Capítulo 8: Ámate a ti misma

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Ethan 

Un chico pelirrojo cantando sobre el escenario de un bar. Ser el mismo propietario de aquel bar.  Si alguien no sentía miedo era porque nunca se había parado al frente de un escenario. El corazón me latía a mil y se desbocaba por mi boca y las emociones se desbordaban por mi piel, sentía anestesiado todo mi cuerpo y los folículos pilosos enchinados. Mi mente me traicionaba por momentos. No. Ethan tú puedes. En esos instantes me sentía como el mismo chiquillo con cahetes regordetes que se dejaba morder por una niña.

Ni siquiera iba a cantar mis composiciones, similitud de covers que había ensayado un millar de veces. No es que no me hubiera presentado en otros escenarios, actuando, sin embargo, innegable sentir y  negar la inmensidad de sentimientos cada vez que me presentaba frente a un escenario, sea cantando, presentando, hablando o actuando.

Mis compañeros músicos, daban la señal para que comience.

—Esta canción va dedicada a todas las mujeres, que creen en sí mismas y en sus sueños. Ahí va. Epa. —Siguiendo el sonido del piano, entonado con mi voz. 

For All the times that you rain on my parade
And all the clubs you get in using my name
You think you broke my heart
Ohhh girl for goodness sake
You think I'm crying
on my own, well I ain't!

And I didn't wanna write a song
'Cause I didn't want anyone thinking I still care, I don't
But, you still hit my phone up
And baby I be moving on

And I think you should be somethin' I don't wanna hold back
Maybe you should know that
My mama don't like you and she likes everyone
And I never like to admit that I was wrong

And I've been so caught up in my job
Didn't see what's going on
But now I know
I'm better sleeping on my own

Mientras cantaba con sentimiento no pude dejar de mirar a la chica que estaba frente a mí disfrazada de manáger. Era ocurrente, loca,  se había colocado una falda lapíz gris que le ceñía hasta la cintura y un gran moño que le sujetaba en una cola hacía atrás sus rizos dejando relucir su hermosa cara en forma corazón, estaba siendo hipnotizado por su mirada y su lapicero que se movía en su cuaderno al ritmo de golpe de la guitarra eléctroacústica. Estaba siendo distraído. no pude ocultar una leve sonrisa al verla. parecí una secretraria, una linda y sexy secretaria.

No cantaba como Justin Bieber, ni siquiera me le parecía, pero las mujeres me amaban cuando cantaba aquella canción y no solo las mujeres, también los hombres. Era el hits del momento y tenía que aprovecharlo. Una melodía atemporal que podría haber cantado cualquier persona y que le gustaría hasta a mis abuelitos. No podía dejar de desbordar mi flamante coquetería.

Amy

Él llevaba sobre sí una chaqueta de cuero negra, una camiseta blanca y unos vaqueros rasgados. Mientras lo examinaba con ojos críticos y él a mí. Cantando, no lo hacía nada mal, tenía dominio escénico y su forma coqueta de mirar sonriendo mientras cantaba, podría conquistar a cualquier mujer, si ella no se había equivocado, él era de esos tipos. Era tan cínico dedicando  canción a las mujeres soñadoras y  quería desbaratar mis sueños... porque sentía que era personal, que tenía dedicatoria y era para mí. Era de esos tipos que creían dominar el mundo, con su voz y arrogancia. Viendo como las venas de su cuello se marcaban cuando cantaba con su melodiosa y rítmica voz, aquella voz que asemejaba el sonido ronco que hacen las hojas de los árboles en un bosque.  Con su sonrisa podía volverme loca de amor, y no quería ello, peor  aún amar a un cabeza de simio recortado.


...

—Concedáme esta pieza de baile, muñeca.

Estaba pasmada de la sorpresa y dudé por un instante,  en negarme a su petición

Aquel chico era apuesto y no me negaba por ese motivo era porque consideraba que no soy buena bailarina y tengo temor del ridículo en público. El cabeza de simio recortado se burla de mí a lo lejos. No se como descubre cual es mi miedo. La música que fluye a nuestra alrededor es eléctrica. Creo que las canciones electrónica no son difíciles de bailar o sí. porque no concoí a una buena amiga que me enseñará a bailar.

Demonios. Lo poco que sé bailar son generos como merengue y cumbia de los viejos tiempos. Observo hacia todos lados y me doy cuenta que los pocos seres que están bailando saltan así que los sigo.

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⏰ Última actualización: May 19, 2020 ⏰

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