vez llegó Ada, fue genial, nunca pensé que ella vendría, pero no fue muy gratificante ya que se sentó junto a mi y empezó a llorar, yo también quería llorar pero no podía, apesar de no moverme tenía que verme fuerte, entonces ella me abrazo y dijo.
- lo siento por no haberte dicho lo que siento por ti en el viaje, y ahora.
Ella me besó, se levantó y se fue.
- Si lo hubiera sabido antes de todo. Pensé, una parte de mi se sentía increíble y la otra sentía rabia por no poder hacer nada.

                Dos semanas después
Empiezo a perder la noción del tiempo, ya no se ni que hora sea, ni cuanto a pasado, pero llegó la enfermera, hizo su trabajo y me empezó a contar qué su novio la había engañado, eso no me importaba pero sonaba como si su novio fuera un hijo de puta, me dijo que apesar de todo lo amaba y pensaba perdonarlo, que mujer más tonta, pero bueno, mientras eso no pase a mayores pero bueno, solo me queda escuchar a las personas, por más aburrido que sea.

Al día siguiente sentí un fuerte dolor en el brazo, intenté hacer algo, pero nada, solo pude estar quiero, sintiendo ese dolor que con cada segundo que pasaba se hacía más agudo, entró el doctor y noto un cambio, dijo que estaba empeorando, el dolor se hacía cada vez más fuerte y se extendía por todo mi cuerpo, el doctor me mandó a urgencias ya que estaba muriendo, no recuerdo que fue lo que pasó después de eso.
-¿Que pasó?
Pensé, no sabía que había ocurrido pero el dolor desaparecio.

Pasaron dos meses después, llegaron mis padres, los doctores dijeron que estaba listo para ir a casa ya no despertaría y ellos tendrían que cuidar de mi hasta...hasta que despertara...o muriera.
Cuando llegamos a casa, mi padre me llevo hasta mi habitación, me recostó en mi cama.
- que descanses hijo.
Salió llorando del cuarto y mi madre ni siquiera entró, solo se quejo.
Después de un rato escuché que mis padres peleaban por asuntos financieros, ya estaba acostumbrado pero mi madre dijo.
- pues tú hijo solo nos está trayendo problemas, desde que el estúpido se accidentó solo hay más gastos de los que había antes, si se hubiese muerto ni tendríamos que preocuparnos.
Tal vez tuviera razón, pero creo que estaríamos aún mejor si ella no estuviera, no le deseo la muerte como ella a mi, solo que se fuera lejos de mi padre y de mi.