OMEGA || ScorLy

Señora Malfoy, señora Potter

Lily Malfoy

Mucho tiempo ha pasado desde que el  nuevo Potter ha llegado al mundo.
El primogénito de James es tres meses menor que Harry.
Mi hermano con tal de agradarle al señor Nott ha llamado a su hijo Theodore, justo como su abuelo.
Theodore Potter.
Pero ese bebé es una cosita preciosa.
Se parece a James en el cabello pero tiene unos ojos azul eléctrico que a uno lo dejan alucinado.
Mi pequeño Harry es todo lo Malfoy que puede.
Rubio a más no poder. De ojos gris azulados.
Y entonces digo, ¡¿Dónde quedan mis genes?!
Sabes que amamos a ese cachorro más que a nada.
Pues la verdad así es.
Aunque es agotador. Es un niño muy activo y travieso.
Supongo que ha sacado eso de mí.
Tiene a su padre y a sus abuelos con la espalda doblada todo el tiempo.
Es un niño mimado.
Y sinceramente yo no me quedo atrás.
Me gusta achuchar a mi hijo.
Ni se diga más cuando se junta con su primo Leo y Theo los tres compiten por la atención de todos.
-omega, es hora-.el aroma a manzana verde me invade.
Scorp me saca de mis pensamientos.
Hoy es el cumpleaños de nuestro hijo.
Su segundo cumpleaños.
Mi pequeño está creciendo.
-ahi voy- mis feromonas denotan mi emoción.
Y pensar que tan solo ayer lo tenía en mis brazos por primera vez.
Voy a la habitación de Harry y lo encuentro en el regazo de su padre totalmente vestido.
-vamos mi príncipe, es hora de recibir a los invitados- le doy un sonoro beso en su regordeta mejilla y mi niño se ríe con fuerza.
Scorp me mira con dulzura.
-ven Rey Scorpion, que empiece la fiesta...

Antares Potter

Albus me sorprende.
Es totalmente insaciable.
Claro, como el no carga la panza...
Cómo sigamos así no llegaremos a tiempo para la fiesta de nuestro sobrino.
Pero sus manos traviesas se cuelan entre mis bragas.
¡Por Merlín!
Quiero, quiero, quiero...
Que se espere mi hermanito.
-no te interesa llegar tarde, ¿Verdad?- dice mi alfa entre mis labios.
-cállate y tómame, alfa presumido-.
Albus tiene una sonrisa torcida que me vuelve loca de deseo
Sus labios se apoderan de mi boca con agilidad mientras jueguetea con mi punto más sensible...

...

No puedo más.
Calor..., el calor es intenso hasta que el clímax no puede retrasarse un segundo más y nos llega a los dos a la vez, provocándonos unos gritos majestuosos sin importarnos que nos oigan hasta en la China.
Mis paredes se apretaban a él y mi alfa gruñe cada vez que lo hacen.
No quería que parase, que no parase nunca.
El nudo de Al nos sorprendió y nos dejó anclados muy profundamente.
Por Merlín, cuánto crece.
-un poco más, pequeña. Falta poco, aguanta- dice agitado y besando con dulzura mis labios.
Siento la hinchazón en aumento.
Pega su cabeza a mi clavícula justo debajo de la marca.
-¿Cuánto m-más, Potter?- me siento llena, demasiado llena.
-no sé... u-un poco aún. Espera...-su voz estaba temblorosa.
¡Por Salazar!
La temperatura de mi alfa es alta.
Si sigue así no podrá salir a ningún lado sin estar tranquilo.
Lo escucho jadear mientras el aroma a café me envuelve.
Decido acariciar su espalda con suavidad mientras yo trato de respirar bien.
Tiene arañones.
Sé que le arden.
No puedo evitar preocuparme por él.
Cuando el nudo baja totalmente, sale de mí provocándome un jadeo placentero.
Se acomoda a mi lado satisfecho y cansado.
Decido enviarle una nota a Lily avisando sobre nuestro retraso.
Al acaricia mi espalda mientras lo hago.
Siento mi piel erizarse con su toque.
-vamos alfa, necesitamos una ducha- digo besando sus enrojecidos labios-.
El me sonríe de vuelta.
-lo que digas, cariño.-
...

Mi precioso hijo ya está vestido y nos espera en brazos de nuestro elfo.
-el señorito Leo ya está listo, ama-
-gracias, Jerry.
Tomo en brazos a mi rubio cachorro.
-vaya ironía, omega.-
-¿Cuál es la ironía, alfa?-
-un Potter rubio. Pasa más como Malfoy-.
Su sonrisa me dice que está contento
-es que su madre es toda una Malfoy-
Mi alfa nos marca con su aroma.
Y nuestro cachorro sonríe ampliamente.
Sus ojitos gris verdosos buscan a su padre.
-aquí estoy, cachorro- lo toma en brazos y sus ojos se iluminan.
Cuánto los adoro...
Al llegar mi padre está ahí, tan guapo como siempre con su otro nieto en brazos.
-llegas tarde- me reprende.
Su aroma a menta es neutro.
-lo siento papá, pero avisé a Lily que lo haría.-
Deja de mirarme ceñudo y toma a mi hijo en su brazo libre.
Todo un abuelo consentidor.
Veo al tío Harry venir hacia él con Theo en brazos.
Ambos luchando por la atención de ambos rubios.
Lily está tan contenta.
Su aroma a algodón dulce me lo nuestra.
Pero está un poco más dulce.
Me lleva aparte mientras Al, Scorp y James se enfrascan en una entretenida conversación.
Mi madre y la tía Ginny se unen a nosotras.
-tengo algo importante que decirles-.
Vaya ironía, yo también.
Pero gracias a los arrebatos de mis hormonas lo he retrasado.
Decido dejar mi noticia para después.
Nos metemos al jardín de invierno de la casa.
Lily usa su varita e insonoriza el lugar.
-bien señoras, esto es algo muy importante-.
Su misterio está poniéndome de los nervios.
-ya mujer, deja el drama- digo tomando el brazo de mi madre.
-ya, está bien.
Ella respira hondo.
-mamá, tía Mione, Tari, yo...
-¡habla de una vez, hija!- tía Ginny no puede con la curiosidad.
-está bien... Estoy embarazada-
Tía Ginny abre mucho los ojos. Su aroma a fresas llena el ambiente.
Mamá también.
Hiperventilan.
Es la hora.
-bueno, pues yo también tengo una noticia que darles.- digo antes de que empiecen a flipar.
Mi madre toma con cariño mis manos.
-¿Si cachorra?-
Su tono me pone sensible.
No puedo con tantas hormonas.
-¿es lo que creo?- Lilu me mira con los ojos brillantes.
-yo también voy a tener un bebé- ya está, se los dije.
Todas empiezan a chillar.
El ambiente se llena de nuestras feromonas.
Lily me estrecha en sus brazos mientras gruesas lágrimas cubren los ojos de ambas.
-feliciades Tari-
-feliciades a tí también Lilu-.
Nuestras madres se unen al abrazo.
-¿Por qué están todas abrazadas?-
Mi padre y tío Harry están en la puerta.
-las estábamos buscando- completa tío Harry.
Con lágrimas en los ojos ambas nos abrazamos a nuestros padres.
El mío me marca con su aroma y me envuelve protectoramente en ellos.
-¿Qué sucede, princesa?
-estoy embarazada- se escucha al unísono.
Lily también se lo ha dicho.
Siento a mi padre tensarse.
Ay no, otra vez no.
-¡¡POTTER!!-
-¡¡MALFOY!!-
Más les vale correr a ese par...