Nuevo integrante

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Kyojuro estaba perdido mirando el cabello negro enrededado en uno de sus dedos, mientras escuchaba de fondo la canción de Elvis Presley.

Sabia que su esposo amaba Lilo & Stitch, siempre que ganaba al Piedra, Papel o Tijeras en la noche de película, la elegía. Eso y Mulán, pero con menos frecuencia.

Él no se molestaba, es más, amaba ese lado infantil que su serio marido se guardaba tan dentro suyo.

Como repetía los diálogos, cantaba las canciones de Elvis, o cuando decía “Shhh, esta es la mejor parte”. Con el tiempo se dio cuenta que la mejor parte para Tomioka era la pelicula entera.

Recuerda, que en su aniversario pasado, dispuesto a hacerle una broma, le obsequió una camisa ancha y azúl que tenía escrito Ohana en el pecho. Creía que se enojaría o le tiraria el regalo en la cara, pero no, sólo se sacó la camisa que ya tenía puesta, totalmente serio y se puso su obsequio, para luego sonreír y decir un dulce “Me encanta... ”

Le gustaba que se mostrara como un niño cuando siempre se comportaba como el más maduro y el padre de todos.

Los chicos siempre venían aquí para buscar consejo, desahogarse o cenar gracias a Giyuu.

Parecían adolescentes que aun necesitaban de sus padres.

Hablando de padres, habia un asunto que aun quería hablar con su esposo.

Algo realmente importante y que le ha rondado la cabeza desde ya hace tiempo.

Quería tener una familia.

Iría con calma, no tan directamente.

– ¿Te has dado cuenta que los chicos nos tratan como sus padres? – Inquirió con voz suave.

Giyuu bajó el volúmen de la televisión.

Si algo le gustaba más que esa película, era hablar de los chicos. Pero eso no lo admitiría nunca.

– No me sorprendería, llevamos años siendo su protección.

– Somos como una familia, una enorme. – Comentó y escuchó una leve risa.

– Tanjiro es el hermano mayor que siempre ayuda a su hermanitos.

– Él y Genya son los hermanos gentiles, sin duda alguna. – Agregó. – Nezuko es la hermana que le gusta jugar con sus hermanos pequeños.

– Zenitsu es el niño llorón que siempre quiere atención y Senjuro el que más se parece a su papá.

– Kanao es la hija bien portada que nunca hace nada.

– Rui es el que se ve tranquilo, pero secretamente está planeando la dominación del mundo. – Giyuu se rió de su propio comentario.

– E Inousuke es la mascota.

Ambos estallaron en carcajadas.

Amaban a esos chicos, a cada uno de ellos.

Como no, si cada uno de ellos se les dirigieron con tanta confianza que, a la larga, era imposible no ser una respaldo.

Como cuando Zenitsu llegó a su departamento, con la cabeza agacha, sin mediar palabras.

Sólo cuando los tres estuvieron sentados en el sillón y el rubio menor habia tomado una trago de su té fue cuando lo dijo.

“– Mi abuelo murió. ” echándose a llorar desconsoladamente.

Lo acompañaron durante todo el trayecto de duelo.

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