—¿Soviet?—insistió de nuevo—¡Soviet! ¡No es gracioso..!
El español recorrió todos los rincones de su casa, sin encontrar al soviético. Había mirado en todos lados..
¿Como podía desaparecer así sin más alguien que medía 2,20?
[...]
—Lass mich gehen!! (¡Déjame ir!)
España levantó la vista de a donde estaba mirando. Esa voz...
El sótano. Claro, como no había pensado eso antes...
Bajó con algo de dificultad, estaba oscuro y el interruptor se había jodido hace unas semanas. Solo había un luz que funcionase en el sótano, era una pequeña lámpara en un escritorio que se encontraba a unos metros de la entrada.
—Ugh, mierda.
El interruptor tenía...
¿Sangre?
Alto asco.
Prendió la lámpara, se limpió la sangre en la camisa y se dispuso a obsevar su entorno.
Vale, todo normal.
El sótano huele a historia,
Las cajas de cosas inservibles siguen en su sitio,
El escritorio sigue igual de sucio que en la guerra civil,
Todo normal....
—¡QUE ME SUELTES MALDITO COMUNISTA!
Em..
Se giró algo confuso y miró hacia el fondo del espacioso sótano, donde por la poca luz que había no lo había notado, pero había 2 presencias más allí.
La Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, URSS o Soviet.
Y Alemania Nazi, Third Reich o Nazi.
El anterior mencionado iba semi-desnudo.
El bicolor de miró la escena con algo de asco, porque se notaba que al nazi le habían pegado, y posiblemente azotado.
—URSS.
El ruso no pareció reaccionar demasiado rápido, aún seguía en la luna.
—Este puberto estaba en la puerta del jardín, que quieres que haga.
España caminó unos pasos hacia ambos presentes y se agachó ante el nazi.
↠💕↞
—¡Y entonces el me agarró por el cuello e intentó matarme! ¿¡Joder, la guerra terminó, que más quieres!?
—¿¡Sí, y que pasa con toda la gente que murió, imbécil!?
—¡¡Pues que se queden en la tumba, como deberías estar tú!!
—¡¡Imbécil!!
—¡¡Idiota!!
—¡¡Puberto!!
—¡¡Estúpido!!
—¡¡Marica!!
El español observaba la escena irritado.
—¡¡Que os calleís, coño!! ¡¡Quiero que me expliqueís que hacía el enano en MI jardín; y URSS, tu no puedes salir de la casa, podrían verte!!—explotó España, agitando sus brazos, frenético; captando la atención de ambos presentes.
[...]
—Yo no tengo ni idea de como llegué a este tétrico sitio, pero yo estaba en otro lugar! No sé como salí de allí... Había mucha niebla, así que solo seguí caminando y rompí un gnomo de jardín, y...
El bicolor abrió los ojos como platos.
—¿¡Que le hiciste qué!?—gritó asustado, despertando al ruso que se estaba medio durmiendo.
—Lo rompí, ¿Porqué...?
El bicolor se levantó del sillón donde estaba sentado, y apurado salió de la casa para gritar desde afuera;
—¡¡ME CAGO EN LA PUTA!!
Luego entró algo decaído sosteniendo en sus manos unos trozos de porcelana.
Pero luego cambió su expresión a una de frustración, aunque no dándole importancia al gnomo.
—De todas maneras era made in United Kingdom..