Misterioso Londres

En clase

La Señorita Johnson, maestra en The Latymer School, normalmente, faltando cinco minutos para acabar la jornada de clases, hablaba a sus alumnos sobre historia, mitos y leyendas, esto hacia que los estudiantes disfrutaran mucho de sus clases y se interesaran en aprender más cada día. 

En esta ocasión, la maestra hablaba sobre uno de los mitos más famosos de Londres, hablaba sobre los leones de Trafalgar Square. 

—Cuenta la leyenda que, si el Big Ben alguna vez tocase trece campanadas, los leones se levantarían para dar una vuelta completa alrededor de la estatua del almirante Horatio Nelson, del que se cuenta que después de recibir un balazo durante la batalla de Trafalgar, fue trasladado a tierra, oculto en un barril de coñac— Dijo la maestra

—Ah, ¡es enserio? todos aquí sabemos que el Big Ben nunca dará trece campanadas, eso es lógico...— alegó Angus, el cual era un chico un poco problemático — ¡esas leyendas solo son cosas que invitan a la gente a volverse loca intentado cumplirlas y verlas¡ — agregó el chico

— Angus, si no quieres aprender, puedes irte del aula— le contestó la señorita Johnson tranquilamente 

Angus se estuvo sentado, no parecía que fuera a reaccionar ante la contestación de la maestra 

—Angus, ¿te quedaras hasta que salgamos de clase?— le preguntó la maestra 

Angus se quedó callado con una actitud de desdén hacia la señorita Johnson 

Maximus Griffin, quien todos llamaban Max, era uno de los mejores estudiantes de The Latymer School. Sonó la campanada de salida, ya eran las 5:00 pm, Max salía de clases cuando decidió quedarse a preguntarle a la señorita Johnson sobre la leyenda de la que había hablado en clase, pues, era un chico muy curioso, se acercó al aula y tocó la puerta, la maestra abrió la puerta y cuando vio a Max se hizo en su rostro un gesto de alegría

 —Max, que bueno verte otra vez, pero ya es hora de salida, deberías estar afuera— le dijo amablemente la maestra a Max

—si, lo sé, lo siento maestra, pero solo quería preguntarle a usted sobre la leyenda de los leones que nos contó en clase— le contestó Max — lo único que quería era saber mas sobre eso— agregó Max

—ah, ya veo, ¿entonces quieres más conocimiento sobre la leyenda de los leones de Trafalgar Square?— preguntó la maestra

—¡sip! eso es lo que quiero— afirmó Max muy alegre

—si quieres ven mañana en el recreo y te explicaré todo lo que quieras, por ahora estoy ocupada— le contestó la señorita Johnson 

—ok, vendré mañana, gracias señorita Johnson— dijo Max —adiós— añadió

—adios Max— le dijo la maestra mientras cerraba la puerta del aula y Max se alejaba de ahí. 

Al día siguiente, un sábado, Max decidió ir a Trafalgar Square a contemplar detenidamente la estatua del almirante Nelson y los leones que la rodeaban

—si que es hermoso...— dijo Max afirmando en voz baja hablándose a sí mismo mientras veía la plaza

—¡verdad que sí!— dijo Kate, la mejor amiga de Max, ella lo dijo como gritando, por lo cual asusto a Max

Max pegó un brinco por el susto —¡¡¡¡q-que te pasa Kate???— dijo Max —¡casi me matas de un susto!— dijo max, se sentía como si se le fuera a salir el corazón 

—ah, lo siento Max, solo quise venir a la plaza un rato, y como te vi aqui, queria saludarte— aclaró Kate un poco apenada.