Desvelo © ✔️

21) Desvelo

"Bienvenido"

"Bienvenido"

"Bienvenido"

Algo en la cabeza de Fer aterrizó, era un pensamiento que nunca podía parar. La imagen de Jorge muerto, le comía la cabeza por dentro, y le hacía pensar más, qué hacer con su existencia. No estaba en su mundo, parecía confuso, era un mundo que parecía no existir, o era el mundo real, y todo el mundo en el que vivió era el mundo irreal.

"Bienvenido"

En efecto, él había descubierto algo, Ana era la descendiente de Eros. Por ese motivo aun estando lejos de la casa, su mente le decía siempre, que esa persona andaba cerca. Dentro de la mente de Fer, la desolación estaba muy presente, sin embargo, eso era porque tenía la esencia de Tanatos, el ser humano suele tener mitad Eros y mitad Tanatos, con predominio de alguno de estos. Pero nada fue tan difícil como la vida misma. ¿Acaso los cambios pararon en ese mundo?, aún no sabía si ese mundo resultaba real. La vida donde él vivía era una vida en constante cambio, sin embargo, ese momento era diferente, nada parecía moverse, estaba solo, muy solo. De repente ve una figura acercarse, era Ana, se sienta a su lado.

-Calma, sé que ser un dios es difícil, pero, mientras estemos juntos, todo podrá suceder- Dijo Ana.- lo haremos por toda la eternidad de buena forma.

-Pero, ya no hay muerte, no hay nada, ¿crees que podamos revivir a Jorge?, ¿o a tu hermano?-Dijo Fer.

-Creo que si lo intentamos, no tendremos un cuerpo para hacerlo, para que haya una consciencia, debe de haber un ser presente que pueda manifestarla.

-¿Una idea no sobrevive sin un ser que la manifieste?

-En absoluto, lo que ellos eran realmente, no está aquí, no los podremos devolver, es el orden natural.

-La naturaleza lo quiso así, ¿no?

-En absoluto...-Ana esbozó una leve sonrisa.

-¿Entonces, esto es real?-Dije.

-Nada era real, hasta ahora, todo lo que veías, era lo que tu mente interpretaba de la realidad.

-¿Nada era real?

-No...

1) La idea de Fer

Ana me miró, yo la miré a ella, en sus ojos había un brillo, en un mundo tan oscuro. Ese portal que se había abierto en el cielo ya no estaba, al igual que ese portal que nuestra unión abrió en el suelo, o mejor dicho, "El Humano" abrió, aquella forma nuestra, que en la tierra tiene forma de humano, mientras que en el otro mundo tiene una forma inexplicable, incomprendible.

Ana se había unido a mi ser, pues, nos volvimos un dios completamente, la historia de la tierra había cambiado, aunque no sabría decir, si todo fue mejor, o peor. Después de todo, tanto Eros como Tanatos, se enorgullecieron de nuestro acto. El afán incomprendido de sobrevivir mío, hasta ese entonces, se había convertido en un sentimiento autodestructivo, que rogaba piedad al mundo, esperando que en algún punto, termine siendo aceptado por el mundo. No buscaba salvar a la gente realmente, sólo quería el aprecio de alguien, alguien que me ame, pueda compadecerse por mis sentimientos. La vida era cruel, demasiado, más de lo que había pensado en mi infancia. Mi infancia, la época en la que Jorge aún vivía, o al menos mi visión de él estaba ahí, Jorge siempre sonreía, siempre jugábamos, siempre que podíamos. Ahora, su ente inmaterial está en algún lado de este basto plano, o del resto de, donde no conozco. ¿Cuál es mi origen?, ¿el origen de todo?, ¿nuestro objetivo?, ¿Quién hizo a los dioses?. Estoy seguro que en algún lado de la Alfa Machine (Máquina Alfa), estará toda la respuesta. ¿Qué pasó con David?, ¿Qué pasó con el resto del mundo?, ¿Qué pasó conmigo?, ¿Y con Ana?, ahora mientras esté aquí, pensaré eternamente en lo que Eros y Tanatos manden, y a su vez, las entidades creadoras les manden. Y pensar que, todo comenzó con una pesadilla, comenzó con mi insomnio, es decir, mi desvelo.

Obra escrita por © J Wolf Iylnihip

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