CAPÍTULO 16: El Rey

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–Creo que vamos a necesitar un taladro...– Refunfuñó Destrok, secando con la manga de su manchada sudadera, el aceitoso y cálido sudor que emanaba de su enrojecida frente. Transcurrían ya quince minutos desde que decidieron desentramar aquel suelo cubierto de viejo roble, y para su desafortunada sorpresa, descubrieron un enorme bloque de frío cemento, que amenazaba con impedir su ansiado objetivo. Louis, aún temeroso, se dirigió junto a Mack hacia la pequeña habitación del conserje, instalada en el piso superior, donde sabían, eran guardados por alguna emergencia, instrumentos de construcción, martillos, cinceles, combas y serruchos.

– ¿Qué crees que hallemos allá abajo? – Preguntó Regynia, sin dejar de mantener su guardia en la quebrada puerta, frente a los pequeños escalones de piedra y mármol.

–La respuesta a todo lo que ha ocurrido– Contestó el líder criptocazador, intentando en vano, perforar aquel suelo endurecido con una oxidada barreta de acero. El acero apenas rascaba la superficie, expeliendo un ligero polvillo blanquecino; aquello empezaba a impacientarlo y lo exaltaba en sobremanera. –Nadie sabía sobre ese vampiro– Continuó, deteniendo su cansina labor por unos segundos– Me extraña demasiado, llevamos aquí ¿más de cinco años? Y Murdock jamás lo mencionó; ni siquiera en sus tantos relatos sobre hombres lobo, sirenas, sectarios, e incluso me contó una vez sobre nigromantes que fornicaban con cadáveres por placer. – Destrok soltó una risotada– Pero jamás sobre este vampiro, y es lo que me extraña; quien sea que lo haya encerrado bajo esta isla, se aseguró de que nadie lo recordara, ni siquiera en leyendas locales... ¿Por qué? –.

–Quizás temían que alguna secta de cultistas intentara liberarlo, no lo sé– Regynia tomó asiento sobre los últimos escalones, y extrayendo un limpio pañuelo de su bolsillo izquierdo, comenzó a limpiar la sangre que cubría su escopeta– Se sincero, Destrok, ¿crees que podamos vencerlo? –.

–Tenemos mejores armas que en aquellos tiempos de oscurantismo...– Aseguró el cazador, empezando nuevamente a perforar el endurecido suelo.

–El vampiro se burló de nuestras armas– Regynia mordió su labio inferior– Además, desconocemos que tan poderoso puede llegar a ser... ¿Y qué es lo que realmente quiere? No es solo alimentarse, cazar y violar muchachas por deporte, contemplamos lo que cultiva allá abajo, está anidando, fabricando un ejército y Wigth es la perfecta zona cero. Aislados, sin poder pedir ayuda y con nula defensa militar...–.

–Lo lograremos– Aseveró Destrok al instante– Puedo asegurarlo querida, cortaremos la cabeza de ese hijo de perra y beberemos cerveza en su cráneo...–El cazador esbozó una ligera sonrisa. – Y si morimos, al menos hicimos todo lo posible por enfrentarlo –. El ruido de veloces pisadas se aproximó de pronto a la estancia, y Mack junto con Louis descendieron cargando las herramientas de demolición que lograron encontrar.

El ánimo envolvió nuevamente al pequeño grupo, y sin detenerse a descansar, los tres hombres sudorosos comenzaron a destrozar el bloque de concreto a punta de combazos. Los minutos transcurrían y el sólido suelo parecía ceder lentamente, cascajos de piedra y cemento emergían separándose del bloque, que poco a poco empezaba a quebrarse. La arenisca se mezclaba con el constante sudor de aquellos sujetos, que, sin detenerse siquiera unos segundos, se mantenían golpeando el suelo con la mayor de sus fuerzas. A los treinta minutos de perpetuo martilleo, un enorme agujero se encontraba ya formado, con suficiente espacio para que el cuerpo de un hombre lograra descender; Destrok, lanzando un fatídico golpe final contra el suelo, soltó la pesada comba dejando que esta callera hacia el ennegrecido sótano oculto. El sonido del golpe rechinó casi al instante, comprendiendo que la distancia hacia allí abajo era totalmente segura y estrecha.

– ¿Puedes ver algo allí? – Preguntó Mack, alcanzando su linterna al líder cazador, Destrok, tendido en el suelo, alumbró hacia el interior del agujero, iluminando la esotérica estancia, en busca de alguna amenaza.

En las Fauces del Vampiro (+18) [Actualizacion LENTA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora