Aquella figura que se reflejaba en el espejo, peinándose su largo cabello de un color pelirrojo, de ojos claros y de piel joven y suave.
Estaba absorta en su imaginación cuando la voz de su madre la interrumpio -Áriel a cenar - Áriel corrió al comedor donde le esperaba un gran plato de sopa. En ese momento sonó el timbre, Áriel como siempre se levantó de un salto y corrió hacia la puerta. Al abrirla vio a su padre, se había ido hacía dos años cuando ella tenía diez.
Parecía cansado, estaba sucio y olía como si hubiese estado entre cubos de basura. Entonces Isabel, su madre, se acercó a la puerta -Áriel, quien ha llamad... -no acabó la frase. Recogió a George del suelo y le acostó en el sillón. Cuando parecía estar mejor, le ayudo a ducharse, le cambió de ropa y lo volvió a acostar.
A la mañana siguiente no había ni rastro de George, solo una nota en la que ponía: -Siento haber aparecido de golpe y haberme ido del mismo modo. Teneis que salir de Irlanda, en Londres estaréis más seguras -
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Todo puede cambiar en cuestion de minutos[EDITANDO]
RandomÁriel west una chica comun,o no tan comun...